--Hija......Genna... por Dios!... ¿te sientes bien? -cuestiona su madre muy preocupada mientras que la joven abre los ojos.
--Brujita... contesta, por favor -Raúl estaba tan angustiado, le revisaba los ojos y el pulso, parecía que todo iba bien ahora. Pero durante 1 minuto la chica estuvo inconsciente, fue el tiempo suficiente para que ella retrocediera en el tiempo dentro de su sueño.
Genna trata de incorporarse pero no la dejan. Su padre aún tenía en sus manos el celular marcando a emergencias pero curiosamente no hubo señal en el tiempo que la chica estuvo soñando.
--Es preferible que sigas recostada, mi brujita -le sugiere su hermano dándole un beso en una mejilla.
--¿Qué pasó? ¿Quién era esa mujer? ¿Dónde está? -la chica se notaba desorientada, miraba hacia las escaleras donde no había nadie.
Vicky estaba parada con los brazos cruzados.
--No será que estás embarazada, amiga? -pregunta muy tranquilamente- eso suele suceder... todo te da vueltas y luego zas... al suelo... todo se pone negro.
Los cuatro la miraban escuchándola atentamente.
--¿Quién eres? -pregunta Martín.
--Yo soy Vicky... -al ver que los padres de Genna no la recordaban, agregó- soy la vecina... la que jugaba con Eugenia cuando venían acá cada año a ver a doña... -la chica se detuvo porque pensó que ellos tal vez se sentirían mal si pronunciaba el nombre de la abuela de Genna.
--Ah, sí... pero estás muy cambiada, niña -dice Mónica- ... mm... pero... dime... por que dices que mi hija podría estar embarazada?
--Ay no... yo solo lo sugiero porque ella se puso tan pálida como una cera y luego se desmayó...-dice acercándose a su amiga que seguía recostada en el sofá y le pregunta al oído- ¿estás embarazada?
--Noooooooo... claro que noooo -Genna se levanta rápidamente del sofá y camina hacia las escaleras, justo donde estaba la mujer del vestido rojo.
Luego comienza a mirar la casa, el lugar donde estaba colocada la cama con la mujer dando a luz... por su mente pasaron las escenas rápidamente hasta que llegó el momento en que vio brillar dos luces rojas... Eran los ojos de ese monstruo que nació en su pesadilla... Genna comenzó a aterrarse... miraba un punto fijo sin poder hablar, esa mirada infernal se clavó en en las pupilas de la joven dejándola muda.
Martín se acercó a su hija seguido de su esposa e hijo.
-¿Qué está pasando, Genna? Nos estás asustando mucho -le dice su padre pero ella sigue con la mirada perdida en la nada.
-Será mejor que la llevemos a urgencias -sugiere Raúl quien se da vuelta y busca con la mirada a Vicky para preguntarle- ¿dónde queda el hospital más cercano?
--Pues... Yo no sé... Solo conozco el Christus Muguerza... -dice ella encogiendo los hombros.
--Es verdad, pero no está tan cerca de aquí -responde Martín.
--Es lo que yo conozco -agrega la chica de negro.
--Pues a donde sea, pero vamos rápido, miren, a mi hermana se ponen los ojos... ¿violetas? -dice Raúl muy preocupado y asombrado.
Entre Martín y Raúl cargan a Genna en brazos y la llevan hasta la camioneta. Vicky los acompañó para decirles por dónde ir más rápido, pero en ese momento...
--¿A dónde vamos? -pregunta la chica Genna
--Hija... vamos a llevarte al hospital -le contesta su madre.
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Vi Nacer El Mal
TerrorEsta es la historia de Eugenia, una jovencita de 17 años que se enfrentó a la más terrible experiencia de su vida cuando el espíritu de su bisabuela se apoderó de su cuerpo para tratar de acabar con el sufrimiento que por muchos años padeció, primer...