Perdido en tinieblas

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  Justo saliendo se escuchó una puerta romperse escuché a mi mama gritando y no pude oír mas. El viento soplaba contra mi cara, yo me sentía más triste que nunca, sentía que debí de ayudar a mi madre pero ya era muy tarde, no podía hacer nada, ahora tendría que sobrevivir sin comida. Pero al tratar de conseguir comida, vi a un hombre alto y delgado vestido con un chaleco negro y pantalón azul. Yo sabia que hablar con personas extrañas era peligroso, pero esta era una gran excepción, corrí hacia el alto hombre y le pregunté si tenía algo de comer, el hombre me respondió con su voz grave ¨si tengo, sígueme a mi hogar¨. Debido a mi gran hambre decidí seguirlo a su casa.   

P.I.W.Where stories live. Discover now