Una Mañana Igual A Todas

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Narrador.

Los días en el apartamento se estaban volviendo un tanto molestos para Beca, por la razón de que Stacie siempre invitaba a Aubrey y Chloe sin falta. Sin embargo los días que no era así los disfruta demasiado.

Una mañana Beca tenía que salir muy temprano, pues tenía una entrevista de trabajo.

De mala gana se levantó, el trabajo en una estación de radio no era tan complicada, no le emocionaba tanto el tener que acomodar CDs pues no era el trabajo que ella esperaba tener en algún momento de su corta vida.

Ya arreglada salió de la habitación con dirección a la cocina, a ella normalmente no le gustaba desayunar. Cuando lo hace es por que ya no aguanta escuchar a su estómago rugir tan fuertemente.

Tomó unas barritas y planeaba tomar un poco de agua, sabe que no es mucho pero mantendrá su estómago callado por un momento.

Para su sorpresa no encontraba el vaso que acostumbra dejar abajo porque en la alacena dónde están los vasos no alcanza, tal vez subiéndose a la barra pero hoy no está de humor para hacer de misión imposible. ( o más bien nunca)

Abrió la puerta de la alacena y se quedó observando por un momento para maldecir a sus padres por no ser altos y de pasada maldecirse a si misma también.

Miró sus pies y se preguntó "¿Por qué los malditos tacones no ayudan en esto?" Estiró su brazo lo más que pudo pero el intento no era el suficiente. Al mismo tiempo que baja su brazo deja salir un suspiro profundamente largo.

No tenía tanta prisa ya que ella se había levantado 2 horas antes. Y no por que ella quisiera sino que el motivo fue de que su reloj biológico la despertó antes que la alarma y ya no logró conciliar el sueño.

Ella odiaba cuando le pasaba eso. No entiende el motivo el por qué le ocurre, solo sabe que es muy molesto para ella, ya que quiere seguir durmiendo pero no puede.

Ambas manos en la barra y sin dejar de ver el reloj que está en la cocina marcando las 7:15 a.m. con los focos hipnotizantes que parpadean y que a Beca le parece estúpido el verlos pero le es imposible. No puede evitar el contar las veces que lo ha visto parpadear.

-¿Necesitas ayuda?- le dice una voz detrás de ella.
Hace un pequeño brinco que solo ella sabe que lo hizo. Odia ser de esas personas que se asustan con facilidad.

La persona que habló resulta ser Chloe, se acerca a ella, de puntas y estirando el brazo todo lo que puede, y aunque ella es solo una cabeza más alta que ella logra alcanzar el vaso.

Ya que lo toma voltea a ver a Beca a los ojos y con una sonrisa se lo entrega.

Es raro el que Beca se haya hipnotizado con sus ojos azules, a ella no le gusta hacer contacto visual con nadie a los ojos, pues eso la pone muy incómoda. Pero con Chloe en esos mismos momentos no fue así; pudo sentir como dejó salir un suspiro corto e inesperado; de esos que salen del alma ("según Beca").

Ya que al fin logra bajar de las nubes, con su fuerza de voluntad logra de dejar ver sus ojos, por unos segundos se perdió en su sonrisa pero fue muy poco. Mira el vaso y recuerda para que lo iba a usar.

-Gracias pero no necesitaba ayuda- mira al vaso para maldecirlo.

-Sí. Ajá. Claro, tenías todo fríamente calculado ¿no?- la pelirroja comentó como si fuera demasiado obvio.

-Algo- Beca levanta los hombros.

-¿Pensabas moverlo con la mente o algo?-

-No.- por un momento no iba a tomar el vaso pero en serio necesitaba hidratación. Lo tomó y fue a servirse agua.

-Bueno pues como te vi que te quedaste viendo un buen rato pensé que eso harías.- Deja salir una sonrisa.

Beca negó con la cabeza y entrecerró los ojos y pensó. "Esta chica en serio está loca. Espero y le prohiban el ver películas o algo por el estilo."

-¿Saldrás?- preguntó Chloe ya que la vió muy arreglada.

-¿ Por qué siempre apareces cuando yo estoy en la cocina?- tiró el poco líquido que le quedó en el vaso, lo colocó en la barra y se fue en dirección a su habitación sin esperar respuesta alguna de la pelirroja, ya que no le había dado el tiempo para que le contestara.

A Beca le enojaba que siempre se encontrará con Chloe en las mañanas o mejor dicho que la pelirroja llegará en el momento justo en el que ella se encontraba en la cocina. Y lo más molesto fue que en una de esas veces hizo contacto visual con ella y no le gustó el resultado que le dió.

Ella se preguntaba porqué con Chloe no le incómoda mirarla a los ojos. "¿Será por su color de ojos?" Se preguntaba Beca.

Y como a ella le molesta todo lo que no puede llegar a entender, claro que le molesta el hecho de no saber porqué no le incomoda.

Siempre trata de no pensar en ello pero... "¿Cómo dejar de pensar en ella si siempre me la encuentro en las mañanas?"

¿Alguna mañana será sin la aparición de Chloe?

Ya había hablado seriamente con Stacie sobre sus visitas, sin embargo el resultado fue y es el mismo.

Ya Beca está pensando en que ellas también deberían pagar una parte del apartamento ya que pasan la mayor parte ahí.

Solo Una Mirada (Bechloe)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora