¿quieres un beso? // larry [adaptación]

five, end.

6 años después.

Louis despertó de un largo y cómodo sueño, gracias a una ligera luz que venía desde la ventana. Estaba desnudo entre las sábanas blancas. Miró toda la habitación, no encontró a su acompañante. Solo encontró ropa tirada en el suelo.

Se levantó, solo se puso una polera adidas que usaba para dormir, cosa que esta noche no la usó. Se dirigió al baño y se lavó la cara, intentando parecer menos zombie.

Salió de la habitación para bajar, mientras bajaba las escaleras sintió un rico olor a huevos con pan tostado, definitivamente era su esposo. Bajó y se apoyó al marco de la puerta de la cocina, mirando a un recién levantado pero sexy hombre, estaba en solo polera, nada más. Se acercó y abrazando por detrás de los hombros.

— Buenos días, mi amor.— dijo Louis dejando pequeños besos en la espalda de su esposo.— tú sí sabes complacerme.— comenzó a pasear las manos por el abdomen de su esposo.

— Pues claro que sí, Lou.— se desató del agarre, para dar la vuelta y quedar frente a Louis.— por algo estás casado conmigo, ¿o no?— posó sus manos alrededor de la cintura de Louis.

— Amo cuando me dices Lou, Hazz.— lo volvió a abrazar por los hombros.— te ves lindo hoy.— sus manos comenzaron a bajar, dirigiéndose al miembro de Harry, para sobarlo. Harry soltando un leve gemido.— aunque tú siempre eres lindo.— lo apretó, otra vez Harry gimió.— esto es solo mío, bebé.— le dio otro apretón.

— No te bastó anoche, ¿verdad?— Louis solo respondió dándole un apasionado beso.— parece que no.— comenzó a dejar besitos en los labios de Louis.— eres un adicto al sexo, corazón.— Louis solo asintió como un un estúpido enamorado.

— Soy un adicto al sexo, mi amor. Recuerda que también leo mucho.— le guiñó el ojo, Harry solo se limitó a reír.

— Esto,— bajó ambas manos hasta el trasero de Louis.— también es mío.— lo apretó y masajeó.— y nadie lo puede tocar, es solo mío.— dio varias nalgadas.— amo cuando suena, quiero destrozarte.— dio otra nalgada y Louis frunció el ceño, intentando parecer enojado. Solo logró verse tierno.

— Deja en paz mi trasero.— dijo firme.— y te voy a destrozar yo.

— No parecía eso cuando gritabas mi nombre anoche y estabas en cuatro para mí, pidiéndome que siguiera y— Louis lo calló con un beso.

—Mejor vamos a desayunar, y eso solo fue anoche.— ambos se soltaron del agarre y rieron.

— Te amo, siempre lo he hecho, y siempre lo haré.— dijo Harry, sentándose en la mesa de la cocina junto a Louis.

— Yo lo hago más, recuerda que tú eres mi sol.

— Tú eres mi luna.— dijo eso dando un sorbo a su taza de té. Para después mirar la pulsera que tenía puesta.— nunca voy a olvidar ese día.

— Yo tampoco, Hazz.— se paró de su lugar y fue directamente hasta Harry y se sentó en su regazo. Posando las manos alrededor del cuello de Harry.

— ¿Quieres un beso?— Louis solo respondió dándoselo.