Para: La que tiene mis pensamientos.
De: Un admirador.
Sabes, talvez estás cartas nunca lleguen a tus manos porque soy un chico muy tímido, me encantaría entregartelas pero no sé cómo reaccionarias.
Y por cierto me encanta cuando andas tu cabello suelto parece una cascada de oro.
Mientras tanto... Seguiré pensando en ti.