Deep Feelings ×Tokyo Ghoul×

Let's go home, Hide.

No sabía cómo, pero estabas frente a mí en el interior de la cafetería donde trabajaba; Anteiku.

No esperaba el que me dieras la bienvenida  con los brazos abiertos a pesar de que fuera un Ghoul, ni siquiera te interesó y por eso me diste un café, el café que siempre tomaba para saciar el hambre de carne.

Hablamos un poco, me confesaste que habías ingresado en CCG*, me sorprendí, dado a que la CCG se encarga de matar a los monstros como nosotros.... Y tú eras mi amigo, pero a la vez me hizo sentir muy especial.

*CCG:Comisión de Contramedidas Ghoul

Ambos sabíamos que estabas rompiendo las reglas. A pesar de que fuera un Ghoul, un ser catalogado por no saber sentir y solo pensar en asesinar, ser un comedor compulsivo, seguía siendo humano, y tu mi amigo, más bien mi hermano, por lo cual ninguno de los dos nos podíamos hacer daño de forma intencional.

¿A que va esto?

No quise hacerte daño desde que supe en lo que me había convertido, por lo cual te evite, pero ese fue mi peor error. Y ese error es la causa de que este escribiendo esto.

En lugar de ser una persona que hiere a otros, convertirse en una persona a la que hieren.

Esa frase siempre me la decía mi mamá, me crie con ese ideal, y seguí con el incluso después de que ella muriera por trabajar todo el día sin descanso para mantenerme y poder prestarle a su hermana, mi tía, el dinero que ella le pedía prestado.

No supe parar de llevar a cabo ese echo aunque Rize me lo dijo cuándo había sido secuestrado por Jason, cuando termine con ese idiota, seguí mi camino, pero no deje de lado esa frase. Me fui con Ayato al equipo contrario si se le puede llamar así. Y seguí con los errores.

Le di la espalda a Anteiku, el lugar que me recibió con los brazos abiertos aunque no conocieran mi nombre, el lugar que me acogió solo con la condición de trabajar en el día en el local.

Le di la espalda a Yoshimura.

A Touka

Hinami

Yomo

Ryouko

Uta

Itori

A ti.

A todos.

A cada uno de ustedes, y entre los primeros estabas tú, ese amigo que siempre estuvo conmigo en cualquier momento y me dio su apoyo.

Ese amigo que me compro mi hamburguesa preferida después de estar en el hospital por causa de Rice, ese amigo que no dejaba de llamarme incluso si no le respondía.

El amigo que me alentó a probar cosas nuevas, pero sin dejarme solo o darme la espalda.

Agradezco que me dieras la oportunidad de ser tu amigo hasta el final.

Hasta tu último suspiro, tú ultima sonrisa, tú ultima visión de este mundo.

Gracias por darme la oportunidad de tener en mis manos y memoria por siempre el recuerdo de nuestro último instante juntos.

Aprecio profundamente el que me aceptadas tal y como me convertí desde ese día y que nunca me dejaras solo, y la prueba está en que te unieras al CCG y no fueras tras de mi para asesinarme, que estuvieras conmigo hasta hoy y sin pedir nada a cambio.

Espero, de todo corazón, que estés donde estés, te encuentres bien, y puedas descansar.

Y eso lo comprobar algún día, no se como ni cuando, pero lo haré.

Let’s go home, Hide.