La Hija de la Estrella

La Hija de la Estrella (historia en edicción)

BUENO, AVISO: ANUNQUE SÉ QUE ES MUY POCO PROBABLE, NO OS COPIEIS DE MI RELATO, POR FAVOR. VA EN SERIO. PORQUE... SÉ DÓNDE VIVES. WA JA JA.

ES BROMA, PERO NO ACEPTO: adaptaciones ni nada por el estilo; si las hay, puedo denunciar plagio.

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Esto es ya que, cuando termine de escribirla y editarla, planeo colocarla en papel.

Y, PARA LOS MEJORES LECTORES, LOS BUENOS LECTORES, MUCHAS GRACIAS POR LEER ESTE LIBRO Y ME GUSTARÍA SABER VUESTRA OPINIÓN DE SI OS GUSTA. XD!!!!!

***Prólogo***

Me llamo Melisa Grace. Mi pelo, castaño como la oscura corteza de un árbol, contrasta con mis ojos del color del cielo. Todos me dicen que parezco traviesa, pero... bueno, yo solo me describiría cómo pícara. En realidad, no sé cómo describirme. Trasparente e imprevisible. Suspiro largamente mientras estoy alegre. Lanzada pero tímida. Fuerte e insegura. Como un huracán que parece acercarse a una ciudad para destruirla, pero después solo se lleva volando algunas hojas... Pero bueno, la verdad es que soy feliz siendo yo misma, aunque cuando pienso en mi existencia solo veo una cosa: catástrofes.

Debería empezar las cosas por el principio, algo antes del día en que mi vida cambió...

" Tendría cinco años. Recuerdo mis débiles pisadas sobre una acera. Empezaba a llover, y me había resguardado sobre el tejadillo de una pequeña mansión. También recuerdo una sensación de malestar, y cómo mis fríos nudillos llamaban a la puerta de la casa. Una cara sorprendida se había asomado, y después, tengo el débil recuerdo de verlo todo negro y haberme desmayado...

Ese día, tuve suerte de haber llegado hasta la casa de la hermana Teresa Grace, una abadesa de un monasterio que se había retirado a su antigua casa familiar.

También tuve suerte de que esa mujer bondadosa me hubiese acogido como a una hija, a una pobre niña sin recuerdos, y le hubiese dado un hogar, una familia y un nombre.

Bien, pues esa es toda mis historia. Todo lo que recuerdo de mi pasado, por más que me esfuerze, es todo lo que sé de mí.

De mi vida en el presente, os puedo decir bastantes cosas: vivo con mi "madre", la hermana Teresa,  residimos en la casa familiar de la familia Grace, una pequeña mansión acogedora en los fiordos del sur de Noruega, aunque voy a tomer clases en un internado español, llamado "Santa María", aunque por las tardes regreso a casa, al contrario de muchas de mis compañeras.

Casi todas las tardes quedo con mi mejor amiga, Thalia. Ella tiene el pelo muy rubio, y unos ojos brillantes, muy grandes, del color de la tierra. Pese a su aspecto de ángel, os puedo asegurar de que es un diablillo por dentro. Sus escándolos son pequeños, como ponerse pantalones en vez de vestido o falda larga, saltarse algunas oraciones "largas y aburridas" , preferir montar a caballo antes que cotillear de lo esto y de lo otro con las chicas de clase... En fin, ella siempre es tema de conversación entre las monjas, pero no llega a ser mala. Bueno, una vez quiso entrar en el despacho de la directora para comerse todas sus cajas de bombones para los invitados, pero no lo llegó a hacer y yo no la dejé, porque sabía que si no se metería en problemas.

Yo definiría a mi amga como un espíritu libre. Por eso me llevo tan bien como ella. Yo soy como ella, solo que a veces no me atrevo a demostrarlo...

Bueno, ya he descrito un poco mi vida, así que os voy a contar el día en que toda mi vida cambió".