navidad con AMOLAD

día 1- Árbol navideño

Al estar en las escaleras cerca de la puerta, el estrépito se hizo mucho más notorio. Sonaba un trajin de cajas, papel y vidrio muy estrepitoso. Por el jardín vi pasar a las cupidos con muchas cajas amontonadas hasta por encima de sus cabezas, otras hasta más arriba de las fuentes. Quise preguntarles donde estaba Amor, pero estaban todas acarreando cosas hasta una parte despejada, supuse que por orden de Amor, así que las seguí.
Estaban todas las siervas de Amor montando lo que al parecer era la base de un arbol, y la dueña del lugar subida a lo alto de una escalera amarrando unas guirnaldas. Se veía adorable con unas orejitas de reno y su típico traje rosa ahora era reemplazado por uno rojo brillante con un extraño monton de nubes blancas.
Cuando por fin me vió me sonrió desde la escalera y sacubió su brazo, vi en camara lenta como perdía el equilibrio y caía sobre un monton de cajas --AMOR! ESTÁS BIEN?- fui donde ella que de tantos adornos ni se veía.
Estaba riendo cuando llegué a su lado y la ayudé a levantarse --No vas a cambiar verdad?- me sonrió con sus ojos brillantes de emoción --Navidad es donde la gente más se da amor, obviamente me emociona esta fecha- la acompañe junto a la escalera y esta vez yo me subí --además si quiero decorar todo debo apresurarme, es también donde más tengo trabajo-
No me dí cuenta cuando las cupidos tenían ya la mitad del arbol armado. Era un árbol gigante.
Amor me invitó a tomar un té mientras mirabamos trabajar a sus sirvientes muy coordinadamente --Es un árbol gigante, pero ¿Es necesario?-
--Es lo que más se distingue de mis decoraciones, un gran arbol brillante. Es un arbol especial, cada adorno está conectado a la tierra, brilla con las muestras de amor y el día antes de navidad en la noche es cuando más brilla y se refleja mi trabajo en la gente. Con su brillo se que lo estoy haciendo bien-
Sus palabras me llenaron de ternura y no pude evitar sonreir --Entonces te ayudo- Ahora fue ella quien sonrió y entusiasmada apuró a las cupidos para que terminaran la estructura.
Miles de luces, pelotas, botas, campanas y demás cosas vestian ese gigante pino de navidad.
--Amor, no es por nada, pero nos quedó muy lindo este árbol- sus cupidos aun se movían guardando las cajas, colocando un par de cosas más, pero ese pino gigante, era el que más sobresalía --Eso que no has visto lo mejor aún- se acercó a una de las pocas cajas que quedaban y sacó una estrella dorada muy grande --¿Quieres hacer el honor de poner la estrella?- como pude me acerqué a la punta del árbol subido en una mesa, una silla, una escalera y dos pobres cupidos. Al momento de colocar la estrella todas y cada una de las luces del arbol se encendieron y dieron vida a una suave melodía navideña.
Ya de nuevo junto a Amor, se admiraba mejor la imponente figura brillante frente a nosotros --Esa estrella es la conexión con la tierra, me hace inmensamente feliz poder ver el amor de las personas reflejadas en algo que puede adornar mi hogar e iluminar mis días, aun cuando es solo una temporada corta- me miró con los ojos un poco cristalinos --Gracias por ayudarme-
Siempre dulce, me conmovió su actitud. La abracé por los hombros y la acerqué a mi, ambos con la vista fija en el brillo que crecía --Felices fiestas Amor-