Transeúntes entrelazados

Prólogo

Nunca se han encontrado en un sendero caminando ¿sin la más mínima idea de a donde ir? Vagando en el inmenso mundo sin dirección, ni sentido... Y de la nada... Frente a ustedes un muro que les prohíbe el paso. Se que muchos insultaran al obstáculo, pero con pruebas más contundentes, se que muchos más lo aprovecharán para darle un sentido a su camino.

Esto es lo que reunió a este par de seres, ellos quizás pensaron o se dieron cuenta que se encontraban en vías al mismo destino, pero eso si, jamás pensaron, ni mucho menos consideraron que estarían juntos desde ese primer encuentro para apollarse y cumplir juntos sus metas, no sólo las individuales, sino también las que nacerían de su nueva unión.

Es de suponer que todo camino tiene sus baches, y uno de los más grandes son las diferencias personales. uno caracterizado por ser un rey de la palabra, cuyo problema a veces no es que palabra usar, sino cuando callar. y ella caracterizada por ser inocente pero con grandes capacidades educacionales, cuyo problema no es el hecho de absorberse en los estudios, sino más bien no captar lo que alguien ajeno puede estarle diciendo.

Dos personas diferenciadas en gran medida por cómo llevan sus vidas, por el hecho de que uno aumento su agilidad mental para jamás ser demigrado por nadie, y ella aprendió a ser tan sólida que nadie podría romperla. Buenas ambas cualidades, pero separadas no sirven de mucho, por ello, así como el destino es un juicioso repartidor de naipes, que jamás juega al azar para reducir su posibilidad de perder, estos dos seres cuyos caminos se encontraron, están preparados sin saberlo están preparados para aprender el uno del otro, solo que sin pleno conocimiento de que lo harán.