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Nota breve:

Los pensamientos serán representados así de ahora en adelante ---> *...*

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¤Carlos¤

Genial. Hoy no podía mejorar mi suerte.

Mi compañero de banca no vino y ahora debo sentarme con ella. No es que no me agrade ni nada por él estilo, solamente es que...
Mejor lo olvido. Solamente la ignorare como lo hacen los demás conmigo...

- ¡De pie! - ordena la preceptora de nuestro salón, Anna Román. Todos se levantan de mala gana, pero igual lo hacen.- Buenos dias muchachos, antes de tomar asistencia les presentaré a su nuevo profesor de Obras Literarias - menciona la prece mirando la puerta - Adelante profesor. - dice y logramos ver entrar al profesor.

*¡¡Oh Mierda!! *

Pensé. Porque de todas las Preparatorias que existen en este país justamente tenía que enseñar en la que estoy yo.
Maldita sea, en definitiva el universo me odia.

¤Luna¤

Todos en el salón empiezan a cuchichear, y yo solamente me preguntaba:
¿Qué paso con la Señora Martha?
- Gracias preceptora Román. Pueden sentarse -ordenó él nuevo profesor y todos sin dudarlo dos veces nos sentamos.
Oí maldecir a mi compañero de asiento, al sentarme lo miro de reojo y se nota molesto.

*¡¡Deja de distraerte!!*

Me retó a mi misma. Le presto atención al profesor y aunque creo que su rostro me es familiar...

- Bien, permitanme presentarme. Mi nombre es Nicholas Méndez y seré su profesor de Obras Literarias - mencionó serio. Nos dirigió una rápida mirada a todo el salón me observa a mi y después a mi compañero de banco.

Sonríe levemente. Seguramente no fui la única que lo nota, ya que todo el salón volteó a vernos. Las murmuraciones no se hicieron esperar, hasta que un sonoro golpe de mesa hizo a todo el salón brincar del susto.

- ¡Silencio! Ahora tomare lista - ordenó molesta la preceptora, de algo todos estamos seguros es que ella odia que "cuchicheen" en clase.
Y así es comenzamos un mal día de jornada estudiantil.

...En la casa de Luna...

¤Narrado por mi¤

Mientras Luna estaba en la preparatoria, en el despacho de su tío había una gran discusión sobre la ya mencionada muchacha.
Se podia distinguir perfectamente la voz de Alexander, pero también se oía la voz de una mujer al parecer molesta.

- Yo tengo derecho a conocerla Alex - le recriminó la mujer morena de ojos claros- Soy su tia ¡Maldita sea! ¿Porqué no dejas que la vea?- espetó molesta. Es que su hermano, aunque no sea de sangre se negaba a que ella la conociera.
Alexander ya se estaba cansando, esa mujer ya le estaba agotando la poca paciencia que tenía.
Él no quería recibir a su sobrina de mal humor, debía pensar algo para que así la persona frente a él se fuera de una maldita vez.

- Tú sabes muy bien porqué no dejó que tu la conozcas Moira - dijo serio mientras llevaba una de sus manos a su cabello para desparramarlo en un vano intento de quitar el estrés presente. De repente una idea se le ocurre - Te dejaré verla. Pero con una condición -sonríe mirándola fijamente.

* Oh no.. *
Esa sonrisa a Moira no le gustaba.

Cuando Alexander Valencia sonrie así sólo significa una cosa:
¡Problemas!

...De nuevo con Luna...

*¡Genial! ¡Simplemente genial!*

Ese era el pensamiento de todos en el salón.
¿Qué profesor da en su "primer" día de enseñanza prueba sorpresa? ¡A si!
¡¡Él profesor Nicholas Méndez!!

Si no fuese porqué era una materia que años anteriores ya habían dado, todos hubieran reprobado.
¿Qué? ¡¡Es la verdad!!

Bueno ya me estoy saliendo del tema.

Todos ya habían comenzado a salir del salón, el cambio de hora había llegado. Los últimos en salir eran Luna y Carlos.

- Alumna Mubarak, alumno Schiffer quédense un momento- ordenó el profesor sin quitar su vista de los papeles en su escritorio.
Ambos jóvenes al escuchar sus apellidos se detuvieron y observaron al sujeto fijamente.
Luna decidió mejor guardarse sus insultos para ella misma.

- ¿Qué necesita profesor Méndez?- pregunto tranquila. Él profesor Méndez la miro y después a Carlos que se encontraba detrás de ella observandole de mala manera.

- Su antigua profesora me hablo de sus notas yo mismo las corrobore hoy. Es por eso que los he escogido para que representen a la Preparatoria en la competición de obras literarias que serán dentro de un mes - mencionó tranquilamente.
Luna y Carlos abren los ojos a más no poder.

¿Habían oído bien?

- ¡No inventes! -fue lo único que salio de la boca de la joven. Schiffer estaba anonado. Tener que representar a la preparatoria junto con ella era algo que ni en sus más locos sueños se hubiese imaginado.

- ¡¡Si!! -mencionó Luna emocionada una vez despertó del shock. Pero recordó que se encontraba con su compañero y profesor y se sintió apenada - Lo siento. Es que me emocioné - se disculpó.

- Entiendo su emoción señorita Mubarak - dijo el profesor sonriente - Su redacción fue la mejor que eh leído. Admito que tuvo varios errores pero aún así me gustó mucho su obra - le comentó - Usted tampoco quedó atrás Schiffer...

- Al grano por favor - habló interrumpiendole, ya molesto de tantas estupideces dichas por ese tipo que él tanto odia.

-Esta bien. Deben ir a su próxima clase lo entiendo - se disculpó- ¿Están dispuestos a hacer una obra escrita los dos juntos? - preguntó serio.....

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¿Qué crees que responderán?

☆El renacer de Luna ☆ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora