Estoy Contigo

Preparativos

A la mañana siguiente, poppy  reunió a todos para designarles sus tareas. Los bertenos trabajarían junto a los trolls para una mejor eficiencia. La mayoría ayudará a decorar, pues es un gran espacio en el que estarían festejando.
Dj suki junto con bridget se encargarían de poner la más movida música apegandose al gusto de ambos bandos.
Grandulon y Cooper  junto a otro grupo se encargarían de la comida. Satin y seda   se encargaban de poner en todos lados listones con ayuda de algunos bertenos y trolls.
Todos colaboraban en las cosas que les iban mejor, poppy no podía estar más feliz, ver á su pueblo junto con el berteno, en paz y armonía era algo gratificante.

Ella por su lado, estaba buscando materiales para terminar todas las invitaciones--aunque en realidad no hacían falta-- que aún no terminaba.
Sabía de antemano que para los bertenos tendría que hacerlas más grandes, necesitaría mucha diamantina.
Fue a diferentes lugares para conseguir todo lo que necesitaba, algunas cosas las dejo en el castillo berteno y otras se las llevo en mano y cabello.
Parecia que ella vivía en el descontrol y escándalo de las fiestas y su vida diaria, pero realmente había ocasiones en las que le gustaba estar alejada de todo ruido y gente, más cuando hacia sus invitaciones. Era por eso que siempre las terminaba todas y cada una de ellas en el menor tiempo que alguien pudiera imaginar.

Donde vivían con anterioridad, ella tenía su sitio especial el cual nadie sabía dónde estaba. Sus amigos sabían de esas escabullidas al lugar secreto pero jamás sacaron el tema, que al parecer era de poca importancia.
Ahora que tendrían que vivir en un sitio cercano de esos rumbos, debía encontrar un sitio para ella.

~

Todos continuaban con sus labores, y todo se comenzaba a ver de maravilla, ya había menos gris y un poco más de colores, claramente aún no terminaban.
Ramón, quien había estado ayudando a poner la decoración, se le hizo extraño no escuchar a la peli-rosa estar cantando con sus amigos o estar de un lado a otro, ciertamente ella era bastante hiperactiva y no era normal verla quieta o siquiera callada.
Así que se dirigió a donde los chicos para preguntar sobre su paradero.

Entro a la cocina donde más que una reunión para hablar de la comida parecía una pelea con esta. Ni eso, una guerra.
Sólo se veía como diferentes alimentos eran lanzados en el aire, en el centro se econtraba grandulon quien trataba de proteger al señor peluche. Se acercó a el evitando a toda costa ser golpeado por comida.

--Hey ¿sabes donde está poppy?-- le ayudó a pararce del suelo.

--Mmm realmente no lo sé. Cooper ¿has visto a poppy?

--¡¿Qué?!--. Grito el chico de largo cuello, quien estaba al otro lado de la cocina.

--¡¿Qué si has visto a poppy?!

--¡No!

--No Ramón, no la hemos visto.

--Bueno, gracias.

Él salió de ahí tan pronto como pudo y se dispuso a ir con satin y seda. Ambas terminaban de poner los listones en un pilar mientras diamantino junto con otros llenaban estos con brillos.
T

ampoco se veía rastro de ella por ahí.

--Oigan ¿han visto a poppy?

--No--. Contestaron al unísono--. Tal vez bridget te pueda ayudar.

Así, dio media vuelta y empezó a dirigirse hacia brirget. Ella se encontraba charlando con Dj suki, mientras está ponía algunas melodías y britget asentía levemente su cabeza.
Ramón subió hasta ellas.

--Oigan, chicas. Perdón por la intromisión.

--No te preocupes ¿Que sucede?

--Venía a preguntarles si ¿han visto a poppy?

--No, pensé que estaba contigo.

--Pues no, nadie la ha visto desde la mañana.

--Tal vez sólo fue a caminar a algún lugar.-- Ramón miro confundido a suki--. Ella tiene esa costumbre de tener un lugar aislado de todos para hacer sus invitaciones, pero jamás nos dice donde es.

--¿En serio? No tenía idea.

--Así que tranquilo, ella volverá antes del atardecer.

--¿Y si no? -- Dj sólo se limitó a levantar los hombros.

Ramón resoplo, tratando de olvidar sus preocupaciones. Ella sabía cuidarse, hasta cierto punto. Derrepente recordó cuando la encontró inconciente y apunto de ser devorada, un escalofrío recorrió su cuerpo. Ese recuerdo no le ayudaba en lo absoluto.

/

Ya en la tarde, todos habían dejado de hacer sus tareas, estaba casi terminado todo. Cada quien fue a su hogar a descansar, algunos trolls se reunieron en el árbol, pues lograron hacer pequeñas casas de provisión para no quedarse todos en el castillo.
Ramón y los chicos se encontraban en las escaleras, esperando que cierta troll rosa se designara a aparecer. Todos estaban bastante preocupados, nunca sus amiga había tardado tanto en volver en alguna de sus pequeñas escabullidas, era algo con lo que no contaban.
Tal vez se había perdido, o había caído en algún hoyo, o podría ser que sólo quiso estar un rato más sola...

... O quizás la devoraron.

Cualquier posibilidad era aceptada hasta que se desmintieran. Podrían ir a buscarla pero tardarían mucho y no era recomendable salir en la noche, era bastante riesgoso.

Cada minuto que pasaba Ramón era invadido más por los nervios, el sabía que no era propio de ella estar fuera tanto tiempo y sin haber avisado a alguien, aunque no quisiera pensarlo, algo le seguia insistiendo que algo malo paso y debía ir a buscarla de inmediato.
Frustrado comenzaba a caminar de un lado a otro, era la única manera en la que podía pensar sin sacarce de quicio.
Se detuvo de golpe al oir unos pasos subiendo, levantó su rostro y poco a poco se veía como una cabellera rosada empezaba a llegar hasta ellos.

--¡Poppy!-- gritaron al unísono.

--Hey ¿Que tal chicos?--. Dijo la peli-rosa apenas poniendo respirar. No se veía en las mejores condiciones, su ropa y rostro tenían algunas manchas de barro mientras su cabello está revuelto y con algunas hojas.

--¿Qué te paso?--. Pregunto Ramón mientras se acercaba a ella--.¿Estas bien?

--Si, sólo que tuve un contratiempo.

--¿Qué clase de contratiempo?

--Tú sabes...--. Empezó a mover en círculos sus manos--. De esos que te hacen perder tiempo.--- Ramón la miro inconforme con su respuesta--. ¡Wow! Pero si es tarde, deberíamos entrar.

Poppy comenzó a caminar siendo seguida por los demás, a excepción de un troll que no estaba del todo convencido.