Tomorrow [YoonJin]

Jugando con mi corazón

Déjame contarte una pequeña historia, una donde hablamos de un chico que curso una carrera que no quería, que tuvo que buscar un trabajo de medio tiempo; solo para poder cubrir gastos escolares y colaborar con los que había en casa. Si te digo que su vida era mas aburrida que resolver una sopa de letras, ¿me creerías?, ¿Qué tal si te digo que no existían variantes?, siempre hacia lo mismo, es más fácil decir que lo único que caminaban eran sus materias, triste ¿no?.

-Min YoonGi, necesito que realices un par de llamadas, acomodes mi horario para la semana próxima y revises unas cuantas hojas para entregar para la semana próxima -ordeno mi jefe, paseándose por su despacho con ese aire de grandeza.

-Entendido -respondí sin más anotando todo en una pequeña libreta que se me obligaba a usar para no olvidar nada.

7:55 pm fue la hora que observé en aquel anticuado reloj de pared que se encontraba en aquel comedor dentro de la empresa. Efectivamente, estaba a punto de culminar mi hora de comida, un café y un par de galletas era lo único que adquirí, llegue a un punto donde no tenía un antojo especial por algo, cogía lo primero y me sentaba a ingerir los alimentos, esperando a que pasará 1 hora antes de seguir con las mismas tareas.

-YoonGi, el señor Lee dice que te necesita en su oficina una vez termines.

Gire el rostro para encontrarme con Jimin, un chico de tez blanca, cabello negro, labios carnosos, una mirada infantil y si hablamos de su físico, bueno, no estaba mal pero tampoco era de mi gusto. Lo único en común era que ambos teníamos un empleo de medio tiempo.

-Gracias -me límite a contestar sin mucho ánimo, tomando mi basura y depositarla en el cesto para luego ir rumbo al despacho de mi jefe.

-Necesito que lleves estos manuscritos a esta dirección.

Fue lo primero que escuché al abrir la puerta, estirando por inercia los brazos para tomar una carpeta llena de papeles, con un posti color azul claro pegado en el medio.

-Pero apresúrate que de esto depende tu salario de esta semana.

-¿Es una amenaza? -pregunte incrédulo ya que era jueves y como tal se me pagaba los viernes a las 3:15 pm.

-No, es decir... Es urgente Min, este trabajo se retrasó y quién lo revisa lo esperaba hace dos días. No puedo retrasar más el proceso.

-Pero ese no es mi trabajo, pídale a alguien de mensajería que lo lleve.

-No entiendes, ellos lo mandarían mañana si tengo suerte. Pide un taxi y yo pagaré tus viáticos, puedo pagarte ti cena si así quieres pero vete ya.

-Deme eso "viáticos" ya que es jueves y el dinero de la semana pasada ya lo ocupe en mis gastos -dije extendiendo la diestra esperando algo que seguro no llegaría.

-Son 5 minutos perdidos -se quejo, sacando su cartera para sacar un par de billetes y depositarlos en mi mano -. ¡Apresúrate!

Sorprendido cerré mi puño y salí corriendo hasta que logré salir de su campo de visión tomando así una actitud despreocupada y caminando de la manera más tranquila.