Dos

386 76 11
                                    

Que hambre tengo, no me vendría nada mal una hamburguesa, con papas, y salsa picante. Oh mierda quiero llegar a casa ahora mismo. ¿Por qué tomé el camino largo?, porque soy idiota claro.

Dios hoy si fue un día asqueroso. Una chica de cabello rosa pastel vino con intenciones de formar un dibujo* conmigo, por obvias razones me negué a ello.
La primera, es porque su color en mi lienzo se vería como una tenue neblina en la noche, casi nada.
La segunda, realmente no tenía intenciones de formar un dibujo con ella, ¿forjar mi destino con una desconocida?, por supuesto que no.

Apresuré el paso y me desvíe por un parque, el cual se me hacía completamente desconocido. Después de vagar por un rato llegué a la conclusión de que estaba perdido, pff, esto me pasa por tomar caminos alternos.

Me dirigía hacía una banca cuando algo capto mi atención —alguien, siendo específicos—, una voz aguda casi infantil se escuchó algo cerca de donde me encontraba, y en contraste a esta, una voz grave y profunda. Se escuchaban cada vez más cerca, y así pude distinguir a los dueños de dichas voces.
El chico de la voz grave corría a una gran velocidad, pasando por mi lado y causando un pequeño viento, su cabello era rojo y portaba una sonrisa geométrica bastante peculiar. Y el chico de la voz aguda —hermosa por cierto— venía mucho mas atrasado que el chico de voz grave. Como venía a un ritmo lento pude apreciarlo un poco mejor que a quien supongo es su amigo.
Sus cabellos blancos estaban todos desordenados, sus ojitos algo aguados, sus mejillas levemente sonrosadas mientras una bella sonrisa con un diente chuequito adornaba su cara.

Hermoso.

Sentí un pequeño empujón y me encontré a mi mismo en el suelo y con un ardor en mi brazo izquierdo, por debajo del codo.
El chico de cabellos blancos se acercó había mi y me ofreció su mano para levantarme. Agradecí su ayuda con un susurrado gracias.
Al momento de tocar su mano sentí una sensación de... ¿dolor?, no era insufrible, era algo así como un pequeño raspón.

Y parece el que también lo sintió.

Murmuro un lo lamento y un adiós, para posteriormente marcharse.















Dibujo*; Se Trata De Formar Una Vida Con La Persona Que Elijas, Un Pequeño Puntito Basta Para Estar Atado A La Otra Persona. No Hay Manera De Romper Ese Lazo.
Básicamente Si Un Crayón Dibuja Sobre Un Lienzo Estos Forman Un Lazo Para Toda La Vida, Está La Posibilidad De Dibujar Sobre Otro Lienzo O Dejarse Dibujar Por Otro Crayón, Pero Una Vez Se Dibuja Sobre Alguien Ya No Se Puede Estar Solo.

° • °

Jimin Ni Siquiera Le Dijo Su Nombre Cjau, Ahre

c r a y o n   b l a n c o - YMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora