My sweet crime.》 hariana's fanfic.

#2: obsesión

- ¿Y por qué me has secuestrado?- pregunté.- ¿Quieres matarme?

Negó con la cabeza, con una sonrisa traviesa en el rostro.

- Eres lindo, Harry.- dijo acariciando mi pecho sensualmente.

- ¿Y eso qué?- dije apartándome nuevamente.

- ¡Joder, eres irresistible!- gritó.

- Aún no te entiendo.- dije ya perdiendo la paciencia.- ¿Me has secuestrado solamemte por qué te resulto sexy?

- Y por más.-

Me empujó, haciéndome tropezar hasta caer en la cama, se acercó a mí plantando un beso en mis labios. Un beso corto, pero, caliente.

- ¿Qué acaso yo no lo soy?- dijo.

- Sí.- respondí.- Espera, no.

Rió.

- Demasiado tarde, cariño.-

Se abalanzó sobre mí, quedando encima de mí. Me besó los labios el cuello y las mejillas. No le respondí a ninguno. No quería mostrarme débil.

- Bésame, joder.- dijo sentándose en mi abdomen.

- No quiero.-

- No habrá dulces para ti.- dijo desabotonando su chaqueta.

Se notaba un pequeño sujetador de encaje negro. ¿Qué esta niña usa todo negro?

- Tan mala eres, que hasta la ropa interior que usas es negra.-

- Ajá.- asintió.- ¿Quieres ver?

- No.- me limité a decir.- Estás loca, niña.

- Loca por ti.- respondió segura.

- Pero yo no por ti.

- Acostúmbrate, cariño.- dijo.- Estarás aquí un buen tiempo.

- ¿Qué tanto tiempo?

- Hasta que te enamores de mí.-

Ariana se reincorporó y se puso de pie a mi lado, yo aún estaba en la cama, acostado.

- ¿A qué pretendes llegar con esto, niña?

- Ariana, perra.- dijo en un tono enojado.- Me llamo Ariana.

- Bien, Ariana.- dije enfocando "Ariana".- ¿Qué mierda pretendes?

- Joder, que me he obsesionado de ti.- dijo rindiéndose.- Cada día, al salir del instituto, te buscaba con la mirada hasta encontrarte. Me fijaba en cada movimiento que hacías, cuando hablabas con tus amigos, y sobre todo, cuando besabas a Amanda. Todo lo que hacías, lo grababa en mi mente, y esas cosas, te advierto, aún no salen. Y más vale que lo hagan.

Me quedé atónito. En primer lugar porque me espiaba, después... lo de Amanda.

- Entonces... ¿sabes lo de Amanda?- pregunté.

- No, idiota.- dijo burlándose.- Ay, claro. Incluso... ví lo que que hicieron en el patio trasero del instituto.

- ¿De verdad?- dije cabizbajo.

- La verdad, luego de que le sacaste la polera a esa perra no quise seguir observando y me marché.

- Te entiendo.- le respondí.- Yo tampoco quería hacerlo, pero Amanda me tenía harto, así que sólo le dí lo que quería.

- Sexo.- dijimos a la vez, mirándonos a los ojos.

Ariana era una chica linda, pero con una fama de diablo. Cada día salía algo nuevo de ella en la televisión. 

- ¿Lo ves?- dijo sonriente.- Somos el uno para el otro, amor.

- Deja de llamarme así que me jodes.

- No, tu eres mi amor.

Me puse de pie. Ya me tiene harto y no sé cuánto tiempo ha pasado ya, pero debo idear un plan para escapar.

Ya lo tengo.

- Sabes, Arry.- dije acercándome a ella lentamente.- Pienso que eres una chica muy linda.

- ¿De-de ve-verdad?- respondió con una sonrisa de oreja a oreja.

- Sí.

La besé con todo lo que podía. Sólo la ilusionaré para poder escapar, pero, la verdad es que sus labios son dulces, tiernos y sensibles. Son perfectos, joder.

- ¿Y-y eso por qué?- preguntó una vez acabado el beso.

- Quería probar tus dulces labios.- dije tratando de sonar sexy, cosa que me sale a la perfección.

- ¿Dulces?- cuestionó.

- Sí, son perfectos.- dije acariciando su mejilla.- Creo que...

No pude continuar, ya que Ariana me tomó de la muñeca casi estrangulándola.

- No juegues conmigo, Hazz. Sé perfectamente lo que intentas.- dijo apretando cada vez más mi muñeca.- No te irás de aquí hasta que estés completamente enamorado de mí, así que acostúmbrate porque quizás estés toda la eternidad aquí.

- Suelta mi muñeca, joder.

- ¿Te quedarás aquí?- dijo acercándose a mí.

- Que sí, ahora suéltame.- dije tratando de sonar superior a ella.

- Bien.- dijo sonriendo y soltando ni muñeca.- Espera a que Max te traiga comida, descansa un rato.

- Pero si me dormiste con cloroformo, no creo que pueda descansar.- dije sonando obvio.- Y, que cínica, niña.

- Ay, duerme y deja de joder.- abrió la puerta mirándome fijamente para no escapar.- Te amo, y me llevo esto.- dijo quitando mi teléfono de mi bolsillo.

Mierda, ¿cómo no lo vi venir?

Ariana me cerró la puerta, y ahí quedé. Encerrado, solo, y... joder, que hambre.

- Joder... ¿qué hago ahora?- pensé.

Caminé de un lado al otro, en verdad no sabía que hacer.

《Ariana Grande se ha obsesionado contigo, Harry.》

Mi yo interno tenía razón, Ariana se obsesionó conmigo. De esto puedo aprovecharme gratamente.

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Que poca inspiración que tengo, joder.

Pero igual quedo bonito, ¿no?

Bueno, no importa, igual soy feliz con esto.

En fin, espero que les guste:)

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Jabhy♡

{Perdón si hay alguna falta de ortografía}