Mi vecino un villano (___x Dabi xBakugo x Todoroki)

Capítulo 3: Una mañana de cine y una visita inesperada.

-¿Qué haces aquí, acaso eres mi nuevo vecino? -Preguntó una ___ algo confundida. 

-Si, aunque no sabía que vivieras en la casa de al lado. No te quedes ahí parada linda, adelante pasa, siéntete como en tu casa. -Dijo el peli negro para después apartarse de la puerta y dejarla pasar. 

-Está bien, con permiso. 

-Ven acompáñame el salón está por aquí. -La peli azul lo siguió a lo largo de un pasillo para luego girar a la derecha y toparse con una sala muy moderna, una gran televisión plana se encontraba en la pared de la izquierda, bajo la misma, un mueble con algunos libros y películas. En la pared opuesta se encontraba situada una gran mesa de madera con sillas, también de madera, por último en la pared de enfrente se encontraba un gran balcón que daba paso a un gran jardín.

-Ven linda, siéntate. -Dijo Dabi sentado en un sofá de cuero negro, palmeando un lugar a su lado, algo avergonzada me senté a su lado y le extendí la bandeja de magdalenas de chocolate. 

-Espero que te gusten, son magdalenas de chocolate. -Dije con una gran sonrisa. 

-Gracias, me encantan las magdalenas de chocolate, son mis favoritas. -Dijo para levantarse del sofá y salir del salo y al cabo de unos segundos volver con dos vasos de zumo de naranja y un gran plato donde puso las magdalenas. -Espero que te guste el zumo de naranja. ¿Quieres ver una película? -Preguntó para levantarse y dirigirse hacia el mueble situado debajo de la tele. 

-Yo asentí mientras bebía un sorbo de zumo. -Tras esperar unos minutos de rebuscar pareció encontrar algo que le agradaba y cuando se levantó pude apreciar que sostenía una película de terror "El aro". 

-Lo siento solo tengo películas de terror. -Dijo con una mano en su cuello. 

-No importa, me gustan las películas de miedo aunque me asusten un poco. -Dije para volver a sonreír, al parecer eso lo dejó un poco anonadado. 

-Te gustan las películas de terror vaya, quien diría que a una linda chica le gustaran las películas de terror, bueno pero no me digas que no te lo advertí. -Dijo con una media sonrisa algo escalofriante a mi parecer para posteriormente girarse e introducir la película en el reproductor y volver a su lugar cogiendo una magdalena y quedarse estático al probarla. 

-Que pasa. ¿No te gustan? -Pregunté con algo de nerviosismo.

No, tTodo lo contrario, esto está delicioso, tienes que probarlas. -Dijo extendiéndome una. 

-Gracias. -Dije a la vez que la tomaba y depositaba el vaso en la mesa. Así siguió la mañana hasta que en una escena me asusté más de lo normal lo que me hizo aferrarme a el brazo de Dabi, el cual  se rió un poco y me abrazó. 

-Tranquila es solo una película, no tienes por qué asustarte. 

-Lo sé pero es que parecía tan real que... 

-Tranquila, no es real y aunque lo fuera no podría hacernos nada, o acaso olvidas que todos tenemos koseis. -Dijo de forma burlona, a lo cual comencé a reír sin poderlo evitar. 

-Vaya, vaya mira pero si es la chica que hasta hace unos segundos estaba aterrorizada por una película, ¿que hace riendo como sin nada? -Yo no podía parar de reír por la forma tan graciosa en la que lo mencionaba hasta que después de un rato de risas y bromas conseguí calmarme, miré la hora en mi reloj y me sorprendí, ¡era muy tarde!

-Dabi, me tengo que ir es tarde y tengo que dar de comer a Kuro. -Dije para levantarme y que el hiciera lo mismo. 

- Espera un momento. ¿Quién es Kuro? -Preguntó alzando una ceja.

-Kuro es mi gato. -Respondí con una sonrisa.

-Bueno si es así supongo que sería mejor dejarte ir antes de que ese pobre gato se muera de hambre. -Dijo acompañándome hacia la salida. -Ah y gracias por las magdalenas. -Dijo mientras abría la puerta para que pudiera salir. 

-Adiós Dabi, fué muy divertido espero que podamos repetir. 

-Claro, adiós linda hasta otra.- Dijo mientras me daba la vuelta para marcharme y el cerraba la puerta. 

-Fué muy divertido pasar la mañana con Dabi. -Iba metida en mis pensamientos cuando vi a Shoto parado en mi puerta. 

-___-chan, me preocupaste. Por qué no respondías a mis llamadas. -Dijo algo preocupado. 

-Oh si, me dejé el móvil en casa esta mañana, siento haberte preocupado Sho-kun. -Dije un poco afligida y con la cabeza agachada. 

-No te preocupes, solo no lo vuelvas a hacer, ¿de acuerdo? -Dijo poniendo una mano en mi cabeza. 

-Sho-kun es algo tarde para que vuelvas a tu casa, ¿qué tal si te quedas a comer? Y de paso me cuentas que tal todo. -Dije alegre mientras abría la puerta y lo invitaba a pasar.

-De acuerdo pero, ¿que es eso de que ya no me saludas como cuando éramos pequeños eh? -Dijo más calmado. 

-Ah, eso, em, pues no sabía si te molestaría. -Reí nerviosa mientras colocaba una mano detrás de mi cabeza. 

-Pues ahora ves que no. -Dijo sonriendo mientras se giraba, yo al ver esto tomé carrerilla y salté en su espalda. 

-¡Sho-kun!  -Grité como niña pequeña mientras me colgaba de su espalda con brazos y piernas al estilo koala y él me sujetaba para evitar caerme, entre risas y bromas entramos  a mi casa tras varios intentos por parte de Sho-kun de cerrar la puerta con su pierna, para dirigirse hacia el salón y bajarme en el sofá y sentarse a mi lado. 

-Bueno, ¿que te apetece comer?

920 palabras.
Tercer capítulo, ya apareció Todoroki, solo falta que Bakugou el rey de las explosiones asesinas Katsuki haga acto de presencia. Próximo capítulo una comida con Sho-kun. Si les gustó voten y comenten, se despide Katsumi-chan.
19/12/17

Actualizado 12/10/20