-Alguna vez dudaste –dijo aquella mujer al lado mio, me había recordado, sabia quien era yo, me había dejado probar esos dulces labios otra vez, ver de cerca esos hermosos ojos, poder abrazarla otra vez, era hermosa realmente hermosa-.
-Que si recuperarías la memoria?
-Si –dijo ella mirándome a los ojos-
-Si, una sola vez, ayer
-Ayer?
-Si, ayer. Cuando me fui de aquí ayer, en el camino me puse a pensar, y si el doctor West tenia razón y nunca la recuperarías, pero luego pensé que nada es imposible y esta mañana cuando vengo –me quede callado no sabia como explicarlo-
-Que paso?
-Note algo raro
-Raro?
-Si, raro. Tenias una mirada que no había visto antes, es como –me quede callado, pensando en como decirlo- cuando te vi por primera vez –ella me miro sin entender- si tenias esa mirada de cuando me viste por primera vez
-Esa mirada querido esposo mio –dijo con una sonrisa- es cuando vez a la personas que vas amar por el resto de tu vida, esa mirada es cuando sabes que es el indicado
-Soy el indicado? –dije mirándola a los ojos con una sonrisa-
-La pregunta sobra, siempre lo fuiste y siempre lo serás
-Me alegra que mi Lizzy haya vuelto
-No te podría dejar solo, recuerdas juntos por siempre, en las buenas y en las malas
-Eso no lo dudes mi Lizzy, te puedo hacer una pregunta
-Dime –dijo ella acercándose mas a mi-
-Cuando te diste cuenta que era yo?
-Ayer –dijo con una sonrisa-
-Y me tenias mal desde ayer, por Dios mujer debiste habérmelo dicho –dije y ella soltó una pequeña risita, como era de hermoso ese sonido-
-Queria estar segura amor
-Como asi?
-Ayer cuando estabas casi terminado, se me vino una imagen a la mente de ti
-De mi?
-Si de ti, jóvenes digo yo unos veinte tantos, pero no estaba segura la imagen era borrosa. Hoy cuando llegaste y me saludaste tenias esa misma sonrisa del recuerdo que tuve, esa hermosa sonrisa –dijo ella y me robo un pequeño beso el cual yo correspondí-
-Por eso me hiciste la pregunta de mi esposa
-Exacto, cuando me contestaste enseguida recordé todo
-Sabia que ese medico estaba equivocado
-Nunca me podría olvidar de ti amor –dijo con una tierna sonrisa-
-Te amo –dije desde lo mas profundo de mi corazón a la mujer de mi vida-
-Yo también te amo.
FIN
