Él

Inspiración 3(? + 8vo sueño

-¿Terminar?¿Eso quieres?¿Después de todo lo que pasó? Claro, así de fácil son las cosas para ti. Ignoras todo lo que pasamos juntos, todas las cosas que he hecho por ti, todo lo que he sufrido y dejado de lado para estar juntos, ¿Y quieres dejarme así sin más? Simplemente no puedo creerlo. ¿Qué acaso nunca ibas a dejarme sola? ¿Qué no era especial para ti, que deseabas una vida juntos? Y yo me creí todo como una tonta. Ya había creado en mi mente cada momento que esperábamos vivir. Yo siempre imaginaba cómo viviríamos juntos, realizando los viajes que deseamos hacer, adoptando todos los gatos que queramos...
-Suspira y ríe entre dientes-
Y una que me gustaba mas, me imaginaba una casa, hermosa, te imaginaba a ti, si, a ti, viejo, a mi, vieja, y un niño, corriendo hacia nosotros, hacia ti, gritando "Abuelo, ¿Cómo conociste a mi abuela?" y tu le contabas sobre la primera vez que nos vimos, todas las aventuras que hemos tenido. Y si, apenas tengo 17, pero siento que tengo edad suficiente como para decir "He sentido algo muy fuerte por alguien, no se si sea amor, pero me ha hecho sentir...¿Especial? Fue la sensación mas fuerte que he sentido por alguien, que no fuese mi familia, obviamente." Tu, Miguel, me has hecho sentir única.-
    Escuchaba toda la conversación por el tubo del teléfono. Su mejor amiga Vanina, entendía a la perfección lo que le estaba pasando, sentir algo así de fuerte por alguien, lo entendía bien. Estaban charlando cuando se acercó Miguel, su nov...ex novio, para decirle que no podía seguir con ella, que el negocio familiar, junto con la escuela y otras cosas, no iba a poder dedicarle tiempo. Muchas veces han acordado horarios para hablar y poder hacer cada uno sus cosas, pero fue en vano. Ella quería seguir luchando porque lo quería mucho. Danielle pensaba en el día en que su novio le había terminado. Se sentía igual que Vanina. Ella también había imaginado mil cosas junto a ese chico, pero aun así, Él no quiso continuar. Cuando Miguel pidió disculpas por cuarta vez, se fué, dejando a Vanina al borde de las lágrimas. Danielle tampoco podía creer lo que pasaba entre esos dos, con lo tiernos que se veían juntos. Se le encogió el corazón  al escuchar la quebrantada voz de su amiga. Hizo ademán de decirle que fuera a su punto favorito de encuentro, que le invitaba un batido, así podían charlar. Y así fue. Llegaron, pidieron y se sentaron. Le contó todo a pesar de que ya haya escuchado lo que decían. Vanina lloraba tratando de contenerse, entre los brazos de su amiga. Sabía muy bien que Danielle comprendía cómo se sentía. La quería tanto. Se querían tanto. Luego fueron a distraerse, y llegada la noche, se fueron a sus respectivos hogares.
    Danielle llegó y recordó, como hacía seguido, el día que Él le había terminado. Tanto le había dolido y tanto le duele aún. cree que algún día podrá dejar todo eso atrás. Miraba las pocas gotas de lluvia caer por su ventana, mientras lágrimas caían por su cara. Seguía pensando en todo lo que vivieron juntos, en todo lo que les faltaba vivir, en  todos los planes que tenían.
    Bebió el último sorbo de café que tenía en una taza violeta, regalo de Vanina por su cumpleaños, y decidió seguir escribiendo el resumen de un libro. Estuvo así dos horas, cuando el efecto del café deja de funcionar. El café nunca le funcionaba por mucho tiempo, más cuando lo hacía cargado. Decidió ir a dormir y tratar de olvidar todo eso. Dió mil vueltas, hasta que al rato consiguió conciliar en sueño.

Estaba en la escuela, en uno de los salones junto a dos de sus amigos, una pareja, y Él. Charlaban y reían, mientras ese par de tórtolos se abrazaban. Seguían riendo de las tonterías que hablaban y la chica le da un corto y suave beso a su novio. Danielle mira a Él, cuando este ya estaba a centímetros de su cara. Y también la besa suavemente en sus labios. Fue un beso un poco más largo, pero tierno. Siguieron hablando normalmente, hasta que Él se acerca a su oído y le pregunta:
   -Danielle, ¿Te gustari...-

Danielle se despierta ante el brillo del sol en su cara. Había olvidado cerrar la persiana la noche anterior. Se da vuelta y recuerda el sueño que acaba de tener. Atún, su pequeño gato blanco, se acostó a su lado, ronroeando. Ella empezó a acariciarlo, pensando en porqué suele soñar de ese modo con su ex. Recordó todo lo que ayer Vanina le había dicho a Miguel y al mismo tiempo se le venía a la mente los mismos pensamientos que tenía ella con Él. Y supo, que olvidar a ese muchacho, no le sería muy sensillo, intente lo que intente.

788 palabras en la historia, me superé :'v
Espero que quede claro que no voy a darle nombre a Él. Quiero dejarlo como Anónimo.