Llevaba observándola semanas, y tenía la corazonada de que ella se había dado cuenta, gracias a las sonrisas ladeadas que ella esbozaba- sin mirarme- pero cuando yo si la miraba. Aunque el único problema era que ella era demasiado, inclusive para un chico como yo, y si tengo que ser sincero, sabía que jamás me miraría... pero un día ocurrió algo, lo que yo denominaría como un milagro: Tessa se acerco a hablarme. En ese momento, yo estaba sentado comiendo junto a mi banda de amigos- los cuales, cabe aclarar, que causamos el suspiro de muchas mujeres- y se sentó a mi lado, robándome una papa frita.
- Oí que participarás de un juego de basketball, dentró de dos días- soltó con naturalidad- ¿es para conseguir la beca deportiva, no?
-Si, los mejores jugadores tendrán una oportunidad única en su vida
-Suena como que les estas haciendo propaganda – me respondió alzando ambas cejas, divertidamente.
-Tengo que hacerlo, Tess. Cuanta más gente compre entradas por mi nombre, más puntos obtendre para poder ganarla.
-¿Acaso todo es sobre eso, ahora? Tengo que estudiar para tener un futuro, tengo que trabajar para que mis hijos tengan un gran futuro, tengo que aprender para que en futuro sea el mejor de la universidad, tengo que "ganar puntos" para obtener una futura beca. Todo es así, todo el maldito tiempo... pero¿ para cuando un ahora? Porque, realmente, jamás escuchas a nadie decir que no le preocupa el futuro y que solo quiere vivir el momento. Aunque si escuchas que todo el mundo hará cosas más adelante pero luego no las hacen... y la verdad es que cuando te mueras, tu trabajo no se morirá contigo, todo el dinero que ganaste será pasado a tus hijos y que- si tienes suerte de que ellos no se lo gasten todo- será pasado a tus nietos pero eso no te cambiara nada, estarás muerto y no te habrás llevado lo único te puedes llevar, lo único que nadie puede quitarte o robarte: las experiencias y la felicidad de haber disfrutado tu vida al máximo.
La mire sorprendido, en menos de cinco minutos había hecho un discurso encontra al regimen en el que vivimos.
-Supongo que se trata de mantener todo estable, no podemos ir corriendo por ahí creyendo que el mundo es nuestro y siendo ignorantes.
Su cara me lo dijo todo, no estaba para nada conforme con mi postura, aunque su boca me dijo simplemente una groseria acompañada de un "eres de los que le lamen los pies al gorbierno"
-¿Sabes, cariño? Hay algo que se llama respeto por la opinion ajena
-Tienes razón- su confención me tomo desprevenido, Tessa no parecía de las personas que daban su brazo a torcer- Pero puedo hacer que cambien su modo de pensar, si les muestro que tengo razón. Así que vamos, hay un parque aquí cerca, hagamos algo divertido.
-Nos acabamos de conocer formalmente y estamos en horario de clases ¿realmente piensas que me iré así no más? Además ni siquiera sabes mi nombre.
-Parte de las aventuras de la vida es correr riesgos- me contratacó- Y si se como te llamas... creo que era Tony o algo por el estilo ¿pero a quien le importa? ¿Ya nos vamos?
-No puedo creer que le hayas embocado a mi nombre- le confesé cuando me agarro de la muñeca y comenzó a correr en dirección a la salida.
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Broken Smokes
Short StoryTessa era preciosa, una chica digna de admirar, sus ojos verdes, que irradiaban misterio, conquistaban a cualquiera, su sonrisa enigmática hacia resaltar aún más el misterio que ella poseía, su cabello negro y ondulado le daba un toque de oscuridad...