-Te quiero. Hablamos luego. -le doy un beso en la mejilla a Mirella y salgo del apartamento con el libro en la mano con el propósito de ir a leer al parque.
Si ahora mismo me encontrase con él, no sabría qué decir o qué hacer, ya que hace 3 semanas que no le veo. Me he preguntado miles de veces a mí misma dónde estará haciendo qué con quién y por qué.
Cuando he llegado al parque, he ido directamente a sentarme al banco. La verdad, llevo 15 minutos intentando contentarme en leer y adentrarme en la historia, pero lo único que hago es estar pendiente de si hay alguien a mi alrededor. Cuando por fin me concentro, y empiezo a leer, el tiempo transcurre rapidísimo. Ya estoy leyendo la página 200, es decir, que me quedan a penas 20 o 30 páginas para terminar el libro. Miro el reloj, viendo así que llevo aquí 3 horas y media sentada, y nada... nada de nada. No está... qué decepción. Continúo leyendo hasta acabarme el libro. Lo cierro y lo guardo en mi bolso. Me ha encantado
-¿Cuánto tardaste en leerlo? -murmura alguien a mi lado.
Aparto la vista del libro para mirar hacia delante. Cuando menos lo esperaba, aparece él... qué felicidad volver a verlo. No puedo evitar poner una sonrisa de oreja a oreja cuando le miro, así que así sucede.
-Te eché de menos. -digo sin remordimiento.
-¿A sí? -pregunta enarcando las cejas.
-Así es... ven siéntate. -le ofrezco amablemente.
-¿Te gustó el libro? -murmura mientras se sienta a mi lado.
-Así es. -rebusco por mi bolso para coger el libro y entregárselo.- Aquí tienes. Muchísimas gracias. Gracias a ti he descubierto uno de mis libros favoritos. -una gran sonrisa de oreja a oreja invade mi cara.
-¿Enserio? -ríe tiernamente.- Te lo dije, ¿o no?
-Así es. Tenías toda la razón del mundo. Toma, cógelo. -repito.
-Me haces un favor.
-Sí, claro. Dime.
-Quédatelo... por favor. -pide con una pequeña sonrisa.
-¿No lo quieres? -pregunto extrañada.
-Sí, pero quiero que lo tengas tú hasta dentro de mucho tiempo. Ya me lo devolverás algún día. Así tendrás siempre una quedada pendiente para devolverme el libro. -sonríe.
Qué tierno.
-Pero si es posible, no me lo entregues hasta dentro de mucho tiempo. ¿Vale? -me guiña un ojo.
Sin pensarlo mucho respondo lo primero que me viene en mente.
-¡Por supuesto! -respondo con una amplia sonrisa en la cara.- Oye por cierto. ¿Cómo te llamas? -pregunto con cierto interés.
-Luis... encantado de conocerte. -ríe a carcajadas.- ¿Y tú?
-Carla. Encantada. -río a la vez que él.
-Carla, este rato que he pasado contigo ha sido espectacular, pero... debo irme a casa. ¿Esta semana nos veremos por aquí? -dice mientras se levanta del banco.
-Claro, ¿por qué no? -sonrío y le miro directamente a los ojos sin apartar la vista.
-Hasta luego entonces. Buenas noches. -esboza una pequeña sonrisa.
Se levanta del banco y comienza a caminar. Observo cómo se va alejando poco a poco. Se me va la sonrisa de la cara, porque ya se fué.
![](https://img.wattpad.com/cover/130982275-288-k542682.jpg)
ESTÁS LEYENDO
El Chico Del Libro
RomanceEs una bonita tarde de otoño. Tal vez, un paseo por el parque venga bien. Tal vez me encuentre con él de nuevo. El chico del libro.