Valhalla; La Caída De Los Dioses

Capítulo 2

-Que quienes somos? Dijo Yellowstone con esa sonrisilla, y con ese resplandor verde que aparecía en sus ojos cuando algo se le pasaba por la mente.

Browstone se levanto con dificultad, las cadenas no le dejaban mucha libertad de movimiento y la paliza de antes había sido graciosa, pero le había dejado magulladuras.

- Me llamo Browstone, y este de aquí es mi hermano Yellowstone.

- Y que hacen dos bestias salvajes como vosotros tan al sur de sus pocilgas.

Yellowstone se levanto, y mirando a Lord Arthur dijo en una lengua muy extraña que ningún Praedor allí presente pudo entender.

- Cuando los dioses caigan,sus hijos heredarán el mundo.

En ese momento Yellowstone dejo caer sus cadenas como si nunca hubiesen estado cerradas al rededor de su manos,pies y cuello. Se giro y en en un movimiento rápido sugeto al Praedor que tenía a Gisli por la espalda,rodeo su cuello con el filo de Gisli,la cual le había quitado en el movimiento. Y le dijo al oído :

- Un perro atado en inofensivo, pero cuidado, en cuanto pueda te devorara las entrañas.

Y de un movimiento le rebano el cuello. Miro a su alrededor y vio que Browstone no se había quedado corto, tenía a sus pies los otro tres Praedors que los vigilaban. Browstone se agachó y quito del cinturón del Praedor sus hachas.

A Lord Arthur y todos los allí presentes no les había dado tiempo a reaccionar, todo había sucedido en un abrir y cerrar de ojos, y más de la mitad nunca había presenciado una muerte.
De repente todos empezaron a gritar y a intentar uir. Los hermanos no les hicieron caso y clavaron sus miradas en Lord Arthur. Estaba sentado en su trono, de medio lado y sujetandose las rodillas, y con una débil voz suplicaba a su dios que le protegiera.
Browstone se acerco a el, lo cojio por el pecho y lo arrojó al suelo, cerca de donde se encontraba Yellowstone, el cual se encontraba arrodillado pidiéndole perdón a su espada por haberla dejado tanto tiempo con aquel "hombre Malo",como el decía.
Cuando se percató de lo que pasaba, guardo a Gisli y se dirigió hacia Lord Arthur.

-Como te llamabas?? .-Dijo poniéndole un pie encima del pecho y rascándose el interior de la oreja

Mientras Browstone se dirigió a la puerta de aquella sala, la atrancó con unos maderos que había allí, viejos y destrozados,seguramente no los habían usados en años, desde que invadiero
n el castillo por última vez.

-Me llamo Lord Arthur. -Dijo con voz temblorosa

-Bueno, Lord Arthur, vamos a hacerte unas preguntas, y vas a contestar sin tonterías, de acuerdo? Dijo Yellowstone haciendo más presión en el pecho de Lord Arthur

-Sabes donde se encuentra Kaos? .-Dijo Browstone que lla había atrancado la puerta y ahora se había sentado en los escalones que había frente al trono.

-No se que o quien es ese tal "Kaos", y aunque lo supiese no os lo diría. Yo sirvo al reino y a dios, preferiría morir antes que ayudar a unas bestias salvajes como vosotros.

-Eso se soluciona rápido -. Dijo Browstone mientras se levantaba y se dirigía hacia Lord Arthur, cuando se situó enfrente de Lord Arthur, cojio una de sus hachas y la hizo descender con toda su fuerza hacia la cabeza de Lord Arthur. Se oyó un fuerte golpe y un aullido aterrador emitido por Lord Arthur. Los hermanos se empezaron a reír a carcajadas. La zona del entre pierna del Pantalón del conde se empezó a oscurecer y el conde no paraba de llorar.

- SE A MEADOOO!! -. Gritaban los hermanos mientras se morían de risa.

Lord Arthur abrió los ojos,comprobó que seguía con vida, giro su cabeza levemente y vio que la hacha se había clavado en el suelo,a escasos centímetros de su cabeza, y en ese momento también se percado de que los hermanos no paraban de reírse,no los entendía pero,cuando se dio cuenta de que se había hecho pis encima, se sintió completamente avergonzado y cuando Browstone iba a seguir con sus bromas, oyeron un montón de golpes en la puerta, los demás guaridas habían venido a ayudar a su señor.

-Browstone tenemos que irnos ya,sino nos van a coger otra vez, y no me apetece volver a separarme de Gisli.

-Y como salimos de aquí? - Dijo Browstone

-Hace cuanto que no te das un buen baño? -.Pregunto Yellowstone con esa sonrisa en la cara, que a Browstone le daba escalofríos solo de verla.

-Porque lo pregu... ¡Espera!, NO!, Ni de coña, Yellow No!

- Si hermanito, vas a darnos un baño...

Cuando los guaridas consiguieron entrar a la sala,Yellow y Browstone estaban en una de las ventanas que había a los laterales. Yellowstone los miro mientras sonreía, y de una palmada en la espalda empujó a Browstone que no estaba tan confiado, y justo detrás, fue el.

Los guardias fueron corriendo a la ventana, y los vieron caer al río.

-Nadie puede sobrevivir a una caída así, aunque sea en el agua, debe haber 20 metros hasta el agua. -.Dijo uno de los soldados

-HEY!! Estúpidos! Estoy aquí bajadme!!

Los soldados ya se había olvidado de Lord Arthur y al oír su voz se dieron todos las vuelta en busca de su señor. Pero en esa primera vuelta non conseguieron encontrarlo.

-Aquí arriba patanes!! En el techo!! Bajadme antes de que os mande a las minas de sal por traición y desobediencia.

Los soldados movieron al unísono las cabezas hacia lo alto de la sala,colgado de una de las vigas de madera del techo,se encontraba Lord Arthur, colgado boca abajo y únicamente vestido con unos calzoncillos viejos y mojados. Cuando lo bajarón, Lord Arthur estaba algo mareado, tuvo que tomarse unos segundo para que todo se estuviese quieto, y cuando todo paró de darle vueltas los guardias allí presentes empezaron todos a atosigarle con preguntas obedientes y faltas de sentimento; "Se encuentra bien señor?",  "Quiere que vallamos tras ellos?",  "Necesita algo mi señor?"

-Lo que necesito es que dejéis de tocarme los cojones por un momento. Y que me traigas ropa nueva y limpia.

Al decir esto uno de los guaridas callo en la cuenta de que el calzoncillo de Lord Arthur estaba mojado, y que no había ninguna jarra con agua ni nada parecido en toda la instancia. En ese mismo momento se percató de olor que Lord Arthur desprendía, un olor fuerte a orines. Y el Guardia no pudo evitar que una carcajada saliese de su boca,lo que hizo que los demás guardias se percatasen de ese mismo detalle y se empezasen a reír. Lord Arthur enfurecido se fue a sus aposentos acompañado de su consejero dándole instrucciones sobre el severo castigo que debía imponer a eso guardias. Por desgracia, las risas que emitían los soldados les impidieron oírlo.

...

-Browstone estas bien?!?!