YoonJin

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Esa tarde SeokJin espero ver a Yoongi sentado en el mismo lugar de siempre, sintió una profunda tristeza al no verlo ahí pero también estaba feliz, hoy no sería víctima de sus "amigos". Se sintió aliviado cuando llegó a su lugar de encuentro y ahí estaba sentado como siempre, con su cigarro en la boca.

—¿No te cansas de fumar?

—Y tú, ¿No te cansas de llevarte con esos idiotas?

—E-ellos no tienen nada que ver...

—¡Son los malditos que me golpean!, ¿Y dices que no tienen nada que ver?, es cierto... tú también eres uno de esos malditos pero aquí estoy yo dejándome llevar cuando vienes con tú estúpida cara buscándome, ¿También te estas burlando, no es así?

—Por favor, no es así, lo que yo siento es sincero, solo que es complicado y no me has dejado explicarte.

—Tus palabras no valen nada para mí, puede que me gustes pero cuando te veo sonreír al ver como me golpean, todo eso se desvanece.

Yoongi tomó su mochila del suelo e iba a irse pero rápidamente SeokJin lo retuvo abrazándolo por detrás, se aferró a la espalda ajena, no tenía intenciones de dejarlo ir. No quería oír de nuevo los insultos pero lo merecía por ello estaba dispuesto a oír todos los que vinieran sin embargo, solo sintió como amablemente Yoongi se giró sin soltar sus manos y en lugar de insultos fueron unos cálidos labios los que presionaron los suyos, se sintió aliviado.

—Quiero creer que eres sincero... quiero creer que a tu lado puedo ser feliz— susurró Yoongi sobre los labios entreabiertos del castaño.

—Entonces bésame de nuevo, déjame estar a tu lado hasta que estés satisfecho.






—¿Quién te hizo estos moretones?

SeokJin gimió cuando la boca ajena se deslizaba por su abdomen, se aferró a la espalda de Min y cerró con fuerza los ojos. —Mi padrastro pero por favor no los mires, me veo horrible.

—Eres hermoso— y besó esos hematomas que tenía en el abdomen  acariciando la suave piel.
—Sumamente hermoso.

Arqueó la espalda cuando la calidez de Yoongi inundo su interior, enterró sus uñas en su espalda cuando las embestidas comenzaron, sentía su cabeza darle vueltas y en ella solo hubo lugar para un futuro feliz junto a este chico, su chico. Sus labios volvieron a unirse en un beso apasionado, sin reservas, sin miedos, solo de amor.

—No me dejes solo nunca.... te lo ruego.

—Nunca, lo prometo.

Esa noche se entregaron en cuerpo y en alma, esa misma noche el titulo "novios" fue otorgado en su relación. Esa misma noche se sinceraron, hablaron de sus miedos y de muchas otras cosas más que nunca se habían atrevido a mencionar. Probablemente recibirían muchos comentarios negativos, serían objeto de maltratos y burlas pero eso no les importo a ninguno de los dos, no si ahora se tenían el uno al otro para protegerse. Cuando la mañana llegara, un nuevo comienzo empezaría para esta nueva pareja, una en la que se aman y lo demás no importa.

Ahora SeokJin no estaría más solo... por qué ya tenía a alguien con quién compartir su vida y con una sola persona le bastaba.

Ahora Yoongi no soportaría más golpes, más humillaciones y tampoco volvería a estar solo, sería fuerte para él y para la persona que ahora deseaba proteger.

—Te amo, Yoongi.

—Te amo, SeokJin, mucho más.

SeokJin sonrió, los labios sabor a tabaco de Min eran su mayor adicción y cura al mismo tiempo.

Tus labios sabor a tabaco| YOONJINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora