Ese día en la noche, Colín estaba cenando mientras pensaba en toda la tarea que haria en su habitación.
Dudaba mucho que la chica apareciera de nuevo durante un tiempo. La vergüenza mata y ella estaba tan roja que pensó que explotaria.Se veía tan tierna que deseó estar con ella en su cuarto bailando.
Al terminar su cena el chico subió resignado a su habitación con un plato de galletas para comer mientras hacia su tarea. No era muy comelon, pero las galletas de chocolate siempre habían estado ahí para él durante las tareas. Lo ayudaba a relajarse.
Abrió la puerta, tomó una montaña de libros de su escritorio y los tiró en su cama, después se sentó frente a ellos y se llevó una galleta a la boca listo para trabajar. A los minutos movió su cuello para buscar concentración pero en su lugar encontró detrás de la ventana de la chica a una rubia que también estaba sentada en su cama haciendo tarea...y comia galletas de chocolate.
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La chica de la ventana
Short StoryElla era el deseo que él siempre le pedía a las estrellas.