Nada Nuevo Bajo El Sol

1. Mad Sounds

    Creo que es difícil encontrar amigos, ¿por qué nadie comparte mis gustos?

    Soy una chica de 17 años, mido 1,65, tengo el cabello largo y liso, tez clara como la nieve, me gustan los cómics, series, la buena música, la gente que razona, me encantan las conversaciones largas, no soy alguien difícil, no soy alguien de otro planeta.

    La gente hoy en día es tan superficial, tan básica, primitiva.

    Me encuentro sola acostada debajo de un árbol, con los audifonos fuertes, enredada en mi cabello color azul, jeans rotos, unas converse negras y una camiseta de Game Of Thrones.

Sonidos locos en tus oidos
Te hacen sentir bien
Te traen denuevo a la vida.

Sonidos locos en tus oidos
Te hacen levantarte y bailar
Te hacen levantarte.

    A veces me gusta estar así, me gusta disfrutar de una canción con tranquilidad, me gusta la naturaleza.

    Siento como alguien se sienta a mis pies, percibo su aroma, ella gatea hasta mi lado y al abrir los ojos, la veo, entre mi cabello que no me da un vista completa, me sonrie, se agacha y me besa.

El amor cede con la presión
De aquellas noches salvajes
Corre pero no puedes esconderte.

    Kim, la chica tiene 18 años, mide 1,50, muy delgada, tez clara, cabello corto con ondas, ojos hermosos, a diferencia de mi ella usaba una remera de System Of A Down y unos pantalones cortos.

    La afirmo de la nuca y respondo el beso, cuanto me gusta esta mujer.

-¿Cuanto tiempo me has esperado?- me mira con ternura.
- No mucho -mentí, había estado más de 2 horas, pero ella vale la pena- ansiaba verte
- ¿Vendrás a la despedida de curso?- sus ojos brillaban esperando mi respuesta
- ¿Como puedo decirte que no?- nos levantamos y caminamos hasta su casa, no sé qué haría sin esta mujer.

    Recuerdo cuando en los pasillos de nuestra escuela ella caminaba con sus amigas, sonriendo, tan hermosa, fresca e inocente, tan peligrosamente inocente.

    Siempre que nos encontrábamos me saludaba y yo le sonreía, un día, no le sonreí, no me sentía bien, me sentía débil, mi novio había cortado conmigo, mis únicas amigas me habían abandonado, mi perro había muerto, no tenía ganas de nada y ella lo notó, nunca habíamos tenido una conversación, solo nos saludábamos aún así se preocupó, me tomó de la mano y me arrastró hasta un árbol, cuando tomó de mi mano me sentí con calma.

-¿Te encuentras bien?- con ojos de tristeza me observaba.
- Sí, no me pasa nada, he tenido un día agotador - bajé la mirada.
-Pues ven y descansa aquí- me abrazó- soy Kim.
- Yo Sadie- respondí.

    Llegamos hasta su casa, fuimos a su habitación, como es de costumbre, me estiré en su cama y ella se sentó encima mío, se acercó a mi oído y me susurró:

-Me ayudaras a elegir la ropa de esta noche- y me mordió la oreja.