Pasado

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Caminabamos con el rastreador en la mano intentando localizar la base
-¿Estas seguro de que es por aquí?
-Claro que si, juraría que la vi-A eso el radar empieza a pitar. Miramos a todos lados hasta que encontramos una pequeña cúpula camuflada por la vegetación del lugar. Al estar enfrente observamos que es enorme
-Yo entrare, vosotros esperad aquí-Salgo corriendo antes de que reprochen. Corro por innumerables pasillos estrechos y salas amplias llenas de ordenadores modernos.
Me adentro un poco mas, pero mis pies son detenidos haciendo que se peguen al suelo y mi cuerpo se detenga en seco. Intento zafarme, pero nada, es imposible.

Oigo unos pasos rápidos y en un segundo me encuentro enfrente de una eriza morada de cabellos oscuros y pelo muy corto. Llevaba en su mano una especie de espada en forma de luna. Su mirada recorre cada parte de mi cuerpo, acerca la hoja de la espada a mi cuello dispuesta a cortarlo. Cierro los ojos
-Espera-Abro los ojos y me encuentro con una loba rubia y de ojos morados.
-La presa es mía, te recuerdo que aun es mi turno- La eriza la mira con resentimiento y le entrega la espada. Esta al entrar en contacto con la mano de la loba se vuelve un cetro con una luna en la parte de arriba. La eriza se retira y nos quedamos solos
-¿Tu también tienes intenciones de matarme?
-¿Que haces tu en un lugar como este?-Sus ojos me perforan con frialdad y rencor
-Simplemente buscaba información
-¿O a una persona?-Intento moverme pero vuelve a ser imposible, mantengo mi semblante de siempre
-¿Porque yo vendría aquí a buscar a alguien?
-No se...dímelo tu Sonic
-¿Por lo menos puedo saber tu nombre?-Levanta una ceja sin apartar su mirada
-Luz
-Y dime Luz, ¿Siempre eres así de seria?-Ella simplemente da un suave golpe al suelo con su cetro, en ese momento siento un dolor atroz por mis pies y piernas
-Ella no quiere verte, largate
-N-no, debo hablar con ella
-No esta
-¡¿D-donde la habéis metido?!-Ella cierra sus ojos y cierra su puño, el dolor se extiende haciendo que me retuerza
-Nosotros no hemos hecho nada
-M-mentira, e-ella.....ella no era así
-A ella la provocaron a ser así
-¡Mentira! Ella.....
-Ella te odia
-¡Vosotros habéis hecho que me odie
-Tu solo lo as hecho, ¿No recuerdas?
-¡Callate!-Consigo mover un poco mis pies y me acerco a ella, el dolor aumenta
-¿Acaso sabes nuestra historia para juzgarnos?
-Pues cuentamela
-No necesitas saberla
-¡Sueltame!-Su voz neutra me pone de los nervios, quiero que se calle, que deje de torturarme
-Pues deja la en paz, ella es feliz
-¡Mentirosa! S-su corazón es bondadoso y puro,¡Nunca haría daño a nadie
-Quizá alguien le hizo tanto daño que la obligo a ver desde otro aspecto el ser bondadoso y dulce
-Tu no puedes culparme de algo que no sabes
-Yo no he dicho nombres-Agacho la cabeza y cierro mis ojos. Otra clase de dolor se propaga por mi interior
-Yo.....
-No me interesan tus lágrimas, simplemente te pido que aceptes que ella ahora es feliz tal y como esta, por lo tanto deja la en paz
-Pero...yo....-Levanto mi cabeza y la miro con todo el odio que puedo reflejar
-D-dile que......yo...tsk-Ella pone un poco mas de atención a mis palabras
-L-lo siento.....-Ella sonríe y de repente pierdo el equilibrio y caigo al suelo
-Le daré el mensaje, ahora fuera-Noto como se aleja, yo simplemente no me muevo. Noto como alguien tira de mis púas levantándome la cabeza
-Sigueme-Mis ojos se encuentran con una loba pequeña de ojos color miel. Yo no me muevo
-¡Vamos estúpido!¿No quieres saber su historia?-Levanto la cabeza y la miro de lado
-¿Acaso tu me puedes ayudar?-Ella asiente con una sonrisa de lado y me hace señas para que calle. Me levanto
-Sigueme-Ella empieza a correr a gran velocidad por el pasillo, la sigo y llegamos a una especie de sótano blindado luego de bajar unas 209 escaleras
-Aquí no hay cámaras-Miro el lugar, típico de una guarida de Eggman. Ella se sienta en una especie de robot destruido
-Sientate, va para largo
-¿Por que quieres ayudarme
-Porque como todos, queremos lo mejor para ella, y si no la puedes dejar en paz viéndonos como nos ves, intentare abrir tus ojos-No digo nada y me siento.

Flash back
Una "pequeña" eriza de unos 15 años de edad se encontraba paseando por la triste ciudad.
Ayudenme!-Ella al escuchar el grito salió corriendo mientras sacaba su martillo. Intento ayudar a la mujer del ladrón, pero llego tarde, ya no tenia su bolso.
-Gracias por nada-Era una señora con un pelo desafiante a la gravedad y una vestimenta un poco extraña
"Que rara" pensaba Amy. Guardó su martillo y suspiró. Sus recuerdos volvieron haciendo que esbozara una sonrisa algo triste. Dejo sus pensamientos de lado y empezó a buscar al ladron, sabia que no seria fácil ya que la ciudad no era pequeña.

Luego de un largo rato dando vueltas se sentó en una esquina que daba a un callejón y empezó a llorar.
"El tenia razón, no valgo para nada" .
Saco su martillo y lo lanzó pero este volvió a ella
-Si....nunca podre escapar de mi pasado-Se volvió a levantar y sintió como la cojian por la espalda.
Alguien la tiro al suelo, pero no pudo ver quien era, estaba demasiado oscuro. Esa persona se abalanzó sobre ella, quería hacerle daño. Se intentaba defender con su martillo pero era inútil. El llanto volvió al sentir algo afilado sobre sus brazos y un dolor atroz a continuación. Pero no volvió a sentir presion sobre su cuerpo.
Abrió los ojos y se encontró con ese sujeto en el suelo siendo golpeado por alguien. Ella intento levantarse pero no lo podía hacerlo sola debido a sus heridas.
El segundo sujeto se giro al acabar con el otro y la miro. Amy se quedo helada por esos ojos verdes y fríos que la observaban, pero su miedo se fue por la calma que estos emitían.
El le tendió su mano a lo que ella con duda la tomo. No tardó en ver sus heridas.
-G-gracias....¿Puedo saber tu nombre?

See You AgainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora