Para poder seguir a veces hay que empezar de nuevo.
CAPITULO 1
-¡Eli Despierta! Elizabeth ya es tarde, cámbiate, es el primer día de clases y no vas a llegar tarde!.-
Esa era mi mamá, más emocionada que yo por el primer día.
-¡Mamá no quiero ir!- *Grité*
Bueno, era imposible faltar, mi madre me llevaría hasta arrastrando a la escuela...
Bueno, era tarde pensé, así que me duche lo más rápido que pude, me puse unas zapatillas, un jean, un polo y el primer suéter que encontré. Bajé rápido las escaleras cogí una tostada y salí corriendo gritando:
- ¡Chau mamaaaaá!.-
No era esa típica chica que esperaba el autobús para ir a la escuela, en la escuela en el que mi madre me matriculó quedaba a unas 4 o 5 cuadras, bueno, en ese día se me hacía tarde así que fui corriendo, media cuadra antes paré y me sequé el sudor y entré caminando, para que nadie sepa, que sudo hasta por respirar.
Sonó el timbre, así que me senté no muy atrás, al costado de la ventana y esperé a que el profesor entrara, detrás de él entraron 3 chicos.
Me atrajo un poco sus presencias ya que se veían chistosos y amables (Ya que la mayoría actuaba como si no existiera). Se sentaron a mi derecha, yo miraba al frente y no hablaba, en realidad... No soy de hablar mucho, creo...
Sonó el timbre y la primera clase ya había acabado, teníamos un receso. Yo estaba callada, ya que sus presencias me ponía un poco nerviosa.
Uno de ellos volteó a verme y se acerco a mi asiento.
-Hola, ¿eres nueva no?.- *Me preguntó con una voz amigable*
Alcé la mirada un poco impresionada, ya que su voz era muy fuerte y porque no pensé que me hablaría.
- Hola, si...-
Les dije, no soy mucho de hablar.
-Soy Raphael... ¿y tu eres?.-
-Ah, Soy Elizabeth.-
-Así que Elizabeth... Bueno vine porque noté que eras nueva y porque quería un lápiz, ¿tienes?.-
-Ah... Esta bien, déjame buscar.-
- ¿No eres de hablar mucho cierto? O ¿estas nerviosa por el primer día? ¿O por mi?.-
-¿Nerviosa? No, sólo que no hablo mucho, eso es todo.-
¿Por él? ¿Wtf?, pensé
-Ah ya.. Sabes que cualquier cosa que no entiendas, o necesites puedes contar conmigo y con los otros.- *Refiriéndose a sus amigos de al lado*.
Sonó el timbre que indicaba que las clases ya habían acabado , y a la vez podía ver como el sol había salido, siempre odié el sol, odio que me arda la piel, odio el calor, odio sudar. Agarré mis cosas y salí, fui la primera de la clase en salir, y me dirigí al baño a ponerme el famoso bloqueador, que te deja la cara grasosa y oliendo a coco.
-Vela! Elizabeth!- *Me llama una señora*
Volteé un poco incomoda porque lo único que quería era irme al baño. -¿Si?-
-Hola, me llamo Christina, soy la psicóloga, sé que eres nueva y quería conversar contigo un rato, saber cómo estas, y que tal te pareció el primer día de clases-.
-Oh, bueno ahora estoy un poco apurada, me dirigía al baño-.
-Vamos, no seas tímida Elizabeth, sólo lo tomará 5 minutos, o ¿es urgente?-.
-No, Esta bien-.
*Conteste un poco incomoda, 1 por que no le veía el sentido de contarle mi estado de animo a una persona que recién conozco y 2 porque con su palabra "urgente", parecía como si estuviera yendo al baño porque estoy mal del estómago o algo así*.
-Bueno, estoy bien y el primer día de clases me pareció tranquilo, no socialicé mucho, pero me agradó-.
-Muy bien Elizabeth, me agrada que te estés soltando, cualquier problema que tengas o cosas así no te olvides que puedes contar conmigo, podemos llegar a ser muy buenas amigas-.
*¿Buenas amigas? (pensé)*
-Esta bien, gracias-.
Después de varias preguntas, salí lo mas pronto que pude al baño, me eché bloqueador y salí. Temía encontrarme con alguien, pero justo me encuentro con el, con ese chico que recién acabo de conocer, no sabía si pasar de frente o quizá saludarlo e irme, cada paso que daba me preguntaba lo mismo. Así que lo saludé.
-Hola...-. *Le dije, con una voz tímida*
El alzó la mirada, me vio y sonrío, estaba con sus amigos. En ese momento me sentí un completo tomate, no lo hubiera saludado, ¿En que estaba pensando?.
Bajé las escaleras, lo único que quería era llegar a mi casa y dormir o ver una película.
Caminé rápido, bueno en realidad, siempre camino rápido, es inevitable...
Mientras caminaba, saque mis audífonos y puse música a todo volumen, una de las sensaciones más hermosas de la vida, es caminar con música, o bien lo hago cuando estoy feliz o triste. Aunque esta vez, no sentía ningun estado de animo.
Mientras caminaba, no me había dado cuenta que se me había caído mi carnet de la biblioteca.
-¡Elizabeth! ¡Elizabeth!-. *Gritaba Raphael*.
Corrió hasta donde estaba, cuando de repente siento que alguien me jala la mochila. *Volteé de lo más asustada y molesta*, pensé que era alguien que me quería molestar o me quería robar.
-¡Oye!-. *Grité de lo más molesta y puse mi típica cara cuando estoy de ese humor*
-Elizabeth, se te cayó esto mientras caminabas, te estuve llamando desde una cuadra, pero al parecer estabas con audífonos-.
-¡Oh!, Gracias... ¿Raphael, no?.
-Si, Raphael, el más guapo.
*Sonreí, por la tontería que dijo, no sé si reírme y pensar que es broma, o mirarlo raro por ser tan egocéntrico*.
-¿Vives por acá?-
-Si, ya me falta solo 1 cuadra-.
-Entonces vivimos cerca, a mi me faltan 3 cuadras, ¿y donde estudiabas antes?-.
-Bueno, estudiaba en un colegio religioso, fuera de la ciudad, no creo que lo conozcas-.
-Tienes razón, no creo que lo conozca, ¿y por qué estás estudiando acá?-.
*Sonreí con incomodidad*.
-Oh, ya veo no me quieres decir...-.
*No es que no le quería decir, es solo que, eran muchas preguntas*.
Justo llegaba a mi casa, y veía a mi mamá afuera y a mi hermana, así que me despedí rápido, ya que son las personas mas fastidiosas del mundo.
-Bueno, ya llegué, chau cuidate-.
-Esta bien Elizabeth, cuidate, ¡nos vemos mañana!-.
Llegué y lo primero que hicieron mi mamá y mi hermana fue jalarme y sentarme en el sofá y preguntarme o bueno, interrogarme, querían saber como me fue, si hice "amiguitos", si comí, etc.
Después que me entrevistaron por 20 min. apróx. subí a mi cuarto a bañarme y ponerme la pijama, creo que es lo mejor, después de un día tan loco y ajetreado, bueno, no es que haya hecho muchas cosas, pero... a veces lo siento así.
De pronto, sonó mi celular.
-Seguro es Fiorella (mi hermana mayor), quiere que le haga un favor o le pase algo, porque es demasiado floja (pensé).
Reviso mi celular, pero no, eran 3 solicitudes de amistad.
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About Time - Cuestión de Tiempo
Teen FictionUna historia que definitivamente te sorprenderá y dará muchas cambios de pies a cabeza cuando menos te lo esperes. No te ilusiones ni te encariñes rápido con todos.