Todos los cuentos de hadas tienen un final feliz... ¿Verdad?
🍁One Shot.
🍁Pareja: YoonMin.
🍁Género: drama, angst, omegaverse (fantasía).
🍁Saga del hilo rojo del destino: Libro 1.
🍁Libro registrado en safe creative, por favor no copiar ni adaptar.
Las palabras en cursiva, son los pensamientos. Disfrutar del one shot.
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"Desde el principio de los tiempos estábamos destinados a estar juntos."
Serendipity – JiMin
Siempre había escuchado hablar de las parejas destinadas, y siempre he sabido que era cierto.
La primera vez que te vi, tenía diez años. Nuestros padres eran amigos de toda la vida, pero era la primera vez que asistías a una de esas reuniones. Lo supe desde el primer momento en el que posé mis ojos en ti. Tú serías el único para mí, aquel que había sido creado para estar conmigo, aunque fuese demasiado joven como para presentarme.
Pero también sabía que tú, un grandioso alfa de 18 años, no se fijaría en alguien como yo. No cuando a tu lado estaba la omega más hermosa que había visto nunca. Hoy habías venido con ella para presentarla. Oficialmente anunciabais vuestra relación ante tu familia. Está bien, siempre que seas feliz a su lado.
Me miraste una vez, y pude ver que tú también te habías dado cuenta. Habías notado que yo era tu pareja destinada, pero apartaste la mirada rápidamente. Esa fue la última vez que posaste tus ojos en mí en el tiempo que duro la reunión.
Está bien. Todo estará bien...
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Siempre me han dicho que los cuentos de hadas tienen un final feliz. A día de hoy sigo preguntándome quién dijo esa frase.
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Han pasado cinco años y te he visto esporádicamente. Me he presentado finalmente como omega, pero aun así no ha servido de nada. Tú y esa chica habíais anunciado vuestro compromiso nuevamente en una de las reuniones entre ambas familias. Me acerqué a felicitaros, con una gran sonrisa en mi cara, y un fuerte dolor en el pecho, ¿había un límite para cuan roto me podía sentir? Al igual que pasó aquella vez, nuestras miradas se encontraron, y en ellas nuestros lobos se reconocieron por primera vez, la fuerza que me impulsaba a tirarme hacia ti era fuerte, pero me resistí, al igual que vi que tú hacías lo mismo. Rápidamente apartaste la vista y fuiste junto a tu pareja.
