Pesadilla Desastrosa [1 x 16]:

1.2K 47 2
                                    

Capitulo dieciséis:


-"Hola Santana, te eh estado observando muy bien, te preguntaras por qué hago todo esto, porque mato a toda esta gente. ¿Quieres saber? Es porque tengo que proteger al amor de mi vida, tranquila que cualquiera que te haga pasar un mal rato va a morir, Así como yo muero de amor por ti... Por cierto, a Brittany no le Conviene regresar, por si no la quieres ver muerta. NADIE HACE SUFRIR A MI SANTANA,¡NADIE!, Menos una rubia desabrida que no te valora pronto estaremos juntas amor, ya verás... Yo iré por ti"

Solté un grito aterrador que trajo como consecuencia a mi madre y a Fernanda directo a mi habitación.

-¿Qué coño pasa?- preguntó Fernanda algo espantada.

Con mis manos temblorosa le entregue la carta que había recibido de la asesina. Ella la leyó detenidamente y su semblante cambio rápidamente... Estaba furiosa.

-¡Voy a matar a esa maldita!- Decía apretando los puños.

-Ah estado en mi cuarto- Dije con una mirada ausente.

-Vamos a la estación, tienes que llevarle esta carta a el detective- Contesto mamá tomando las llaves del auto.

Nos dirigimos a la oficina mamá y yo, mientras Fernanda cuidaba que nadie entrara a casa.

-Espérame aquí- Dijo mi madre tomando la carta y entrando a aquella tétrica oficina. Solté un suspiro muy profundo.

-Uno solo suspira así cuando está enamorado o cuando tiene roto el corazón -

Di un sobresalto -¡Dios Susan! ¡Me has espantado!- 

Cruzo los brazos. -¿Tan fea estoy?- 

-No, no me refería a eso- Solté una pequeña sonrisa. -¿Qué haces tú aquí?- 

-Espero que papá salga del trabajo, ya nos íbamos cuando llegó tu mamá- Se derrumbó en la silla junto a mí.

-¿Tu papá es el detective Jonathan?- Pregunte asombrada

Ella se hundió de hombros. -Por qué crees que siempre me salgo con la mía- Comenzamos a reír por unos segundos.

Nos pusimos más o menos al día de todo lo que habíamos hecho, y unos gritos provenientes de la oficina del detective hicieron que olvidáramos completamente la plática y tratáramos de escuchar, fue imposible porque minutos después salió mi mamá muy molesta.

-Santana sube al coche- Ni siquiera detuvo el paso. Siguió andando hasta llegar a la puerta.

-Espera, solo me despido- Me gire de nuevo a Susan.

-No hay tiempo, ¡Sube al auto!- Grito y todo mundo se volteó a ella.

-Adiós Susan- Dije al correr hacía el auto. Conducimos sin rumbo por unas horas, veía como nos alejábamos del pueblo pero no quise hacer ni decir nada por miedo a que mi madre se enojara más.

Mamá paro de golpe el carro en una gasolinera. Se quedó con la mirada estática hacia el frente y de un segundo a otro rompió el silencio y comenzó a llorar; Yo soy pésima dando ánimos así que solo callé mientras que mamá pegaba los sollozos más fuertes que eh escuchado en mi vida.

-Ma... Mamá, no llores- Dije tartamudeando.

-Ya estoy bien- Seco sus lágrimas.

-¿Qué paso?- Pregunté.

-Quiero que te vayas- La mire con asombro. -No iras a un maldito reclusorio mi niña, necesitas irte de aquí- 

-No me iré, ¡E... Este es mi hogar! A menos que sea para irme a la uni... universidad o cuando me case con alguien, no así ma... mamá, no quiero ser una m... Maldita prófuga-

-Pero si te encuentran culpable...-

Interrumpí inmediatamente. -No lo harán, yo sé que no soy la culpable, necesitamos conseguir la lista de los demás sospechosos para ver quien es- 

-Mejor vete antes de que sea tarde hija- Replicó mamá desesperada.

-Que no, no huiré de esto, voy a buscar a la asesina- Su cara era de resignación.

Encendió el auto y regresamos a casa, para nuestra sorpresa Fernanda no estaba, fui a la cocina y prepare dos chocolates calientes. 

-¿Qué dijo Brittany de que volviste?- 

Le di un sorbo a mi bebida. -Pues- 

-¿Pues qué?- Preguntó mamá cruzando sus brazos.

-Nada, no le quise decir para que no se preocupara-

Ya sé, no estuvo bien mentirle a mi madre pero no puedo decir Brittany sin que traiga como causa el nudo constante en mi garganta, apenas digo Britt y una lágrima corre por mi ojo izquierdo.

Subí al cuarto y como había dejado la portátil encendida la tome. Abrí mi diario y comencé a redactar mi tiempo en la gran ciudad.

-Querido diario- Dijo Fernanda parada detrás de mí y leyendo el texto de mi portátil.

-Esto no te incumbe- Cerré la computadora y la puse a un lado. 

-Descuida, solo leí la parte donde decía que era tu heroína- Dijo sarcásticamente, Mis mejillas se tornaron algo rojizas. -Vaya, tenía tiempo que no te sonrojabas por mi culpa- Ella se acercó un poco a mí. -No sabes cómo te deseo Santy-

-Acabo de salir de una relación, deberías esperar un poco- Dije poniendo mis manos en su abdomen para que no se acercará más.

Siete días exactos pasaron tras el día de mi ruptura con Britt, ni ella me llamaba ni yo. Mis días se sentían vacíos sin mi pequeña unicornio cerca de mí, pegando de brincos y besándome a cada instante. Yo solamente pensaba en descubrir a la asesina, pero estaba muy lejos de saber quién era.

Me fui volviendo muy amiga de Susan, así su papá no me molestaba tanto, y ella se encargaba de "Hablarle bien de mi". Desperté un lunes con unas ojeras terribles, tenía la cara completamente pálida y unas nauseas terribles, mamá sugirió que faltara al colegio, pero la entrenadora Sue no nos dejaba faltar por nada del mundo. 

-¡Mamá! ¡Ya me tengo que ir!- Salí tosiendo y cubriéndome con una bufanda el cuello, tomé un termo lleno de té caliente.

Camine hacía la parada del autobús, ese día me sentía muy enferma para irme a pie.

-Hola- 

-¡Brittany!- Dije escupiendo el té caliente hacía el frente.

Ella soltó una pequeña sonrisa, saco un pañuelo y me limpio los restos de té que tenía en los labios. -Hola San-

-¿Q...Que haces a...aquí?- Pregunte extrañada.

-Estoy de vuelta, New York es genial, pero mi corazón esta aquí contigo- 

-Détente Brittany, aun no te puedo perdonar- Agache la mirada.

-Dejé que pasara el tiempo para que pudiéramos hablar tranquilas- Puso sus manos en mi barbilla y levanto mi cara, apuntándola a sus grandes y brillantes ojos azules.

-No entiendo- 

-Mira, tu "amiguita" Fernanda tenía razón, yo seguí a Artie cuando tú le gritaste, llegamos a un parque en la avenida principal y mi tacón se rompió, caí directamente al suelo y me torcí el tobillo, estábamos lejos de las bancas así que como pudimos subí a la silla de Artie. La foto es real, él me beso pero si ella vio el beso también vio cómo empuje a Artie hacía atrás y le dije que te quería a ti, jamás te quise lastimar Santana, te amo más de lo que eh amado a alguien en esta vida, no quiero perderte por que solo tú me haces feliz-

Me quede con cara de pasmada al escuchar su explicación, una lágrima corrió por mi mejilla.

-¿Que llores es bueno o malo?- Calló por unos segundos. -Dime algo antes de que muera San- 

Sonreí al recordar que eso mismo le dije cuando le pedí que se volviera mi novia. -No sé si creerte- Desvanecí mi sonrisa.

Ella acerco mi cadera a la suya y me pego a la pared; a milímetros de mis labios. -Es que tienes que creerme, jamás te haría daño mi Santy, es más, si quieres hablemos con Fernanda, si es honesta ella te dirá la verdad.-

-Como sea- me encogí de hombros.

Llegamos a la escuela y Britt corrió a la dirección por un justificante de faltas. Yo regrese a mi casillero tres horas después y al momento de abrirlo una carta cayo.

Tenía la misma letra que la anterior, esta vez era cursiva, la abrí rápida y sigilosamente mirando de un lado a otro para que nadie me viera.

"-Te dije que a la maldita de Brittany no le convenía regresar, si no quieres que se muera mejor no te le acerques, ¿Te importa esa rubia? ¿La amas? Entonces ni se te ocurra mirarla porque nadie podrá detenerme... La matare lentamente para que sienta el dolor que tú sentiste por su traición. Mi amor mi plan ya está casi terminado; fase uno: Matar a cada persona que te haga mal... Ya iras conociendo fase por fase mis planes, así que no desesperes mi niña... Y otra cosa. Tampoco te quiero cerca de Fernanda, porque también la mato, ¿Entendiste cielo? Por cierto, nada de volver a mostrar mis cartas o me veras molesta-"

Di la vuelta y me recargue en los casilleros, fui bajando lentamente hasta quedar sentada en el suelo. Mis sollozos emanaban desesperación e impotencia. 

-¿Señorita López?- Dijo la consejera Emma, Limpie rápidamente mis lágrimas. -¿Esta bien?-

-Sí, solamente leí algo que no me agrado- 

-Sabes que puedes contar conmigo ¿Verdad?- Se agachó para mirarme el rostro.

-Lo sé- Me levanté y le di un abrazo. -Tengo que irme, mamá espera- 

Camine con la vista nublada por mis lágrimas, solo pensaba en buscar a Brittany para decirle que se fuera.

-Hey Britt-Britt- Dije al acercarme.

-Hola San- Me miró fijamente. -¿Estuviste llorando?- 

-¿Yo? ¡N...no! Para nada- 

-Te conozco corazón, eres mi mejor amiga y se cuándo estas mal, aparte que esos hermosos ojos cafés te delatan- 

Solté una sonrisa melancólica. -Tengo que hablar contigo, ¿Iras al entrenamiento de las Cheerios?- 

-Sí, iré. ¿Y tú?- 

-No creo- Quite mi cabello de la cara.

-¿Por qué?- 

-Solo no quiero ir, Brittany no es como decirte esto... Tienes que regresar a New York...-

Mi rubia se puso pálida. -Pero San, yo volví por ti- 

-Lo se Britt, pero yo... Yo estoy mejor sin ti... Y creo que tú también estas mejor sin mí- 

-Santana no digas eso, te amo, nos amamos... Nosotras estamos destinadas a estar juntas San- Dijo al tomarme de los brazos.

-Entiéndeme por favor- 

-Pero... ¿Qué cambio? ¿Ya no me amas?- Dijo frunciendo el ceño.

-No puedo decirte...- Cayó la primera lágrima por mi ojo derecho.

-¡No por favor! ¡No! ¿Qué te han dicho? Hace un rato estabas bien- 

-No hagas esto más difícil Brittany- Comencé a alejarme de ella.

-No me iré, jamás dejare de luchar por ti, eres mi novia digas lo que digas... No te quise hacer daño, jamás te engañe, créeme mi amor- Ella también comenzó a llorar.

-No quiero que te hagan daño- Contesté mirándola justo a los ojos.

-¿Daño? ¿De qué carajo estás hablando? ¿Quién me haría daño?- 

-De nada, ya me tengo que ir, por favor hazme caso y regresa con tu abuelo- Di la vuelta y camine de prisa, pero no sirvió de nada porque Britt me alcanzó y tomó mi brazo haciendo que girará.

-Es por esa maldita ¿Verdad? ¿Qué paso con la asesina?- 

-¿Qué? N...No es p...por nada de eso. 

-¿Te amenazó? ¡DIME SANTANA! ¡¿TE HIZO ALGO?!- Dijo apretando los puños.

Baje mi mirada al suelo. -Esto no tiene nada que ver con la asesina, tenías razón... Yo ya no te amo, me enamore de otra persona en este tiempo, y quiero estar con ella. Pero me pidió que te dejara de hablar y eso hare para que podamos estar juntas- 

Brittany soltó un gemido demostrando dolor. -No te creo. Yo sé que me quieres- Las lágrimas comenzaron a salir por sus hermosos ojos azules y su mirada se opacó dejando atrás su brillo.

-Ya no te amo entiéndelo- 

-Entonces mírame a la cara, veme a los ojos y dime que quieres a alguien más- Mi mirada jamás se levantó. -¿Ves? Por eso no te creo, No me iré y punto final.-

-Si no quieres verme con otra abrazada y a los besos te sugiero que te vallas, no te quiero lastimar como tú me lastimaste a mí- Di la vuelta y camine sin mirar atrás.

********************************************************************************************
DEJEN COMENTARIOS:* Y VOTENLO:3

Pesadilla desastrosa [Fanfic Brittana]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora