Capítulo XXIX

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Después de darse un baño y de arreglarse, Silvia bajo a la sala de estar.

Ger: te ves hermosa
Silvia: muchas gracias
Ger: nos vamos
Silvia: claro, solo dame un momento debo decirle algo a Laura
Ger: esta en el jardín trasero
Silvia: ya vuelvo

Silvia salio de la sala de estar y se dirigió al jardín.
Silvia: Laura
Laura: dime
Silvia: saldré un momento con Gerardo, cuando vayas a casa de Cristóbal por favor que te acompañe Fernández, y avísale a María que saldrás.
Laura: está  bien.

Silvia se despidió de Laura y Pepe, y luego salio con Ger.
Silvia: y bien a donde vamos?
Ger: bueno elegí un restaurant de comida Italiana " Alfredo di Roma"  espero y te guste la comida Italiana
Silvia: me encanta
Ger: eso es bueno

Luego de que conducirán durante 45 minutos, llegaron a "Alfredo di Roma", uno de los valet parking tomo la llave del auto y lo estaciono, ellos entraron al restaurant y uno de los meseros se les acerco.

Mesero: muy buenas tardes, tienen alguna reservación
Ger: sí, una mesa para dos a nombre de Gerardo Martines
Mesero: acompañarme por favor

Ambos siguieron al mesero hasta su mesa, tomaron asiento y él les entrego la carta, se retiro mientras ellos elegían, minutos después volvio y tomo las órdenes.

Silvia pidió Linguini a la carbonara y de postre Panna Cota, mientras que Gerardo  spaghetti a la marinara y de postre Tiramisu.

Ambos eligieron agua, Silvia por su embarazo y Gerardo no consume alcohol con excepción de fiestas o matrimonios.

Mientras esperaban sus comidas ambos hablaban de sus trabajos y sobre el embarazo.

Ger: y como te sientes en la empresaSilvia: al principio fue difícil, mi padre se encargaba de todo y tomar y responsabilidad tan grande como lo es, estar a cargo de todos un emporio no es fácil, gracias a dios todos hay me apoyan y me ayudan

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Ger: y como te sientes en la empresa
Silvia: al principio fue difícil, mi padre se encargaba de todo y tomar y responsabilidad tan grande como lo es, estar a cargo de todos un emporio no es fácil, gracias a dios todos hay me apoyan y me ayudan.
Ger: eso es bueno, eres una mujer muy capas, así que no me sorprende que te hayas acoplado tan bien
Silvia: gracias, y que tal  estuvo tú día
Ger: bueno tuve un parto de imprevisto así que digamos que estuvo un poco ajetreado
Silvia: crees que se me pueda adelantar el parto
Ger: eres una mujer sana, haces ejercicio y todo va bien con los bebes, así que no debería porque pasar algo así

Ger: eso es bueno, eres una mujer muy capas, así que no me sorprende que te hayas acoplado tan bienSilvia: gracias, y que tal  estuvo tú díaGer: bueno tuve un parto de imprevisto así que digamos que estuvo un poco ajetreadoSilvia: crees que se me ...

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Él mesero llego con sus órdenes, ambos disfrutaron sus respectivos platos, entre risas, una charla grata terminaron de comer, Gerardo cancelo la cuenta y fueron por el auto, luego de eso fueron al parque y dieron un paseo mientras disfrutaban un delicioso helado de limón.

Después de pasear durante una hora, Gerardo llevo a Silvia a su casa, se despidieron a la entrada de la casa, Gerardo se subió en su auto y se fue, Silvia entro a su casa y se encontró con Laura, pepe y Cristóbal.

Cristóbal: hasta que llegas
Silvia: perdón?
Laura: hola Silv, espero que no te moleste, es que necesitaba arreglar la puerta de mi cuarto y como Cris tiene un taller de carpintería le pedí que me ayudara y luego se hizo tarde y lo invite a comer conmigo y pepe
Silvia: esta bien, podrías dejarnos a solas un momento.
Laura: esta bien, estaré en mi cuarto estudiando, hasta luego Cris, nos vemos pepe.

Laura salio de la sala de estar, dejándolos a solas, Silvia camino hacia los sillones y se sentó, - vas a tomar asiento o te quedaras ahí parado?
Cristóbal: alguien está de buen humor
Silvia: bien te escuchó
Cristóbal: de que quieres hablar
Silvia: pensé que tú eras el que debía decir algo
Cristóbal: me dejaras hablar?
Silvia: te escucho Cristóbal, quiero que me cuentes todo, desde el principio
Cristóbal: bien, yo era jefe de la división  antinarcóticos, luego de investigar a una red de narcotráfico logramos arrestar a todos, casi todos, faltaron los más importantes, un día tuve que partir a Tijuana para hacer una redada, pero cuando llegamos nos dimos cuenta de que todo era una trampa, no había nadie, de regreso a la ciudad de México Estaban, mi jefe y mejor amigo me informó que no debía ir a mi casa, sabía que algo estaba mal, así que decidí no hacerle caso y me dirigí a mi casa, todo el lugar estaba lleno de agentes  y las ventanas del primer piso estaban rotas, camine hacia mi casa y vi sangre en la piscina.

Cristóbal hace una pausa por algunos minutos, pues todo resulta doloroso para él, -sabía que lo vería al entrar, pero estaba reacio a creer que alguien había echo algo así, subí a la habitación de las niñas, volvio a callar por unos minutos, - y ahí estaban, una lágrima cae por sus mejillas, mis bebes, mis pequeñas, estaban hay tan tranquilas, era como si estuvieran durmiendo, lo único que me consuela es que al menos no sufrieron.

Cristóbal calla y mira hacia el horizonte, Silvia lo saca de sus pensamientos.

Silvia: y tú esposa, que paso con ella
Cristóbal: quieres que te diga que le hicieron a mi esposa, que le mando hacer tu padre.
Silvia: no seas cruel
Cristóbal: cruel?, cruel es que asesinen a tú familia y que no pudieras hacer nada, sabes ese seria mi último operativo, luego de ese día, dejaría ese trabajo y buscaría algo que no pusiera en peligro a mi familia, pero al parecer la vida tenía preparado algo más para mí, sabes no es fácil perdonar a alguien cuando ese alguien mando asesinar a tus hijas y sus hombres violaron una y otra vez a tu esposa, para luego cortar su garganta, no se si eso se puede perdonar.
Se  que cometí un error y que te metí, pero esto no fue fácil, tuve que cambiar mi rostro, cambiar mi vida todo lo que era ya no existe, me equivoque, te mentí y no fui sincero contigo lo sé y creeme que me siento mal por eso, te amo y amo a los hijos que tendremos, te pido perdón por todo.
Silvia: yo te debo pedir perdón por lo que mi padre te hizo, si el no lo hubiera hecho tú estarías con tu familia en estos momentos y hubieras tenido que pasar por todo esto.
Cristóbal: no fue tú culpa, no sabias nada de esto, pero lo que si sé, es que dentro de todo esto te encontré a ti.
Silvia: eres él padre de mis hijos y quiero que estés ahí para ellos, que me ayudes a criarlos, que elijamos sus nombres juntos, tu vives muy cerca de aquí, podrás verlos y quedarte con ellos.
Cristóbal: no creo que él deba seguir con el embarazo, si sale contigo, no es ético
Silvia: de quien hablas
Cristóbal: de tu noviecito Gerardo
Silvia: ha por dios, es encerio?
Todo tu enojo es por él
Cristóbal: no estoy molesto, solo te digo mi punto de vista porque nunca puedes escuchar lo que te digo
Silvia: él no es mi novio ok
Cristóbal: pero por lo que veo lo será
Silvia​: qué? No es algo en lo que piense
Cristóbal: genial, nos vemos después, si necesitas algo me marcas, ten ahí esta mi número.
Silvia: a donde vas, no hemos terminado de hablar
Cristóbal: te equivocas, yo ya termine, vamos pepe.
Silvia: eres un idiota
Cristóbal: soy idiota, pero aún así te enamoraste de este idiota o no
Silvia: por dios vete ya
Cristóbal: espero y salgan igual a mí
Silvia: vete ya

Cristóbal se fue, Silvia subió a su habitación y se puso la pijama, luego se acostó  en su cama, ustedes no saldrán igual de tercos e insoportables como su padre verdad, habiendo tantos hombres yo tenía que fijarme en él ahs

Continuara...

Bajo Sospecha (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora