Capítulo 50 /Especial/

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Amigos!!  Ya el capítulo 50! No lo creo ajajakks bueno ya xd les traigo este capítulo sorpresa, y ya casi llegamos a las 1,000 vistas kskskakaksnsnnsbfvdvr no lo puedo creer no sería nada sin ustedes, los amo muchísimo <3 si quieren que les dedique capítulos solo avísenme:-) adiós amores.

Así que primos eh... Dije toda confundida, -Como le hizo para tan buenos... genes- dije estallando en risas.
El chico me agarró de la mano y me sentó arriba de él.

-mm.. que podemos darte, estás tan, ebria.- dijo y el me tomo del mentón, apunto de besarme, pero metí mis dedos, no podía dejar que me besara, yo tenía novio, y ni en estado de ebriedad dejaría que yo volviese a serle infiel, no otra vez.

-Escucha, no.- dije y me quite de sus piernas, fui al baño un fuerte punzón sentí desde mi estómago hasta mí boca, estaba vomitando y era asqueroso.

El me vió, fue cuando pare de vomitar lo cual me alivia de cierto modo.

Después de todo, regresé a la fiesta sin ganas de nada, solo de que terminara, no podia soportar un día más así, no tenía nadie idea de lo que sentía, de lo que era capaz de hacerme a mi misma si estuviera sola.

Cuando el tiempo pasaba más lento, podía ver más cosas, más detalles, más instertidumbre pasando por las venas de todos los presentes, mi mente probablemente era la más negra, más tachada de toda la fiesta...

Con tan solo pequeñas palabras alguien me podía dar a entender algo grande, algo significativo.

Aveces la vida me daba pequeños signos de violencia los cuales ignoraba por completo.

Todos estaban ebrios, eso era, todos contándome a mi, estaban ebrios, yo estaba parada en un punto de la casa viendo a todos, consciente e inconsciente.

Nicholas estaba en la alberca creo que el No estaba ebrio, digo creo por que no se en que humor este ahora mismo. Me acerque a ver un poco más de el adentro de la piscina.

-Buenos fiesta Nicholas, gracias.

-Veo que realmente lo disfrutaste.- dijo el frio, como si hubiera hecho algo mal.

-No hice nada malo, por que respondes así.- dije resignada.

-Veo que mis amigos realmente son atractivos para ti, como todos los demás maldita zorra.

-No me hables así.- dije saliendo de la piscina, no se por que me hablaba así.

-Estas ebrio, tienes que salir de aquí.- dije y el negó con la cabeza.

-No estoy ebrio estupida, estoy cansado de que tu estupido cerebro no te de, a cada rato me eres infiel, no te basta Elisa?

-No te fui infiel, déjame explicarte Nicholas no fue como lo viste..- dije y el se salió de la piscina, se acercó a mí lentamente, tomo mi mentón y lo llevo a su boca, sus labios rozaban los míos con desesperación, ya no sabía que pensar, creo que era una trampa, no se, y no quería pensar estando con el.

Me cargo me puse arriba de él y subió las escaleras bruscamente, al llegar al cuarto me tiró, dejo mi cuerpo en las sábanas que ahora estaban empapadas.

-Te odio tanto, Elisa.- dijo el y quito su blusa.

-Te odio profundamente Elisa.- dijo el y se puso sobre mí.

-Tanto, que me llegas a querer.- dije yo sin sentido alguno.

-Tanto que llegué a amarte.- dijo el y quito mi blusa, sus cabellos mojados mojaban mi pecho, yo estaba en estado de ebriedad, ya me había dado cuenta, no era fácil.

El tomo mis manos, ya descubierto y yo totalmente lista, empezó a entrar en mi, rápidamente sin aviso alguno.

Hora de Morir (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora