Elegancia y REBELDÍA

3. La carrera de la muerte

- Buenas noches, Señor Woods. - Me saludó Samantha.
Una parte de mi esperaba que pronto conociera oficialmente a la hija de los Moore pero no pensé que iba a ser tan pronto.
Y ella no se parece en casi nada a la Samantha Moore que vi en el instituto. La Samantha que conocí hoy en la mañana era tímida, y no parecía segura de si misma, en cambia a la chica que observo ahora le soba seguridad.
Me acerque a la mesa y tome su mano derecha, dándole un beso como gesto de cortesía.
-Un gusto conocerla sñrt. Moore. - Si se sorprendió por mi gesto no lo demostró.
- Muchas gracias por aceptar presentarse esta noche, tome asiento por favor.
Hice caso y tome asiento en frente de ella.
- Espero que acá sirvan buena comida.
- No creó que la decepcionen. - La verdad no sabía quien había elegido el restaurante, pero supongo que lo hizo mi padre.
- Entonces, ¿fue usted quien organizó esta bonita velada?
- Honestamente poco he tenido que ver con la reunión (?) De hoy.
- Que raro... - Dijo en un tono inaudible.
- ¿Disculpe?
Antes de que Samanta pudiera responder, se acerco el camarero a tomar nuestra orden.
Luego de que nos trajeran nuestro pedido, comimos en silencio, yo solo me dedicaba a comer y a analizarla, disimuladamente alcé la cabeza para observarla, al parecer ambos pensamos lo mismo y nuestras miradas chocaron, por un momento me vi sumergido en sus hermosos ojos pardos, creo que jamás había visto algo tan hermoso en mi vida.
Baje la cabeza un poco sonrojado (?)
« Maldición ¿Que me está pasando? »
- Asi que... Seguramente heredaras la empresa de tu padre, ¿no?.
Aún sabiendo que la pregunta solo era para buscar un tema de conversación me puse tenso.
- Eso es lo que tengo planeado por ahora, lastimosamente no puedo predecir el futuro, señorita Moore
- Samantha, por favor, al final algún día podríamos terminar siendo colegas. - Me dedicó una amplia sonrisa como si estuviera seguro de ello.
- Podría ser...
- El futuro es muy incierto, ¿no?, como las personas... - Divagó mientras miraba su copa de vino.
- Supongo que desearía poder entender al futuro y a las personas.
- A mi también, señor Woods.
- Dime, Ryan, tampoco soy tan seños que digamos. - Dije haciendo una mueca.
- Tal vez tengas razón ... Tal vez
Me quedé maravillado con su hermosa risa, era delicada conmovedora, todo de Samantha me maravillaba.
Luego de nuestro pequeño momento feliz, acompañe a Samantha hasta su auto.
- Espero que hayas disfrutado de la velada. - le dije mientras subía a su auto.
- oh, claro que sí, buena comida y buena compañía, gracias por todo. - sonrió otra vez, dejándome con ganas de pasar más tiempo con ella.
Justo antes de que la puerta del lado de Samantha cerrara, ambos recibimos un mensaje, al mismo tiempo.
Una vez que vi como el auto se Samantha doblaba a la izquierda y se perdía entre los autos, abrí el mensaje.

James <3
Solo por hoy, grandes ofertas, ya lo sabes, en el mismo lugar y a la misma hora c:

Asi que hoy hay una carrera de motos cerca de la Montaña Muerta, interesante, tal vez me ayude a calmar mis estúpidos pensamiento.
Antes de que encendida la moto, recibí otro mensaje...

James <3
Solo por hoy hay doble, azúcar rubia a tan solo 2 dólares, no te lo puedes perder. c:

La rubia compite hoy.... Genial, que más podría pedir .
La rubia es una chica que nadie ha podido vencer, y tampoco nadie sabe quién es, además aunque los organizadores no le envían un mensaje directamente ella siempre sabe el lugar y la hora de las carreras. La mayoría quisiera acercársele y conocerla, pero lo que a mí me interesa es vencerla. (N/A no si, traficando rimas xd(?))
Arrancó y llego en 20 min a la Montaña de la Muerte, se le llama así porque no ha crecido nada de vegetación en los últimos 20 años además de que muchos murieron ahí.
- ¡RYAN! - June.... Mi hermana se acerca corriendo hacia mi y me abraza tan fuerte que se me dificulta respirar.
- M- me ahogas...
- Perdón
- ¿Qué haces aquí?
- Eso no importa, dime qué no estás pensando competir hoy... Estas loco si piensas que te voy a dejar hacerlo.
- June... No necesito tu permiso
- Está bien - Su tono se volvió frío - Has lo que quieras, siempre haces eso ¿No?
June se dirigió hacia donde estaba el carro y se fue.
De cierto modo me siento más tranquilo, si algo llegará a pasarme ella no tendría que verlo.
- Corredores diríjanse hacia la línea de salida. - Gritó el presentador.
Me di cuenta de que sólo conocía a dos tipos que había vencido anteriormente pero todos me miraban con profundo odio.
Cuando casi todos estuvimos posicionado empezó la cuenta regresiva.
- El recorrido es simple, suben la montaña y luego la bajan del otro lado, ahí estarán esperándolos.
En sus marcas, listos,...... FUERA!
Ni bien se oyó el disparo una chica de cabellera rubia apareció detrás de mí, no sé cómo hizo para pasar al resto, pero no importa, esto se pondrá interesante.
Intentaba cerrarle el paso pero ella se movía más rápido, si seguía así, yo terminaría chocando con un árbol. Decidí apartarme de ella, en el auto vi unos mapas, del lado izquierdo hay menos árboles, será más rápido ir linealmente.
Cuando intenté hacerlo, la rubia me siguió, intento pasarme pero por suerte había un árbol delante mío que ella tuvo poco tiempo para evitar.
- Estás acabada, rubia.
Cuando creí que iba a frenar para no chocar, aumentó la velocidad y escaló el árbol.
No tengo idea de cómo logro bajar del árbol, pero ya no importa, sólo tengo que concentrarme en ganar.
En la bajada, esquivar los árboles fue más fácil, creo....
El chico de mi izquierda no vio que había un hoyo y perdió el equilibrio, lo peor fue el impacto .. ufff.
Cuando estaba a 3 metros de la línea de llegada, la rubia volvió a colocarse detrás mío, y empezó a acelerar como si no hubiera un mañana, hice lo mismo, pero no me di cuenta que delante mío había una roca, intenté giras pero aun asi la parte trasera de mi moto impactó, haciendo que cayera cuesta abajo a toda velocidad.
- RYAN
¿Ah? Acaso es la voz de Samantha...
Después de dar un millón de vueltas llegué a la línea de llegada, que irónico.
Intenté moverme pero sentí como si mi cerebro no pudiera conectarse con el resto de mi cuerpo.
- Oh, dios. - Escuché que la rubia bajaba de la moto y se acercaba rápidamente a mi. - ¿Donde están los demás? Llamaré una ambulancia, resiste.

- ALTO AHÍ NENA. - No estoy seguro de quién dijo eso, ahhh, ¿Por qué por lo menos no podía caer de costado? Sólo veo el puto piso. Maldición...

N/A

Yo subiendo caso después de 1año alv, que bueno que nadie lee esto :'v

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