Capítulo 2: Esperanza de vida.

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Esperando una posible respuesta de alguien vivo, mi hermana se apoya en la escalera y mira hacia el final de la calle, la cual, desde lejos, se veía nuestra casa.

-¡Adam! ¿Que es eso?- dice, medio susurrando mientras señala a lo lejos.

Miro a lo lejos y veo un gran horda de infectados, son por lo menos 10, como nos vean, seremos comida rica.

-Por lo que he leído en mis comics de zombis, es una horda de infectados; un gran grupo de muertos vivientes, y estan viniendo hacia aquí, pero creo que no nos han visto, escondámonos.- la cojo de la mano y nos metemos entre unos matorrales del jardín de la casa.

Mientras estamos escondidos, logro oir como se abre lentamente la puerta de casa de mis vecinos, los Mhattews, ¿quien será?

-¡EH! ¡Basta de bromas! ¡Salid de donde estéis!- dice una voz desconocida que no parece ser la de mi vecino.

-Cállate, estamos vivos, y deja de gritar, o serás la cena de los muertos.-digo susurrandole.

-¡AAAAAAAHHHH!- dice asustado.

Veo como se mete en la casa de nuevo, y vuelve a salir con una escopeta de caza, me apunta y me dispara, pero no me logra dar y le da a la madera del porche, cosa que hace gran ruído y alarma a los zombis.

-Ostia puta, ¡que vienen!, coje las cosas y vámonos.-dice el hombre muy estresado.

-¡No tenemos salida!, la puerta trasera esta bloqueada con maderas, ¡¿como mierda salimos?!- grita una voz femenina.

Los zombis logran entrar en la casa y se empiezan a escuchar escopetazos y pasos, un leve chillido logra confirmarme de que seguramente los hayan matado a todos los de la casa.

-Tengo miedo, joder, voy a salir corriendo y que le den a todo.-susurra mi hermana.

-Helen, NO, debemos esperar a que se vayan los zombis, y buscar gente viva, o comida, que a este paso nos moriremos de hambre.

Rompo una rama de los arbustos, pero no sabíamos la existencia de la gran colmena que había colgando entre la profundidad de la rama, empiezan a salir en manada abejas y Helen empieza a sudar.

-Adam, salgamos de aquí, me van a picar y tu sabes que soy...-le pica una avispa en el hombro derecho- ¡Ahhhhhhhhh!- chilla pero le tapo la boca, se suelta de mí y sale corriendo-.

-¡Helen! ¿Donde mierda vas? Joder...

Salgo sigilosamente de entre las ramas y rodeo la casa a cuclillas para no alertar nada ni nadie, llego a la parte trasera y me asomo lentamente por la ventana. Logro ver dos zombis devorando el cuerpo, o lo que queda, del hombre de la escopeta, ¿y si cojo la escopeta? No sé utilizarla, pero seguro que de algún lío me saca y así buscaría a mi hermana con más seguridad, podría hacer ruido para distraer a los zombis y entrar.

Dios mío, ¿que le ha pasado a la puta ciudad? es como si hubiese explotado una bomba nuclear, no hay nadie, vivo... Sigo andando por la calle pero sin hacer ruído buscando algún coche que tenga las llaves puestas para hacer sonar el pito y así llamar la atención, un coche, lo miro, nada, sin llaves. Después de llegar al final de la calle, veo el garaje de una casa, seguro que tiene premio.

Fuerzo la puerta del garaje, oh dios, que coche, lastima que no pueda aprovecharlo porque la calle esta bloqueada debido a la cantidad de coches inutilizables que hay amontonados. Compruebo si el coche está cerrado, mierda, buscaré las llaves... Me acerco a una estantería, veo un marco con una foto, lo miro, es una familia, bueno, lo era, eran felices hasta que ocurrió esta mierda... Pero bueno, no voy a distraerme, sigo buscando entre hierros oxidados, sin resultado, me giro y veo una cajita de llaves anclada a la pared, la abro y cojo las llaves del coche, lo abro y me preparo para correr cuando haga sonar el pito. Tres, dos, uno...

-¡No! Espera.-dice una voz femenina.

-¿Quien.. quien habla?-digo sorprendido.

-Yo también estaba en la casa donde han entrado la manada de los zombies, estábamos yo y mi padre buscando recursos... hasta que has llegado tú. Llevo todo el rato observándote, desde que estabas detrás de la casa hasta que has entrado aquí.- se acerca- Por cierto, ¿buscabas esto?

Me giro y la veo, una mujer alta, flaca, con el pelo por el hombro, pelirroja y con muchas pecas en la cara, lleva una chaqueta de cuero amarilla, unos vaqueros anchos negros y unas botas de pelo, en las manos sujeta una escopeta y por detrás se le ve un bate de beisbol sobresaliente de una mochila negra... espera... ¡la escopeta!

-Perdona por no presentarme, me llamo Hailey Righ, mi padre y yo nos ofrecimos a buscar recursos en casas, vivíamos en una pequeña comunidad, de 6 personas, al otro lado del río, nos estaban viniendo noticias de una posible gran contaminación desde hace una semana, así que decidimos reunirnos todos por si acaso y asegurarnos, y fijate tú, ese ''por si acaso'' se ha convertido en realidad. ¿y tú qué? -dice mientras me ofrece la escopeta.

-Yo soy Adam, no me gusta decir mi apellido, mi padre trabajaba en esa fábrica tan rara que suelta ese humo azul, supongo que esa es la causa de todo esto, esta mañana era todo tan normal, hasta que él vino, del trabajo... Y se convirtío en zombie...-cojo la escopeta.

-¿Zombie? Yo los suelo llamar carroñeros, pero de todas formas, no van a dejar de ser lo mis...

Escuchamos un chillido y un ''ayuda'', pero... ¿¡la voz de mi hermana?!, corro hacia afuera y miro alrededor estresado, a lo lejos veo a mi hermana en el suelo sentada, chorreando sangre del brazo y sujetándoselo para intentar evitar una hemorragia. ¿QUÉ COÑO LE HA PASADO?

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⏰ Última actualización: May 22, 2014 ⏰

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