El AJETREO DEL DESTINO

Capítulo 3

2 meses después.

Es sorprendente como han estado cambiando las cosas y estoy segura que cambiaran más.
Empieza a sonar el despertador y con todo la pereza del mundo me levantó y cojo una tualla para dirigirme directo al cuarto de baño, después de estar lista salgo de mi cuarto y me dirijo a la cocina, allí esta mi madre emocionada por mi primer día en la facultad, ¡sí, así es! Ingrese a la Universidad Columbia, estaba muy feliz, desde que nos mudamos solo cosas buenas al ocurrido

Flashback

-Mama, apurate.-digo por undécima ves.

-Ya voy, es que...qu...-no termina de hablar cuando suelta en llanto, empezó a sollozar muy duro.

Desde ayer ha estado llorando, dice que va a extrañar esta casa, mis hermanos han pasado llamándola a cada rato para que se sienta bien, me siento mal, por mi culpa nos vamos a mudar a New York, ya que dentro de un mes inicia el ciclo lectivo en mi nueva universidad, ¡sí, lo logré!, por ese motivo nos mudamos ya que me va quedar cerca la facultad y ya que mis hermanos viven allí quieren estar mas cerca de mamá, por esa razón usan la escusa de "mamá, tienes que mudarte para que a Mónica le quede cerca la facultad", sí, me usaron como rehén para convencer a mamá.

-Mamá, no te pongas así, si quiere, yo puedo pedir una habitación el la facultad o pospongo la U e ingreso el año...

-No, no, no, no, no y no, ni se te ocurra, ya estoy bien, es solo que estaba pensando el los momentos que viví con tú padre y...- vuelve a sollozar y suelta un suspiro lleno de ilusión para continuar diciendo.- los planes que teníamos, las promesas que queríamos cumplir, pero todo se arruino es tardé.- dice viendo el suelo, casi nunca hablamos de mi padre y a mi me dolía, porque no sabía casi nada de el y en ese momento me propuse que luego hablaría con mama acerca de lo que pasó ese día 13 de septiembre, pero por ahora lo dejaría pasar.

Mamá volvió a suspirar y dijo. -Vamos ya tuve suficiente despedida con esta casa, vamos a iniciar una nueva vida al lado de mis otro bebés.- dice mama riendo se comentario y yo la abracé diciendo.

-Jum, mamá eso "bebés" como le llamas tienen todo menos espíritu de bebés- suelto riendo, mamá me ve reprobatoria por lo que dije y también ríe, ella decir que "ustedes siempre serán mis bebés, no importa si tiene cien años" mi madre es un caso.

-Hija, ustedes siempre serán mis bebés, no importa si tienen cien años, eso nunca lo va a cambiar nadie.-dice alzando la mandíbula con orgullo, ves se los dije con mama siempre es lo mismo, aunque mu has veces se enoja con nosotros por tonterías ella dice lo mismo.-bueno vamos que llegaremos tarde a nuestra nueva casa, mira que el viaje va ser muy cansado.-culmina saliendo de la casa abrazada de mi.

Fin de flashback.

Saludo a mi madre que esta sirviendo el desayuno para mi, me dispongo a desayunar, luego de terminar le doy un beso y la abrazo para irme, no sin antes ella desearme suerte en mi primer día y es así como salgo de casa, me subo a mi nuevo auto y avanzó por el camino recorreré durante todas las mañanas por 6 años y estaba 100% segura que estos 6 años van a estar llenos de muchas emociones. Iba llegando la facultad y me quede impresionada de lo enorme que era, estoy muy nervosa de perderme, me siento eufórica, no me creía que empezaría a estudiar en una de las mejores universidades y lo mejor de todo es que estudiaría algo que amo desde que tengo memoria y me apasiona, siempre mi sueno fue estudiar Medicatura Forense, me propuse calmarme y prepararme para todo lo que venga estos 6 años. Al entrar todo era un caos, chicos y chicas por todos lado, yendo de un lado a otro con muchos libros, papeles, al ingresar más todo se calmaba, al parecer todos hacen bulla en la entrada nada mas, menos mal porque estaba empezando a sofocar me por tanta gente.

Vi le horario y me dispuse a buscar mi salón, en el pasillo había un chico muy alto que se veía muy atractivo físicamente, ya que no podía ver su rostro porque llevaba muchos libros, como el chico venia hacía mi dirección me hice al un lado ya que al aparecer con tantos libros no podía ver y casi choca conmigo.

-¡OWH!, cuidado.-digo

-¡Oh! Lo siento no te vi.-dijo el chico de los libros.

-Oye, tú ¿tienes tiempo estudiando aquí?.-le preguntó.

-¡Oh sí!, este es mi ultimo año, ¿por qué?.

-¿Qué te parece si te ayudó con tus libros?, ya que eres un peligro para todos con esa mini biblioteca manual.-digo riendo de mi propia broma.

-Ja ja ja ja, no le encuentro el chiste, y ¿por qué arias eso?-me pregunta.

-Si yo te ayudo, tu me podrías decir donde esta mi clase, es la del edificio MDF2, es que soy nueva y no conozco, por favor.-digo juntando mis manos como suflica, aunque sabia que el no veía por tantos libros.

-Esta bien, chica nueva.

Cuando pone los libros en en suelo para darme la mitad, casi me desmayo, era súper guapo, casi que babeaba.

-Bueno, esto te toca llevar, tu solo sigueme, okey.-dice el guapo de libros, se que ya tenia otro apodo puesto por mi, pero no importa.

Lo sigo durante 15 minutos, y si los conté, al final llegamos a una aula muy grande e ingresamos a ella.

-Bueno, aquí es mi salón y muchas gracias, por cierto ¿cómo te llamas, chica de ayuda?-dice guiñandome.

-Mónica Hogan y ¿tú?.

-Michael Darrell, pero no me gusta que me digan Michael.-dice frunciendo el ceño.

*Entonces ¿por qué me dices el nombre completo* pienso.

-¡Oh! Esta bien Darrell y ¿me vas a llevar a mi salón?-pregunto con duda.

-¡Oh, por supuesto que sí!, un trató es un trató, aquí y donde sea Mon, ¿puedo llamarte así?-me pregunta.

-Sí, y vamos que no quiero llegar tarde mi primer día.

-Por supuesto y ¿estudias medicina?-dice Darrell miestras habré la puerta y me indica que salga con la mirada.

-Gracias y si, ¿cómo lo supiste?.

-Soy Brujo...-yo abro mis ojos asustada y pienso * con razón es tan guapo, seguro hizo brujería*, pero en eso se ríe y dice.- era broma Mon, me di cuenta por la iniciales de tu salón, y ¿qué rama de La Medicina?.

-¡oh, si es cierto!, y es Medicina Forense y tú ¿qué estudia?.

-¡Santo cielo! Mónica jamás pensé que fuera eso y yo estudio Derecho. Y este es tu salón. -dice señalando una puerta que tenía la iniciales indicadas.

Me carcajeó por su asombro y al darme cuenta de que ya había llegado me despedí.
-Bueno gracias Darrell y ¡mucho gusto, por cierto!.

-El gusto es mío, Licenciada Mónica.- dice besando mi mejilla y dando la vuelta, no sin antes decir,- Espero verte pronto.

-Igual.-digo sintiendo la mejilla caliente por es contacto y deseando verlo pronto, porque ese hombre era una obra de arte con piernas.

Y con esos pensamiento ingreso a mi salón, todavía no este lleno, ni a llegado el profesor, así que me acomodó y esperó que comience lo que tanto he esperado.