Eternal Love [BTS]

CAPITULO 1

Pov. Susan

¿Qué hora es?.. ¡¿Qué?! Ya son las seis.. ¡Oh no! no ..no no, tengo que preparar la comida, y no puedo llegar tarde a la misa, mi padre me mataría.

Me levante y fui directo a la cocina.

-Susan, ¿Aún no estás vestida? rápido, ve a cambiarte, tu padre despertara pronto - Mi madre se me acerco y me saco casi a empujones de la cocina. Camine apresuradamente hasta mi cuarto y en lo que me ponía el corpiño escuche un ruido que provenía desde la cocina, seguramente era mi padre.. se debe haber enojado porque aún no estaba listo el desayuno. Sentí algo de culpa al saber que mi madre estaba siendo castigada en mi lugar, así que me vestí rápidamente y me dirigí a donde se encontraban.

-Bu.. buenos días padre - hice una reverencia y vi a mi mamá en el suelo toda golpeada.

-Hasta que por fin despiertas, ¡Qué esperas! ponte a cocinar, a este paso gracias a lo inútil que son las dos moriré de hambre - Ojala eso fuera pasar.. que él muriera sería lo mejor que nos podría pasar a mi mamá y a mí.

Ya en la misa mi padre me presento a varios de sus amigos, muchos de ellos posibles candidatos a convertirse en mi futuro esposo. Ninguno me gustaba, eran todos hombres mayores, bien serios y algo repulsivos para mi gusto, cuando los miraba sentía lo mismo que cuando veo a mi padre, asco. En fin, no es como si yo pudiera elegir, sea quien sea el esposo que mi padre elija para mi tendré que aguantarme, no quiero que mi mamá siga pagando por mi culpa, y es que.. irme con cualquiera de ellos es mucho mejor que permanecer en esa casa, lo único que me incomodaba era tener que dejarla sola.

-Susan ven aquí - me llamo mi padre, él se encontraba con uno de sus amigos y alguien que al parecer era su hijo.

-Sí, padre.. Buenos días - me incline para saludar a los dos señores.

-Hija, él es el señor Choi y su hijo Choi Minho, nos acaban de invitar a una reunión hoy en su casa - ¿Una reunión?... sabía que eso solo significaba una cosa, y es compromiso de matrimonio.

-Un gusto.. espero que puedan asistir- el menor de ellos agarro mi mano y deposito un sutil beso en ella.

-Por supuesto que iremos - dijo mi padre.

-Genial, los estaremos esperando - me sonrió y se fue junto con el otro señor, su sonrisa era diferente a la de los otros.. era, como decirlo.. algo cálida.

Cuando llegamos a la casa mi madre ya tenía todo listo, al parecer se había tratado sus heridas, de inmediato nos sentamos en la mesa para que nos sirviera la comida, yo me ofrecí a ayudarla pero mi padre me lo impidió. Durante la comida nadie hablo, ni se menciono lo ocurrido esta mañana, aunque lo que paso era algo común.. no es como si esta fuera la primera vez que pasaba algo similar, él acostumbra a golpearnos por cada pequeño error que cometemos, sin embargo, últimamente solo se desquita con mi mamá, aún si fui yo la que se equivoco, si soy yo a quien se le olvida comprar algo, si soy yo quien va al pueblo y me atraso en llegar a casa por unos pocos minutos.. ella es quien lo paga. Y es solo por el hecho de que me está buscando prometido, él quiere mantener mi cuerpo sano y sin cicatrices para entregarme a un hombre cuya familia le dé un buen monto de dinero, después de todo eso es lo único que le importa, el dinero.

Con el vestido elegante que mi padre me compro para cuando se presentara una ocasión como esta, fuimos a la casa de los Choi. Su casa quedaba a un costado del pueblo, cuando llegamos era enorme, con un gran jardín lleno de flores y una entrada muy bonita, nuestra casa en comparación a esta parecía una choza. Pasamos al comedor, que por cierto, era enooorme, y nos sentamos en la mesa. Al principio estábamos todos, la señora y el señor Choi me hicieron muchas preguntas acerca de mis gustos y mis pasatiempos, que suerte que asistí a todas esas clases de cocina y tejidos, así si me pone a prueba no lo arruinare esta vez.

Luego de la cena nos dejaron solo a Minho y a mí, él me ofreció a salir a caminar por el pueblo y yo por supuesto que acepte, no es que pueda negar, después de la advertencia de mi padre si estropeo el compromiso con esta familia no quiero pensar en lo que ese monstruo le hará a mi mamá.

-No estés nerviosa, yo no soy como tu padre - dijo Minho mientras caminábamos por el pueblo.

- ¿Q-qué..?-

-Se nota que estás aquí por obligación y no por gusto- es que acaso este tipo me leyó la mente..

-Eh.. yo..- no sabía que responderle.

-Descuida, a mi también me han obligado - simplemente no sabía que responderle, no es que este feliz de casarme con él, pero la idea tampoco me desagradaba. Cualquier cosa era mejor que permanecer con mi padre.

-Ven, ahí un cabaré por aquí cerca-

-¿Un cabaré?.. yo no puedo asistir a esos lugares - Definitivamente no, si mi padre se entera que entre a uno, me mataría.

-¿Qué tiene de malo si vas con tu prometido? - ¿Mi prometido?.. cierto, ahora él es mi prometido, y ahora que lo pienso está bastante lindo.

Entramos al cabaré y estaba lleno de jóvenes ricachones, un par de personas se nos acercaron y las reconocí de inmediato porque eran hijos de las familias fundadoras del pueblo. Minho me presento y yo solo sonreía, me sentía fuera de lugar... sabía que las otras personas estaban hablando de nosotros, deben pensar en cómo una muchacha como yo esta con alguien como él. No es que me importe, no pretendo hacerme amiga de ninguno de ellos.

Llevábamos casi una hora en el lugar y salí a tomar aire, camine un poco hasta la plaza central y me senté en una de las bancas, estaba tan cansada que de pronto mis ojos comenzaron a cerrarse.

-No deberías estar a estas horas en las calles - de pronto una voz me despertó..

-Ah, qué.. qué paso, por qué estoy aquí -

-Si tú no sabes menos lo sabré yo- dijo con un tono burlesco aquel chico, parecía de mi misma edad o quizás solo uno o dos años mayor. Minho era mucho mayor que él, unos cinco o tal vez seis años más que yo si no me equivoco.. Minho.

-¡Minho! - no puede ser, debe estar esperándome... cuánto tiempo me habré quedado dormida.

-¿Minho?..no, yo no me llamo Minho, me llamo Jeon Jungkook - ¿Jeon Jungkook?, ni si quiera le pregunte su nombre, nunca había oído de él.. debe estar de visita.

-Disculpa, tengo que irme - me pare de la banca y corrí lo más rápido que pude hasta el cabaré, claro que con estos zapatos y este vestido me era difícil. Cuando llegue el lugar ya estaba cerrado y no se veía a nadie en los alrededores, en ese momento no sabía qué hacer.. definitivamente volver a casa era lo último que haría, no puedo volver sola, qué le diré a mi padre, que se me dio por dormir a la intemperie y deje solo a mi prometido en el cabaré. Ni si quiera conozco esta parte del pueblo, cómo diablos volvería..

-Te ves preocupada, si quieres puedo ayudarte - era ese chico otra vez, ¿no se había ido? no creo que quiera secuestrarme, después de todo por mí no le darán ni siquiera dos centavos.

-¿Eres de por aquí? - puede que él me ayude, pero si solo está de visita no sabrá como llegar a donde vivo.

-Claro, yo pase toda mi infancia viviendo en este pueblo - que raro.. y yo nunca lo había visto, al parecer el pueblo es más grande de lo que creí.

-De casualidad.. ¿Me podrías ayudar?, necesito llegar a mi casa que queda fuera del pueblo pero no se cual es el camino, vivo por la ruta oeste -

-Ayudar a las chicas lindas es mi especialidad - genial, este chico resulto ser un coqueto.

Durante el camino Jeon no dijo ni una palabra, yo simplemente lo seguí desconfiada, no estaba segura si confiar en esa persona, no sé donde me está llevando.. hasta que finalmente reconocí una de las tiendas a las que suelo frecuentar.

-Desde aquí puedo seguir sola, muchas gracias - me incline para despedirme e irme.

-¡Hey! - me detuvo del brazo.. lo sabía, este pervertido quiere secuestrarme - no me has dicho tu nombre - ah.. mi nombre, solo era para saber mi nombre.

-Susan, me llamo Han Susan -

-Así que Han Susan, muy bien Susan, cuídate.. en este pueblo suelen ocurrir cosas extrañas- fue algo raro lo que me dijo, pero no preste mucha atención y simplemente me fui, estaba un poco preocupada en lo que le diría a mi padre al llegar, no me importa lo que me pase a mí, sin embargo, no quiero que de desquite con mi madre.