Desde el principio de los años el ser humano se ha dado a la tarea de encontrar la plenitud; con amor, dinero, amigos, mascotas, etc... Pero, y si te dijera que existe un lugar donde puede conseguir esa felicidad por un precio muy bajo, un lugar dónde realmente puedes ser feliz, no me crees ¿Cierto?
Bueno, mi nombre es Lauren Jauregui y estuve ahí cuando apenas tenía 15 años, esa edad donde adoleces de absolutamente de todo.
Recuerdo perfectamente que la felicidad para mí era tener a mis padres juntos. En ese entonces hubiera dado cualquier cosa por eso...ahora me lo pensaría dos veces. Yo me enteré de todo esto gracias a un libro, un libro muy grueso más sin en cambio era ligero, tan ligero como una pluma. Al principio me sorprendió encontrar ese tipo de libros en casa, lo tome muy normal porque supongo esas son las “típicas cosas que te encuentras cuando te cambias de casa.
Página 53: "El precio de la felicidad" Este no es un simple conjuro, esto es más qué eso, es un pacto, un pacto que no cualquiera se atreve a hacer después de saber el precio, ¿Estás seguro de querer hacerlo? Está bien pequeña escoria, pero no digas que no te lo advertí. El ritual se llevará a cabo el día tu cumpleaños, si ya pasó no te preocupes elige el día que os apetezca, la verdad está de más, pero que sería un ritual sin complicaciones ¿no lo crees? La hora al igual que el día no importa, sólo elige un día en el que sepas que estarás solo por lo menos 5 hrs. Consigue una navaja, hilo, un pedazo de tela negra y un espejo. Eso es todo. Seguramente ya sabes qué día lo harás. Eso es apresúrate, no me hagas esperar.
Me llevé el libro a mi cuarto. Al terminar de leer, me sentí asustado pero interesado... ¿Plenitud por un precio tan bajo? ¡Joder, eso no lo podía creer! Tenía que intentarlo. Elegí el día 1 de noviembre, un día donde supuestamente la delgada línea que separa nuestra tierra con la de los muertos se vuelve fácilmente quebrantable, además de que el día citado era ese mismo día.
Continúe leyendo. ¿Estás listo Imbécil? Creí que te acobardarías pero veo que no. Toma la aguja y borda tu nombre, no importa si no lo sabes hacer, sólo trata de que sea entendible, posteriormente toma navaja y haz un corte lo suficientemente grande para humedecer la tela con tu sangre. Párate frente aún espejo y repite esto:
He is nostr' dis pater, he is nostr' alma mather
Et Lo Spiritus Malum
Omnis Caelestis
Delenda Est
Anti Cristus
Il Filio De Sathanas
Infestissumam
Cuando termines de recitarlo, con la tela limpia el espejo, no importa que se manche de tu sangre, has una reverencia y ve a dormir, no importa que hora sea, ve a dormir, toma pastillas si es necesario pero TIENES QUE IR A DORMIR. ¿Ir a dormir? Esto ya me está pareciendo una estupidez. Cerré el libro y lo deje sobre la mesita de noche, pude ver el reloj, marcaba las cinco de la tarde.
-¡Joder! ¿Cuánto tiempo me quede leyendo ese maldito libro?
No quedaba mucho tiempo, me puse frente al espejo. Comencé bordando el mi nombre en la tela, procure hacerlo lo más rápido posible pero con el cuidado que se merecía, lo que a continuación venia me tenía aterrorizado pero cerré los ojos, no tomo ni un segundo cuando sentí correr la sangre por mi brazo proveniente de un corte hecho en la muñeca. Rápidamente tome la tela y la moje con mi sangre. Toque con la palma de mi mano el espejo mientras recitaba las palabras escritas en aquel libro.
He is nostr' dis pater, he is nostr' alma mather
Et Lo Spiritus Malum
Omnis Caelestis
Delenda Est
Anti Cristus
Il Filio De Sathanas
Infestissumam
Con cada línea que terminaba sentía como el espejo se iba poniendo cada vez más frío, sin dejar de tocar el espejo comencé a limpiarlo, solté el espejo e hice una reverencia. Me fui a dormir.
Estoy en un lugar muy oscuro, no se siente ni frío ni calor.
-¿Qué lugar es este? Susurre a pesar de encontrarme solo.
Veo una especie de salida, como una puerta… quizá una ventana. Camino un poco y confirmo que eso es una puerta pero no una salida. Es una habitación, mi habitación, pero…se ve suicida, abandonada.
-Tu corazón está lleno de incertidumbre –Dijo una voz tan áspera que con solo escucharla haría que se te erizara la piel- ¿Todos los humanos son como tú o eres el único imbécil que no sabe que le va a pedir a nuestro señor?
caí hacía tras de un solo golpe.
-¿Q-quien e-eres t-t-tú?
-Ahora hasta tartamudo eres, Ja, que patético, eres un enorme pedazo de basura.
-¿Quién eres tú? -Dije esta vez con una voz firme.-
-Pediste verme ¿y no sabes quién soy? Mejor comencemos a Jugar, las criaturas de la tiniebla te ayudaran…si es que les agradaz de lo contrario ellos te mataran y el juego habrá terminado.
Pude ver como se habría un hueco en la pared que dirigía a una habitación alumbrada por una tenue luz.
Llegue al baño y rápidamente comencé a escuchar una voz que cantaba una canción muy conocida, una canción de mi infancia. Busque el lugar de donde venía esa canción…el espejo, en el espejo había una pequeña niña cantando, puso su mano en el espejo y yo instintivamente iba acercando mi mano para tocar el espejo.
-No la toque imbécil – Me dijo una voz con macabra amabilidad.
Rápidamente aleje mi mano del espejo.
La niña comenzó a gritar, una cruel y horrida escena se reflejaba en el espejo. Era esa niña siendo violada y pidiendo ayuda.
-Rompe el espejo y toma el listón que salga de ahí. – Dijo nuevamente aquella voz.
Al romper el espejo salió de el un listón de color rojo lleno de sangre, lo guarde en mi bolsillo. Una nueva puerta se abrió.
Había una mesa muy grande con un elegante mantel blanco y un plato que parecía bastante caro, al lado un cuchillo bastante filoso, al final de la mesa se veía una sombra que estaba comiendo, un horrible olor a carne podrida inmundo la habitación. El ser aventó el plato de la comida al suelo.
-¡Un dedo! –grito aquella criatura misteriosa.
-Dale lo que te pide, no grites, no importa si te retuerces de dolor, a él le gusta eso. – Dijo de nuevo aquella voz. Tome el chuchillo y me corte el dedo, lo puse en el plato y lo deslice por la mesa.
Devoró rápidamente mi dedo.
-¡Un ojo!
Me saque el ojo como pude, lo puse en el plato y lo volví a deslizar
-¡Corazón!
-Pon el listón. –Aquella voz volvió a hablarme.
Saque el listón del bolsillo, lo puse en el plato y lo deslice. Aquella criatura se atraganto y cayó al suelo, me acerque a echar un vistazo y ves si aquella cosa estaba viva.
-Quítale los ojos.
Le arranque los ojos como pude, una nueva puerta se abrió.
-Bien echo bastardo, nuestro señor estará muy feliz de cumplirte lo que quieres.
Lo que viene puede que sea lo más difícil que harás.
Al filo de la puerta había una joven que me daba la espalda y lentamente se iba metiendo a la habitación.
No la mires a ojos ni al vientre, ella fue asesinada por su marido, le arranco los ojos, le corto la boca y le arranco del vientre al fruto de su traición, ofrécele los ojos.Me acerque sigilosamente. Al estar cerca de aquella mujer hice una reverencia en muestra de respeto.
-Un regalo para una hermosa chica.-Dije con la voz temblorosa.
Aquella voz me volvió a hablar. –Demasiado forzado basura, dilo como si fuera verdad.
-Unos ojos hermosos ojos para una hermosa chica.
La mujer se río como con una risita macabramente tímida, posteriormente se puso los ojos y por un instante la volví a ver como era en vida, una mujer demasiado hermosa como para ser real.
Hizo una reverencia y se fue. Levante la mano y la despedí.
Una nueva puerta se volvió a abrir.
En una esquina un ser muy alto estaba sentado, estiro su mano y… sonó la alarma, todo había sido un jodido sueño. Busque el libro, la tela, la navaja, algo que me digiera que eso era real.
Trate de dejar de pensar en ello, acomode mis cosas para irme al colegio, sobre un libro había una nota que parecía haber sido escrita con sangre…
¿Quieres volver a jugar?
Bueno esto lo escribió una amiga y realmente me gustó, quería compartirlo con ustedes.
