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-Hola, me llamo Park Jimin y tengo 17 años. He sido transferido desde Estados Unidos y soy nuevo así que por favor trátenme bien.- Dijo Jimin mientras sonreía.
Esa voz... la conozco. Era la misma voz del chico que estaba en la escuela de Hani. Era el. -No me vió la cara ¿verdad? Tal vez no me reconozca.- Pensé mientras trataba de esconder mi rostro con mis manos.

-Mis vacaciones fueron atareadas ya que tuve que mudarme a Corea, pero estoy feliz de estar aquí y espero hacer nuevos amigos- prosiguió Jimin aun con una sonrisa plantada en su rostro. -Diablos... no querrá hablar conmigo ¿cierto? Solo se acercó porque Hani era adorable. No por mi. No quiere hablarme ¿verdad?- Continuaba pensando. Se que parece que exagero, pero en serio es difícil para mi socializar.
-¡Min Yoongi!- Escuché como el profesor gritaba mi nombre interrumpiendo mis pensamientos. -Ahora todos me miran... genial- pensé mientras sentía todos esos ojos mirando hacia donde estaba.
-Min Yoongi, dinos que hiciste en las vacaciones- Suspiró el profesor.

-Yo emm...- 
Mire a Jimin un momento y vi como me miraba fijamente esperando a que hablara. Giré mi cabeza para parar de mirar hacia su dirección y mordí mi labio para tratar de calmar mis nervios.
- N-no hice mucho la verdad. Solo me quedé en casa- Respondí muriendo de vergüenza  por titubear. Volví a bajar la cabeza en la mesa y el profesor continuó con su larga charla.

{...}

-Después de una larga hora de clase sonó el timbre y por fin podíamos salir del salón. Tomé mi mochila rápidamente para poder seguir a Jimin. Fui un par de pasos detrás de el hasta que llegó a su casillero a poner sus libros. Me escondí detrás de una puerta y empecé a observarlo más detalladamente.

Tenía cabello anaranjado el cual estaba partido a la mitad y caía desde la coronilla de su cabeza hasta sus ojos haciendo una curva.
Tenía hermosos ojos los cuales eran café oscuro y tenían un resplandor increíble. Su nariz era pequeña y adorable y después estaban sus labios los cuales eran grandes y rosas como los de una muñeca. Era el chico más hermoso que había visto.
-¡Hey!- Vino Yerin y me gritó por detrás haciendo que casi gritara del susto.
-Joder, Jung Yerin, a la próxima trata de avisarme cuando me vayas a gritar. Casi haces que se me salga el corazón por la boca.- Le dije tocándome el corazón el cual palpitaba a mil por hora gracias al susto que me dió Yerin. Volví a voltear para ver Jimin y ahora estaba leyendo su horario de clases.
-¿Qué estas mirando?- Me preguntó Yerin mientras trataba de encontrar que observaba mirando hacia donde apuntaban mis ojos.
-Nada- Dije y justo ahí Jimin cerró su casillero y se fue. Me di la vuelta ya para ver que era lo que quería Yerin, la amaba, pero aveces no me deja respirar.
-Estabas mirando al chico nuevo. Desde que lo viste en clase estas mas tímido de lo normal. ¿Lo conoces?- Me preguntó Yerin cuando se dió cuenta lo que estaba haciendo.
-No lo conozco... p-pero creo que lo ví en la escuela de Hani, o algo así.- le respondí.
-Bueno. Quería decirte que no llegues tardes a tus clases. Te conozco, Yoongi.- Me dijo Yerin y la verdad no mentía. Aveces me escapaba de clases, algunas veces por los ataques de pánico.
Le asentí a Yerin y luego la vi irse a su siguiente clase.

{...}

-Ya era hora de la clase de educación física, la cual odio. No soy bueno en ninguna actividad física y el profesor es un desgraciado.
-Empiecen por correr por toda la cancha unas treinta veces, si se detienen harán el doble. Luego empezaremos a practicar basketball.- dijo el profesor con tono irritado y luego sonó su silbato.
-¿Siempre es así de gruñón?- Me preguntó un chico un poco mas alto que yo con pelo castaño.
-Créeme, he estado en esta escuela por años y cada día que pasa es mas hijo de puta- Le dije y ambos nos reímos.
-Me llamo Jungkook.- Me dijo mientras empezaba a trotar.
-Min Yoongi- Le dije sonriendo y empezando a trotar a su lado. -¿Eres nuevo?- le pregunté.
-Si. Me acabo de mudar de Busan- Me dijo mientras seguía trotando.  La verdad Jungkook no parecía un mal tipo, por primera vez en un buen tiempo me animé a hacerle platica a alguien.
-Oh. He ido a Busan antes, es un lugar muy bonito. La verdad esta escuela puede parecer extraña pero cuando te acos... - Iba hablando cuando ví que Jimin nos había pasado corriendo. Me le quede mirando mientras seguía corriendo y luego me acordé que le hablaba a Jungkook. Me volteé y Jungkook al principio estaba confundido, pero luego de unos segundos una sonrisa picara se formó en sus labios.
-N-no lo conozco, apenas se su nombre- Le dije pero Jungkook solo seguía sonriendo.
-¡N-No se quien es! Yo solo le- - Iba hablando pero luego se me enredaron los pies haciendo que cayera al piso frente a todos.
-Maldita sea- susurré.
-¿Estas bien Yoongi?- Dijo Jungkook mientras se acercaba hacia mi.
-Lo Estoy- Dije mientras me sentaba en el piso. Ahí vi las miradas de todos, algunos reían, otros solo observaban. Al ver tantos ojos viéndome , empecé a sentir como se me dificultaba respirar.
-Yoongi, En serio no pareces estar bien- Me dijo Jungkook ya con una cara mas preocupada mientras se agachó hasta donde estaba. Me pare del piso como pude y salí de ahí hasta el baño del gimnasio y me encerré. Trataba de calmar mi respiración y de olvidar lo que había pasado.
-¿Yoongi? Por favor, sal de ahí. Tienes que ver a la enfermera.- escuché la voz de Jungkook del otro lado de la puerta mientras tocaba la puerta. No quería salir, pero tenía razón. Salí del baño con una mano en la cara y de ahí salí del gimnasio con Jungkook ayudándome a ir a la enfermería.

{...}

-Por fin se había terminado el día. Fue todo un desastre, pero por fin podría irme a casa. Fui a recoger a Hani de su escuela, pero al parecer ella no había salido entonces esperé. Después de unos minutos siento como me toca alguien por detrás, volteé pensando que era Hani la cual ya había salido.

-Hola- Ahí estaba Jimin, de nuevo, todo sonriente frente a mi.








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Amo al Yoonmin mas que a mi vida.

I'll Stay Forever - YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora