IV

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¿Odio esto? prt 1. 


Todo el día, desde que me levante pensaba en lo que paso anoche. Estaba paranoica y nerviosa, analizando cada cosa que sucedía a mi alrededor.

-Señorita Lair, ¿qué le sucede?- Me pregunto una maestra.

-Nada señora, no se preocupe- Camine a otro lado para distraerme.

Después de un gran rato caminando fui a la cafetería a comer algo ligero. Más o menos conocía como era el lugar, seguía siendo igual de grande que cuando lo conocí.

-Hola- Alguien se sienta en frente mío. Alzó la mirada. -¿Qué haces aquí sola?- Me pregunta una chica.

-Nada- respondo sencilla.

-No entiendo como una chica como tu esta sola. ¿Y tu comapañero?- ¡Mierda! Recordé lo que paso anoche y no quería verlo, lo que paso no debió de verlo.

-...- Me abstengo de  hablar, no quería tocar ese tema.

-¿Cómo te llamas?- noto que no quería hablar y cambio el tema. La chica era linda; cabello negro, ojos café, labios gruesos. Lo necesario para una chica de 20, estaba bien vestida. Se ve que es de dinero.

-Noa... Noa Lair- deje mi plato para prestarle atención.

-Un gusto. Soy Alí Michel-  Me extendió su mano. Dude en recibirla pero que final tuve que hacerlo por cortecia. -Y... ¿Por qué estas en este lugar? ¿Conoces el lugar? ¿Cómo se llama tu compañero? ¿Es lindo? - fruncí el ceño.

-Haces muchas preguntas, no quiero responderlas-  aleje la mirada a mi bolso.

-No seas así... solo quiero ser tu amiga- hizo pucheros.

-¿Para qué?- hable cortante.

-Pues... es que estoy sola... y cuando te vi me pareciste interesante- Vi sus ojos café, ellos brillaban especialmente. Era extraño. No vea esa mirada hace años... era esa mirada que reflejaba amistad sincera.

-Mm, ¿Qué estas tramando?- Soy desconfiada, puede estar actuando o aun peor quiere aprovecharse.

-Ser tu amiga- Ella sonríe radiante, Me recuerda a  la cálida sonrisa de Cam... es idéntica. Un sentimiento de nostalgia se apodero de mi.

Tome mis cosas para salir de ahí pero ella me sigue -¿Por qué me sigues?- esto ya me estaba cansando.

-Es... que... ¡Me perdí!...- Alza su voz -Necesito tu ayuda...- vuelve a bajarla, en serio esta perdida. La mire de pies a cabeza. No dejaba de acordarme de mi hermano, ella era más bajita que yo por unos centímetros, la cara de inocencia que escondía una realidad muy diferente.

Suspiro cansada -Esta bien, te llevare a tu habitación- Coloco mi mano en su hombro -¿Cuál es tu habitación?-

-Creo que... la 990- Estaba en el piso después del mío, así que no tenía problemas en llevarla. Tampoco la dejaré a ahí tirada como me dejó Eliam.

Seguí caminando -¿Por que estas aqui?  

-Pues no se, mis padres solo me quisieron traer aquí sin ninguna explicación lógica- tomo su mentón y simulo resolver su duda -No se ellos siempre me excluyen- 

-Mmm ya- revise mi mochila para buscar la tarjeta de la biblioteca y me di cuenta de que se estaba derramando la tinta de mi pluma -Mierda...- la saque rápido y la deje en mi mano mientras tomaba la tarjeta. 

-¿Que ocurre?- me pregunto Ali intentando ver mi mochila. 

-En realidad nada... solo se me estaba cayendo la tinta- Guardo mi tarjeta en el bolsillo de la chaqueta y acomodo mi bolso para concentrarme en el frasco y limpiarlo. 

.0001Donde viven las historias. Descúbrelo ahora