Única Parte

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Yoongi aparcó su auto en la acera frente a la casa de su nuevo paciente. Trabajaba en el hospital del servicio social y había ingresado hace unos meses al programa que brindaba servicio a domicilio para pacientes geriátricos. Le había tocado el paciente Park este mes. A su esposa ya le había tocado visitar a este paciente, por lo que supo que era un paciente psiquiátrico. Su mujer le había dicho que tuviese cuidado en esa casa. La verdad, Yoongi se extrañó por aquella especie de advertencia, y se rió divertido. Pero luego sus compañeros de trabajo habían hecho que su curiosidad aumentara cuando le comentaron el por qué de la advertencia de su esposa.

Normalmente los doctores le advertían sobre los paciente, no sobre los tutores.

Al parecer el responsable del paciente Park, su hijo, era un chico bastante atrevido - como había dicho uno de sus compañeros -. 

El chico es un poco... dulzón. 

Yoongi había conocido a todo tipo de pacientes, y tutores. Pero alguien ¿Dulzón

Tomó su maletín y su identificación médica antes de salir del auto y ver la fachada de la casa. Bastante simple a su parecer. Nada llamativo. Más bien, lo que sí llamó su atención fue el movimiento de una cortina a través de una de las ventanas de la primera planta. 

Aclaró la garganta y se acercó a la puerta tocando el timbre. Y la verdad es que estuvo a punto que volver a tocar - después de un par de minutos de espera - pero una rejilla en la parte superior de la puerta se abrió. 

Logró ver unos delineados ojos avellana observándole. 

- ¿Si? - habló la persona tras la puerta. 

La voz fue bastante dulce, pero pudo reconocer que se trataba de un varón. ¿Será que este es el tutor?

- Buenas tardes, soy el doctor Min Yoongi, vengo a ver al paciente Park Jisub.

Yoongi pudo ver los ojos del chico encorvarse hasta parecer una fina línea y escuchó una risita suave.

- Oh, sí, sí. Ahora le abro.

La rejilla volvió a cerrarse y Yoongi se planteó el huir a la casa de su siguiente paciente y marcar en el registro como paciente ausente.

Mas no le dio tiempo de hacerlo cuando la puerta se abrió por completo y vio al chico de los ojos avellana. El chico era casi de su altura, cabello rubio, y llevaba ropa bastante ligera para su gusto. 

A pesar de que se encontraban en un caluroso verano, él no sería capaz de usar prendas tan ... ¿faltas de tela?

- Pase doctor - la voz cantarina del chico lo hizo regresar a la realidad.

Cruzó la puerta rogando porque su seguridad no le traicionase. El interior de la casa tampoco era algo increíble. Era casi tan simple como la fachada.

- ¿Cuál dijo que era su nombre, doc?

Yoongi se giró a ver al chico. A su criterio, el chico lucía bastante adorable, pero tenía presente ese aire seductor  en él que le hacía dudar un poco por la calificación de apariencia del muchacho.

- Min Yoongi

- Es un placer Yoongi. Yo soy Jimin, Park Jimin. Puedes decirme Jiminie.

Uh-oh ... ahí está.

Eso de lo que los doctores hablaban. Esa sonrisa disque inocentona. Esa mano pasando por su cabello llevándolo hacia atrás, y ese tono tan ... coqueto.

- Bueno, uh, Jimin... ¿El paciente está en condiciones de verlo?

- ¡Claro! Por aquí ... 

El chico, ahora identificado como Jimin, pasó por su delante indicándole el camino. Y Yoongi quiso pegarse un tiro cuando bajó la mirada por instinto hacia su trasero.

Chico Dulzón [Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora