Capitulo 13

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Mientras guardaba mis cosas, sentí la presencia de alguien y de repente me taparon los ojos con sus manos.

-Adivina quién soy- me pregunto

-Si no hubieses hablado probablemente me costaría adivinar, pero tu voz la conozco mejor que nadie, así que eres Joshua- me destapo los ojos

-Me tienes que conocer bien, eres mi mejor amiga - se rio- ¿Cómo estás? Estuve haciendo varias cosas en el día y no pude venir a saludarte, pero como no te vi con tu doble, aproveché para saludarte.

-Bella tenía que irse rápido porque ya habían venido por ella y si se tarda un minuto en salir, es como una eternidad para sus padres y me fue bien, no es que me encante la escuela, pero ¿qué se le hace?

-Si no te conociera diría que es tu hobbie-se rio- además que tienes buenas calificaciones, no sé de qué te quejas

-Tampoco son calificaciones perfectas, necesito mejorarlas más- le conteste

-Si estuvieras en mi lugar, te creería, pero tú vas bien, el que debería de decir eso soy yo.

-Tú no tienes preocupaciones de nada, incluso tus calificaciones te valen- cuando él me iba contestar, escuche una voz femenina

-Josh, ¿Nos vamos? – le pregunto

-Sí, aguántame un momento para despedirme- volteo a verme y me susurro- es una chava que acabo de conocer y me agrado.

-A ti que chava no te agrada- le conteste- suerte, y mejor ya vete porque me está viendo con una cara de pocos amigos

-Nos vemos luego, te quiero- me abrazo y se fue con su nueva amiga

Algo que tenían en común Joshua y Bella es que hacen amigos tan rápido, algo que a mí me cuesta demasiado, ojalá se hicieran amigos ellos.

Cuando llegue a mi casa, realice mi rutina de siempre, que es comer, platicar con mi familia lo que paso en el día y dirigirme a mi habitación. Me recosté un rato en mi cama y mientras me relajaba, sonó mi celular que me había llegado un nuevo mensaje y vi que era de Jonathan.

Pensé en lo que me dijo Bella y ¿si de verdad era alguien que se hace pasar por otra persona para hacerme daño? Fuera cierto o no, mejor no me arriesgaba y dejaba las cosas por la paz.

- ¿Hija? -me desperté por la voz de mi madre

- ¿Qué paso mamá? - le pregunte

-Solo vine a decirte que voy a dejar a tu hermano a su clase de natación, no tardo- y solo le conteste que estaba bien. Me despertó de mi descanso, son de esas veces que te relajas tan bien y te quedas dormida, como me acaba de pasar a mí. Intenté volver a dormirme, pero ya no lo conseguí y como no tenía nada que hacer, me puse a ver videos.

Toda la semana se me paso volando, ya estábamos a la última hora de clases del viernes y lo único que quería hacer es descansar y ver muchas películas.

-Sofía, tienes que acompañarme- me dijo Bella

- ¿A dónde? - le pregunte

-Hay una fiesta hoy en la noche y quiero que vengas, no tomare un no como respuesta

-Bella, sabes que ese no es mi ambiente, ve tú, sin mi estarás bien, yo soy feliz en mi casa

-Sofía, siempre me dices lo mismo- al parecer se enojó- no sabes si es tu ambiente, si nunca me has acompañado, sal un rato de tu casa, despeja tu mente, conoce personas, en una de esas y conoces al amor de tu vida.

-No estoy interesada en eso, lo sabes, y realmente no me dan ganas de ir, ¿por qué te cuesta entenderlo? - le conteste

-Intento que salgas de tu casa y te diviertas, pero eres necia, así que abúrrete tu sola, veré que otra amiga quiere acompañarme- se alejó enojada, no me gusta rogarle a nadie y menos por una tontería, como si no me conociera.

Yo me conozco y sé que las fiestas no son lo mío, además que arreglarme me da una flojera (como casi todo) así que mejor no, yo sé que a Bella se le pasaría en algún momento, no nos hemos peleado tantos días y esta no sería la excepción.

En la tarde, llegaron mis tíos, primos y mis abuelos, todos los viernes hacemos como un día familiar en el cual jugamos y nos contamos lo que pasó en la semana, tener estos momentos con mi familia, me hacen dar cuenta que tengo a la mejor familia y no la cambiaría por nada, sin embargo, no la estaba pasando tan bien porque Bella estaba enojada conmigo y no me agradaba esa idea, así que, decidí subirme a mi habitación para mandarle un mensaje y ver qué pasaba.

Cuando abrí mis mensajes de Messenger me di cuenta que tenía 3 mensajes de Jonathan, uno por cada día que había pasado:

"Martes"- Hola

"Miércoles"- Hola?

"Jueves"- Hola??

Y faltaba el de hoy, pero me tarde más en pensarlo porque justo llego el mensaje diciéndome:

"Oye, ¿Qué pasa?" 

My little secretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora