Mi vida es un Reality Show

Mi vida es un Reality Show II

-Quita esa cara de infelicidad de tu horrible cara Mike- dije mientras le servía leche en su plato.

Sólo me miró mientras servía su cereal.

Era la primera semana con las cámaras.

Realmente era un poco molesto ser perseguido por un par de hombres a todas partes a donde vas. Intentaban ser transparentes, sólo era un camarógrafo y un utilero, pero bien, no eran para nada transparentes. Estaban siempre a un lado de mi y por defecto, de Mike, o de cualquier persona muy allegada a mi.

Yo era maquillada antes de cada encendida de la cámara y la misma chica, llamada Mari, me aconsejaba como vestirme. Ella de hecho me caia muy bien, hasta que empezaba a decir que usaba mucho mis zapatillas converse, entonces tenía que ignorarla.

En la escuela había sido un poco sorprendete la reacción de la gente. Aun no me consideraba popular ni nada por ese estilo, pero me habían hablado personas que jamás había visto antes. Julie, mi mejor amiga, sólo podía estar feliz, sobre todo cada vez que llegabamos a la escuela y le otorgaban su micrófono oculto. Podía ver que le encantaba casi más que a mi misma.

-¿Trabajarás hoy hasta la hora habitual?- pregunté a mi hermano llevandome comida a la boca.

-Si, y luego saldré, es posible que llegue pasada la media noche-

-¿Ah si? ¿A dónde vas?-

-Voy a salir con Maggie- dijo Mike despues de un silencio, mirando incómodamente a la cámara por un momento.

-¡Mike! No me habías dicho que ustedes eran novios. Eso es genial-

-No somos novios, ¿ok? Solo voy a llevarla al cine después de que su turno termine.-

-Ay vamos, Mike! Llevan una vida trabajando juntos en la Pizzeria de Rami. Yo sé que tu le gustas-

-¿Ella te ha dicho algo?- preguntó más interesado, incluso dejando de comer.

-Es decir, no. Pero una chica puede darse cuenta de cosas como esas.-

-Bah, patrañas.- dijo levantandose de la mesa.

-Oye! Es cierto-

-Apurate para el colegio o te quedarás todo el dia conversando con tus camarógrafos sobre cuan popular vas a ser con tu programucho-

Con mi mano tapé el micrófono que colgaba en la parte interna de mi sweater. -Jódete Mike-

Me mostró el dedo antes de salir por la puerta de atrás.

-Hey amorcito-

Rodé mis ojos. Éste era Raf. Uno de los chicos más hermosos de toda la secundaria, delantero y capitán de la selección de fútbol, alto, cabello castaño y ojos verdes. Sexy como un infierno candente. Tres semanas atrás bien podría haber metido mis libros en una poseta de un baño, o de hecho peor, simplemente ignorar del todo mi existencia.

Y hoy por hoy, estaba algo así como intentando algo conmigo.

Podía saber to-tal-men-te que se trataba de que ahora yo iba a salir en un programa de televisión y él, como todo idiota que era, quería tener sus minutos de fama.

-Soy Dani, ¿ok? No me llamo amorcito- dije abriendo mi casillero para tapar su enorme y hermosa carota.

Se dio la vuelta y se apoyó en uno de sus fornidos brazos.

-No puedo llamarte de forma cariñosa. Tu audiencia no quiere verte ser incortés, o si?- dijo mirando a Gus. Gus es el camarógrafo.

-De hecho, no puedes llamarme como quieras. Y de mi audiencia, me encargo yo. Ahora ve a anotar carreras o como sea.

-Marcar goles, Dani- dijo y pude ver una genuina sonrisa allí en sus labios.

Me congelé un momento. Pocas veces, por no decir nunca, había visto a el gran Raf Black sonriendo de esa manera.

-Te acompaño a clases-

Mi momento de vacilación me costó aquello. Sólo asentí y empezamos a caminar.

Todo el pasillo nos miró de pronto. Supongo que era extraño ver a la rara con el popular.

Pero vamos, estaba siendo grabada para MusicAdicts.