Lunes 13 de Junio, había una gran celebración en el palacio, pues como no, era el cumpleaños de Harry, ¿O debería decir Príncipe Harry? ó aún mejor, mi novio. Como sea, tenía que lucir como si de verdad fuera parte de la familia real, ya saben, un elegante vestido, un peinado adorable, un bolso chanel y louboutines.
"Eleanor, la limosina la está esperando" Dijo Frida, la muchacha.
"Estoy casi lista, dile al chofer que ya voy" Le dije mientras tomaba un labial rojo, era sin duda mi color preferido si de labiales se trata.
"No tarde, ya sabe como se pone su madre si se entera que salió tarde"
"Una reina nunca llega tarde, todos los demás simplemente llegaron temprano" Le dije con una ligera risa mientras bajaba las escalera
"Déjame recordarte que aún no eres reina" Mi hermano apareció por la puerta de la cocina, el era un chico alto de 21 años, tenía ojos azules y intimo amigo de mi amado novio, por supuesto que estoy siendo sarcástica.
"Pero es el más grande deseo de mi madre para mi, que algún día sea su reina" Le recordé imitando la voz de mamá, mi hermano rió.
"Paul se está impacientando, ¿vienes ya o vas caminando? Te recuerdo que el palacio no está muy cerca." Dijo volteando al antiguo reloj que colgaba en la pared.
"¿Paul o tú?" Salí por la puerta principal dejando a mi hermano atrás.
"Los dos" Dijo el rubio al alcanzarme.
Paul, el chofer, abrió la puerta y ambos entramos, íbamos rumbo al palacio.
"Eleanor," Me llamó, voltee enseguida "yo se que quizá esto no es lo que más desees, Harry es mi amigo, pero tu eres mi hermana, aún estas a tiempo de negarte a casarte con este chico." Sus palabras eran todo lo que quería escuchar, pero que vinieran de el no me haría cambiar de opinión, yo no podía defraudar a mis padres, a mi familia.
"¿Cuantas veces quieres que te repita que esto no es de tu incumbencia Aaron?" Suspiré profundamente "Yo tomé esta decisión por mi misma, ahora deja de meterme ideas a la cabeza, no lo necesito, gracias"
"Está bien, olvidalo" Dijo el chico y bajó del auto.
"Eso haré" susurré.
Entramos al palacio, uno de los empleados nos dirigió hasta el jardín principal, aquel lugar parecía estar sacado de algún libro, quizá era por que se trataba de un castillo, el lugar donde vivía la realeza, pensar que en un futuro no muy lejano ese sería mi hogar me hacía temblar, ¿que iba a hacer yo con tanto espacio?. Finalmente llegamos al jardín, Harry estaba hablando con uno de los invitados, el cual volteó a verme y le mencionó algo al chico de ojos verdes, el inmediatamente camino hacía mi y colocó su brazo alrededor de mi cintura, me miró directamente a los ojos y yo le sonreí como si de verdad estuviera muy enamorada.
"Te presento a Zayn, es hijo de los condes de España." Dijo Harry introduciendo al chico.
"Es una lastima que tus padres no hayan podido estar presentes," le dije mientras estrechaba su mano.
El chico asintió "Seguramente estarán pronto por aquí, en alguna otra ocasión." Sonrió.
"Ojalá, sería un gusto conocerlos" Le dije lo más convencida posible, había llegando a un punto en el que yo misma creía mis mentiras.
"Bueno, si no les importa," saqué mi celular "Aaron, mi hermano, necesita que le entregue algo que dejó en mi bolso."
"Adelante" Zayn asintió.
Sonreí y me dediqué a esconderme por un momento, hasta que me di cuenta de que no podía permanecer sentada tras los arboles todo el día, estaba dispuesta a salir rumbo a la fiesta nuevamente cuando una voz me detuvo.
"¿Que haces aquí?" Era Harry.
Negué "¿Te parece que estoy haciendo algo?
"No"
"¿Por qué preguntas entonces?"
"No puedes huir así Eleanor" Me dijo negando.
"Perdón" Me giré para volver al jardín esperando que el chico me siguiera, pero para mi sorpresa me tomó de la mano he hizo que volviera.
"¿Crees que yo si me la estoy pasando de lo mejor ahí afuera?" Me dijo sentándose recargado en uno de los enormes árboles de aquel lugar.
Me encogí de hombros "No lo se, supongo."
"Entonces te sorprenderá saber que no" yo seguí de pie, el chico me invitó s sentarme.
"¿Planeas quedarte aquí el resto de la noche?" Le pregunté para acabar con el silencio.
"Si eso me salva de seguir saludando," se encogió de hombros "podría ser una buena idea"
Reí ligeramente "No puedes huir así" le imité.
"Que graciosa" Dijo el chico.
"Eso dicen" le respondí, por primera vez sentí que podía ser yo misma.
"No eres tan molesta como yo pensaba" confesó burlonamente.
"No se que te cuenta Aaron pero deberías estar seguro que es mentira" Reí.
"No, el no te menciona" Dijo el chico.
Negué divertida "Eres pésimo Harry"
"Eso dicen" Dijo repitiendo mis palabras.
Después de eso lo único que se podía escuchar era el ruido del viento entre las hojas de los árboles, nadie dijo absolutamente nada hasta que todos se habían marchado, me despedí y salí en busca de Aaron para marcharme de aquel lugar, el no estaba, salí por mi cuenta a la calle, caminé algunas cuadras en busca de un taxi, para mi lo ocurrido no había sido nada, lo dije una vez y lo volvería a repetir otras cien, yo jamás podría amar a alguien si estoy siendo obligada a hacerlo.
