Letters: A Quien Corresponda

| Abril 23, 2018

Hola. Realmente no tengo idea de cómo comenzar esto. Esta es mi segunda carta y, a pesar de que no enviaré esta porque en tu empresa son un poco complicados y no puedo seguir el proceso que indican en el fan cafe para al menos enviarte esta carta, debido a mi situación económica, además de que si puediera hacerlo, no sé si tendría el valor para esto.

Hoy en clase de Biologia la profesora habló sobre algo que me llamó la atención. Dijo que las neuronas se conectan mediante sustancias que se liberan, a eso que llamamos sentimientos, nuestra forma de reaccionar, lo que es parte del consciente, y despues explicó que dichas sustancias crean como un puente entre los axiones de las neuronas, (ya que si estas se juntan, pasan corrientes eléctricas y eso lleva a ataques epilépticos) y mediante ese puente pasan la dopamina y quien sabe que mas, para poder "comunicarse", mi manera de expresarme no es la mejor, me disculpo, espero no aburrirte. Bien, reanudando lo anterior, ella explicó que es por eso que las personas ebrias no pueden coordinar bien sus movimientos y no piensan lo que hacen, ya de dicho puente es interrumpido por el alcohol y al no poder comunicarse las neuronas, sale a la luz nuestro inconsciente. Bien, hasta ahora solo expliqué el efecto del alcohol.
Un chico de mi clase preguntó si pasa lo mismo con el amor. La profesora dijo que... en realidad el amor es considerado como una enfermedad mental. Y sí, de ahí saqué la idea de escribir la canción de "Mental Illness". Sí, también es para ti. Igual que "First Love". Me gustaría que las escucharas algún día, ya veré que haré para que llegue a ti.

Fue algo curioso eso, ya que yo creí que estaba medio loca por estar enamorada de alguien como tú. Prácticamente un platónico para mi. Inalcanzable. Y aún así teniendo esperanzas porque algún día tú, tan alto, gigante a mi lado, puedas verme a mi, una pequeña hormiga. Sé perfectamente que eres una persona, como todos, mortal, no sé en verdad si entiendas a lo que me refería, pero no quiero entrar en detalles. Continúo donde me desvié, creí que esas esperanzas porque algún día me vieras, me convertían en una tonta, loca y soñadora. Sabiendo ya lo que vi en clase con la profesora de Biologia… puedo darme una idea de que es mucho peor de lo que pensé.
No sé bien qué pensar sobre mí misma, me siento estúpida. Me siento atontada. Verte es ya uno de mis sueños. Pienso mucho en ti, lo creas o no.
Te has vuelto dueño de mi cabeza. Sé que puedes no creerlo porque, en primera: no te conozco en persona, y en segunda: no conozco tu personalidad real fuera del escenario. O al menos eso es lo que muchos creen.

Déjame decirte algo: Tu música habla por ti. Tus letras. Veo en ellas pequeñísimos detalles que ni las chicas creadoras de las teorías que encajan casi perfecto de los comeback que hacen, no ven. Veo tus ojos. Aunque sí, no lo niego, eso no me da a conocer el 100% de ti. Y es lo que quiero. Realmente lo quiero y, no sabes cuánto.

Ok, suficiente. Siempre me desvío del tema jaja. El punto es que… te veo. Veo tu amor por la música. Veo que quizás, si nos conocieramos conectaríamos en ello: la música, y tal vez hasta podríamos crear algo grande, inmortal. No soy famosa ni conocida, pero realmente amo la música y… a ti.

En el pasado me negaba. Me negaba a creer que estaba enamorada de alguien como tú: con alas y volando. Yo, con alas y sin atreverme a volar. Pero pasó. ¿Y sabes qué es lo peor de todo?… Que el amor es una enfermedad mental y eso empeora mi situación inicial.

Liz~