NICOLAS

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Hoy es como un día normal y corriente, me dirigo al instituto con mi hermano bueno, hermano, es adoptado el muy mal nacido que siempre se mete conmigo, tiene 12 años como yo y según mi madre soy muy amable, positivo y estudioso, eso es lo que le hago creer a mi madre.
—Bueno, adiós idiota— Me dijo mi hermano (se llama Rodrigo) adoptado de una forma burgar—
—Vete al infierno— Pensé mientras lo dejaba atrás para ir a mi clase—
Al llegar mi amiga Natalia ya había llegado, ella era la única amiga que tenía en la clase, me preguntó si hoy podía quedar ya que era viernes pero lo dije que no podía ya que habíamos quedado con mis tíos y mis abuelos en la casa de mi tia.
Estuvimos charlando hasta que llegó la hora de las clases y nos sentamos cuando llegó el profesor, las 3 horas se pasaron muy lentas y como siempre aborridas hasta que llegó la hora del recreo cogi mi merienda y me fui al recreo donde me estaban esperando mis otros amigos de curso superiores, al bajar las escaleras llenas de gente vi de lejos a mis amigos, al instantes me fui corriendo y feliz al verlos pero, un pie me hizo caer y estropear mi merienda y... como siempre fueron mi hermano y sus amigos riéndose de mi, ellos se fueron sin pedir perdón e inmediatamente fueron mis amigos a ayudarme, la vergüenza que pase delante de todos los alumnos del instituto fue enorme así que jure vengarme.
—¿¡Estás bien!?— Me preguntó unas de mi amigas (Maria)—
—Si, gracias— Le dije tranquilo—
—¿¡No piensas chivarte!?—
—No hace falta, de verdad—
El recreo me lo pase con mis amigos, al terminar el recreo me fui de nuevo a mi clase así el resto de las clases.
De vuelta a casa me fui acompañado junto con María y su hermano, mi hermano iva más adelante con uno de sus amigos, al llegar a casa me senté a comer con mi madre y mi hermano (nuestro padre falleció en un accidente de tráfico).
—¿Como fue el día?— Preguntó mi madre.
—Muy bien mama, a sido un día muy divertido— Le dije sonriendo y muy ilusionado aunque como siempre ocultaba mi verdadero ser—
Mi hermano me miraba de reojo extrañado.
MADRE: —¿Y a ti Rodrigo?—
—Buen, como siempre—
Llego las 17:00 y nuestra madre y nosotros nos fuimos a casa de mi tia, al llegar estaba mis abuelos pero no estaba ni mi primo que tiene 7 años llamado Mario y otro de 3 años llamado carlos ni mi hermana mayor que nos iba a presentar a su novio de 18 años igual que ella. Mi tia me pidió que fuera a recoger a mi primo Mario que ya mismo salía de la clase de ingles que tenía en su colegio, yo en verdad no quería porque aunque el me quería mucho yo a él no tanto y aunque cuando éramos pequeños estábamos muy unidos alcabo del tiempo lo fui perdiendo ya que el siempre quería jugar y yo no y también porque cuando nació el mi tia perdió un poco de interés por mi porque tuvo que cuidar más a su hijo por eso algunas veces pensaba deshacerme de él, al final le dije que si ya que me cae muy bien mi tia y me ayuda cuando tengo problemas, me despedí de todos con una sonrisa pero cuando me fui cambie mi cara por una serie como casi siempre la tenía.
Al llegar a la clase de mi primo que estaba en la tercera planta él vino corriendo a abrazarle y yo le contesté con una sonrisa y un abrazo pero pensaba que quería que no me abrazara NUNCA MÁS, nos despedimos de la profesora y cuando íbamos a bajar las escaleras Angel un chico de 13 años de ese mismo colegio como siempre me metía mano y yo ya estaba arto de el por eso pensaba en deshacerme de él y, pensé con una sonrisa una idea para matar a dos pájaros de Irún tiro, empuje a mi primo por la escaleras bruscamente callendo inconsciente y sangrándole la cabeza mientras Angel me miraba asustado y después me tire yo pero con más cuido haciéndome algunas herida solo.
—¡¡¡AYUDA AYUDA POR FAVOR ME DUELE ME DUELE MUCHO!!— Gritaba para llamar la atención a alguien y echarle la culpa a Angel ya que ya tenía partes por agredir a otros alumnos aunque ahora no había sido el pero, a quien iva a creer ¿a un chico con varios partes por agredir a varía gente o a un chico encantador y amable? que ese era yo era el plan perfecto para joderle.
Inmediatamente llamaron a nuestra familia para que fuera a Cruz Roja donde mi primo y yo estábamos ingresandos, ellos muy asustado fueron inmediatamente.

FIN DEL CAPÍTULO.

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