Buscando a Anthony Marcs

Cap3. Alerta: Peligro ll

Ya solo faltaba una clase para salir, me tocaba literatura y cuando entre al salon, alguien me tapo los ojos con sus manos,-Melissa, como has estado, cariño?- esa voz la reconocería donde fuera, era Andrew, lo conocí el año pasado en un campamento que hizo la escuela, pasamos toda la semana juntos, se convirtió en un amigo muy cercano en tampoco tiempo. No lo había visto en todo el día, estaba tan concentrada en comer que me olvide de quien estaba al mi alrededor, -Hola Andrew, me extrañaste?- digo con tono seductor e hago mi mejor esfuerzo por no reirme,-Todo el tiempo Melissa- me da una sonrisa fugaz y me deja un asiento al lado suyo, Andrew es un chico realmente atractivo, tiene el cabello negro corto, ojos color azul como el río Támesis, tez blanca, cuerpo tonificado, bendito sea el futbol americano, que les deja el cuerpo como dios griego, llevaba unos vaqueros y una playera blanca que contorneaba los musculos de su espalda, su caracter era duro pero a la vez sencillo, tan alegre y arrogante a la vez.-Tomame una foto Melissa, te van a durar mas- dice y me guiña un ojo, -Calla Andrew, tu novia me mataría si hiciera tal cosa- habia rumores de que Andrew estaba saliendo con alguien, pero quiero saber si es verdad.-Melissa, sabes que no me gustan las relaciones, asi que estoy disponible todo el tiempo- se oye como una indirecta y se pasa los dedos por su cabello mientras pone atención a clases. Antes de preguntarle algo pasa Anthony y saluda a Andrew.- Andrew, listo para las semifinales?- dice Anthony mientras mira a Andrew y después a mi, me da una sonrisa de lado,-Claro que si Anthony, me estado preparando, pero que descortés soy, ella es mi amiga Mel Rollings, no la mires mucho, es mía-Bromea y pone su brazo a alrededor de mis hombros -Un gusto Mel, soy Anthony Marcs- me da un beso en la mejilla como saludo,dios, su aroma huele a perfume caro y sus mejillas son suaves y aterciopeladas, su aliento huele a menta. -El gusto es mío- le digo con una sonrisa coqueta, se ríe y se aleja de nosotros, dejando su sonrisa impregnada en mi mente.