AGE OF YOUTH (AU) ~Yoonseok (TERMINADA)

Capítulo 8

Yoongi lo llevó en su motocicleta, luego de todo lo que ocurrió.

Hoseok se mantuvo en silencio, pareciendo un niño dócil cuando Yoongi se acercó a ponerle el casco, abrochándolo bajo su mentón, sentándose finalmente, detrás de él.

Lo abrazó firmemente todo el camino, con su rostro apoyado entre sus hombros, ignorando cualquier barrera que pudieron haber formado antes, mientras la noche caía a su alrededor. Y agradecía que la velocidad y el viento en el trayecto estuvieran presentes, ya que su corazón latía deprisa debido al contacto.

Aún así, se sentía tranquilo, pero queriendo descansar pronto contra su cama y dormir hasta que no existiera nada más.

Todo se había ido al suelo, ya no había nada que pudiera separarlo del resto y estaba expuesto ante Yoongi.

Y eso no le molestaba en absoluto.

Cuando llegaron al departamento, le entregó el casco, su mirada pegada en el suelo, sintiendo su rostro caliente, un tanto afiebrado por haber llorado tanto y el viaje juntos. Yoongi se bajó de su motocicleta, quedando frente a él.

-Gracias, hyung.- susurró frotando uno de sus ojos, alzando la mirada para regalarle una sonrisa sincera -y algo cansada-.- Fuiste muy atento conmigo hoy, no podré pagártelo.

La mirada de Yoongi permanece neutral, y observa las manos de Hoseok, fijándose en como sus dedos juguetean nerviosos entre ellos. El menor siente que hay algo que quiere decirle. Como si las palabras estuvieran en su boca, pero se reformularan una y otra vez innecesariamente.

-Sobre Sung Wook...- comienza Hoseok, pero Yoongi lo detiene, tomando sus manos para que dejaran de frotarse entre ellas.

-¿No te dije que hablaríamos después de eso?.- preguntó en un tono cariñoso, como si regañara a un niño, y estaba empezando a sentirse como tal. Frágil y temeroso ante los demás.

Y el punto era, que sus intenciones con Min Yoongi querían ir en serio, pero el ambiente en que estaban ambos parados no era el más favorable.

-¿Por qué eres tan bueno conmigo?.- susurró el chico para sí mismo, llegando su pregunta a los oídos de Yoongi. Soltó sus manos y dio un paso hacia su departamento.- No merezco tantos beneficios, hyung.- murmuró y sonrió nuevamente, mirando el suelo, dando una pequeña reverencia.- Buenas noches, gracias por traerme a casa.

No alcanzan a ser más de cinco pasos los que da hacia el edificio, en que siente nuevamente la calidez de Min Yoongi cerca. Sus brazos rodeándolo por la cintura, deteniéndolo.

-Hobi...- comenzó en silencio, y Hoseok sintió su respiración trastabillar al oírlo llamarle así.- Yo... Yo realmente quiero cuidar de ti.

Hoseok soltó el aire contenido, alzando sus manos para colocarlas sobre las de Yoongi, sonriendo al ver el contraste de su piel con la de él, causándole ternura.

-Yo también, hyung.- responde repartiendo caricias con sus dedos.- Pero...-

-Renuncia.- rogó.

Frunció el ceño y se apartó para volver a darle la cara, y puede ver la preocupación en su rostro otra vez, tan palpable y se siente culpable de ello.

-Hyung...

-Puedes trabajar perfectamente en otro lugar.- argumentó rápidamente.- Sabes desenvolverte y tienes experiencia en varios empleos. Sólo aléjate de él y de su trato inhumano.- insistió.