C a p. 3

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Mikayla POV.

Llegue a casa, subi a mi habitación ya que mi madre no estaba me quite el maldito uniforme y anduve en ropa interior, a las 4:10 p.m. me di una ducha, sali y me vestí con unos vaqueros negros rasgados de las rodillas, una blusa color verde militar lisa sin nigún estampado y mis adidas, me senté en frente del tocador cepille mi cabello y lo deje suelto, y me maquillé naturalmente.

Baje y faltaban 15 minutos para que me recogieran, fui a la cocina y tomé una cuchara y el bote de helado, salí de la cocina y me senté en el sofa viento televisión y comiendo helado. Escuché el claxón de un auto, apagué la televisión, deje el bote de helado en la nevera, cogi mis cosas y salí de casa vi a mi mejor amigo recargado en su auto iba vestido con unos vaqueros de mesclilla, una camisa de cuadros rojo con negro y sus tenis le sonreí y fui a darle un abrazo, su perfume inundo mis fosas nasales me separé de él y me dio un beso en la frente.

–¿Ya nos vamos fea? – Dijo sonriendo y asentí con la cabeza y nos subimos a su auto, lo puso en marcha hacia el centro comercial, aparcó el auto en el estacionamiento entramos al CC y fuimos a la heladería que estaba a pocos metros de la entrada, caminamos hacia ella y nos adentramos a la heladería los vimos sentados en una mesa a los chicos riendo, fuimos por nuestros helados y nos acercamos hacía ellos.

–¡Chicos! ¡Por aquí! – Dijo Mandie, rei al verla y nos hicieron un espacio para que nos sentaramos, Matt se sentó a lado de Jessey creo que así se llamaba y de Karly mientras yo me senté a lado del chico con el que choque hoy, Blake creo que así se llama y de Kalesie.
–¿Cuantos años tienen ustedes? – Preguntó Mandie señalando a Blake y Jessey, ella era muy preguntona por así decirlo.
–Yo tengo 19 años – Dijo Jessey – Y él 16 – Dijo señalando a Blake, este estaba muy sumergido en sus pensamientos que ni prestó atención hacia la pregunta de Mandie.
–Aún es un niño – Dijo Kalesie con voz tierna, Jessey le dio un leve golpe a su hermano y él lo miró mal.
–Te estan hablando idiota – Dijo Jessey.
–¿Qué pasa? – Dijo Blake.
–Estaba diciendo que aún eres un niño – Dijo de nuevo Kalesie, yo solamente rodee los ojos divertida.
–Ay perdone viejita – Dijo Blake burlón, todos reimos menos Kalesie.
–No es gracioso – Dijo Kalesie manteniendose seria ya que quería reirse.

Nos la pasamos en risa y risa, nos despedimos todos, cada quien se fue a su respectiva casa, fue divertido haber pasado la tarde con ellos, Matt me llevó a mi casa al llegar apagó el motor y voltió a verme.

–¿Qué? – Le dije divertida alzando una ceja.
–Nada – Dijo Matt – Me di cuenta de algo.
–¿De qué? – Le pregunté a mi querido amigo.
–Que Jessey no dejaba de ver a Karly – Dijo con una sonrisa medio picara.
Me reí – ¿Celoso? – Le dije divertida.
–No, no claro que no pero también me di cuenta de que Blake te veia de reojo – Dijo de nuevo con esa sonrisa lo miré frunciendo el ceño.
–¿Qué? – Pregunté.
–Que Blake te veia de reojo, ¿No escuchas? – Dijo Matt divertido.
–Si, si te escuché pero es estúpido completamente estúpido Matt – Le dije mirandolo a los ojos.
–Yo solamente te digo lo que vi – Dijo encogiendose se hombros.
–Adiós Matthew que inventa cosas que no son – Le dije divertida y él rio, le di un beso en la mejilla y me bajé de su auto.
Abrí la puerta de mi casa, todo estaba oscuro subi las escaleras vi prendida la luz de la habitación de mi madre me acerqué y la vi en pijama con sus lentes de lecturas leyendo un libro.
–Hola mamá – Le dije acercandome a ella y dandole un beso en la mejilla, bajo el libro y le puso el separador en la parte donde se quedó.
–Hola cariño, ¿Cómo te fue? – Me dijo mi mamá, se hizo a un lado para que yo me acostara a lado de ella y eso hice, me tapé con la sabana blanca y mamá me miró con sus ojos mieles.
–Muy bien mamá, ¿Y a ti? – Le dije sonriendo, hace tiempo que no pasabamos un rato de madre e hija y siempre aprovechaba esos ratitos.
–Cansado, pero bien hija – Dijo mamá – Por cierto, tu padre y yo haremos una cena de trabajo ya que llegaron una pareja de empresarios y queremos hacer una cena de bienvenida, será este sábado – Dijo viendo un punto muerto de la habitación.
–Mamá, ya tenía planes para salir este sábado – Le dije a mi mamá, ya que todos los sábados como siempre iba a un famoso club aquí en Los Ángeles y esta vez ibamos a ir mis amigos y yo.
–Lo siento si interrumpimos en tus planes cariño, pero esta cena es importa para nosotros a demás no te aburriras ya que tienes 3 hijos, dos chicos y una nena –Dijo mamá, ¿Y eso a mi que me importa? Yo quiero ir al club – Por favor hija, hazme este enorme favor ¿Si? – Dijo mi mamá haciendo cara de cachorro.
Bufé – Está bien – dije rodando los ojos, mamá hizo un pequeño chillido de la emoción, me abrazó y me dio un beso en la frente.

Me despedí de mamá, y me fui a mi habitación me puse mi pijama y me acosté en mi cama y me quedé dormida.

¿Andar con Menores? ¡Nah!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora