Fue no hace más de dos semanas, Daniela y yo estabamos de compras por todo el pueblo, su prometido la consentia demaciado, es amor, o almenos eso creia...
Paseabamos por las calles despues de entrar a casi todas las tiendas posibles.
Si, mi desgracia empieza en este punto...
Mientras Daniela y Hugo fanfaroneaban sobre su futuro, pudimos observarlo a distancia.
Hay estaba mi prometido, tomado de la mano de una joven hermosa, paseando como si fuesen los unicos en el mundo, y hay la peor parte, un beso.
El presiono sus labios a los de aquella joven, mientras ella solo reia, derrumbando mi mundo en una fraccion de segundos...
Daniela estaba hecha una furia con plan de reclamarle a la pareja descarada, gracias a Hugo que la detubo antes de hacer un escandalo.
Solo podia sentir como las lagrimas brotaban de mis ojos...
Mis mejillas se coloreaban de la impreción, mi pecho dolia tanto...
Me desmonoraba a pedazos...
Ahora lo entendia, tantos años comprometidos, pero jamas habiamos hablado, nunca hubo alguna carta o algun paseo como las otras parejas...
Solo estaba esperando ansiosa algo que no me pertenecia...-vamonos, porfavor...[no pude controlar las lagrimas y mi equilibrio estaba roto].
Fue una bendición que Hugo estubiese con nosotras, vaya que impedir que Daniela armara un escandalo era dificil. En esta ocación, mi hermana acepto sin oponerse a mi petición, preocupada me tomo entre sus brazos y dandome palabras dulces y maldiciendo al hombre que dejamos atras.
Regresamos a la casa, Hugo se despidio de mi hermana y se disculpo por lo sucedido.-¡ese bastardo! [Exclamo Daniela].
-Por hoy, solo por hoy. Permiteme estar sola porfavor... [le suplique a mi hermana].
Aceptar a mi petición fue dificil.
Nuestros padres no se encontraban en aquel momento, asi que podia encerrarme sin asistir a tomar el Te...
Lo amaba, de verdad lo amaba.
Pero con la escena aquella; no podia permitirme estar alado de alguien que no me amase. Eso creia realmente.