Prólogo.

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Nota: Dragon Ball y sus personajes no me pertenecen, le pertenecen a Akira Toriyama.

Nota 2: ¡Hola! Gracias por leer, y perdón por alguna falta de ortografía o alguna falta de tildes o acentos.

El medio saiyajin se encontraba abrazándose a si mismo, mientras gruesas lágrimas caían de sus ojos.

Escondió su cabeza entre sus piernas, intentando usarlas como refugio de la realidad. La cruel y triste realidad.

Más de una vez se había sentido impotente e inútil por no hacer nada. Pero el sentimiento de ahora era mucho peor; Sentía que su corazón se oprimía y un nudo aparecía en su garganta.

En las otras veces, no se sentía como ahora, por el simple hecho de que antes no tenia el poder para ayudar a sus amigos y a su padre. Pero, ahora...

Se sentía como un completo inútil. Podía haber hecho algo. Podía haber acabado con Cell cuando se lo advirtieron.

—¡Podía haber hecho algo!— gritó abrazándose aun mas.

Tenia el poder. Tenia las habilidades... Y desperdicio todo.

Se sentía como un asesino. Y se sintió aun peor al saber que su madre esperaba otro bebé.

Dejo a su hermano sin padre, y no había forma de remediar lo que ya estaba hecho.

Culpa. Tristeza. Ira. Enojo. Rabia.

Esas y más emociones sentía el híbrido.

Pero no sabía que todas emociones se convertirían en su mayor problema.

Sentimientos negativos | Dragón BallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora