PREFACIO

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Si las paredes hablaran, muchas cosas contarían... ¡qué típico! Si las paredes, los suelos, las camas, las sábanas, los bolis, las almohadas, las libretas, los diarios, los corazones, las mentes, los cuadros, los libros, las hojas, esa servilleta usada del restaurante de la esquina en donde escribiste una gilipollez y después tiraste al suelo... si hablaran, muchas cosas nos contarían.  

Hay muchas cosas que he aprendido a lo largo de la vida. Supongo, que ese es uno de los objetivos de ella: aprender. Y superarse a uno mismo, también. ¿Qué mejor manera de afrontar el mundo que sabiendo que has conseguido más de lo que te proponías? Eso es una sensación increíble, o eso creo yo. Y el error más grande que puedes cometer en tu vida, es abandonar un propósito antes de acabarlo. Eso dolerá mucho más que cualquier otra cosa en este mundo. 

Pero hay veces, por muy raro que suene, que la vida te da una segunda oportunidad. Y a mí me la dieron. A mí, y a otros nueve que entraban en la etiqueta de ''atrasados'' y ''mayores de 25 que no han hecho nada con su vida''. Pero es nuestra última esperanza para salir adelante, para tener una vida digna...

Es nuestra última esperanza antes de caer. 











Until we fallWhere stories live. Discover now