-acomoda tus cosas en está habitación.-hablo Kensuke animado.-a enlistáté por que iremos a cenar con mi hermano.-
-entiendo gracias.-dije entrando a la habitación.
Me acerque a la cama y comencé a sacar mi ropa de la maleta.
-Hasekura.-
-dime.-hable poniendo toda mi atención en el pequeño de Ken. A pesar de que le pedí que me llamará por mi nombre lo hace por mi apellido.
-no quiero que te sientas incómodo por mi comentario pero... Bésás demasiado bien.-hablo con la cara sumamente roja.
-Kensuke...-
-baja cuando termines.-dijo para después irse corriendo,sin duda Ken es la persona que quiero a mi lado,pero no creo que sea correcto.
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Me bañé,me cambie y salí de mi habitación.
-ha,¿usted es Hasekura?-me dí la vuelta y logré ver a una chica de cabello rojizo,quién me miraba esperando respuesta.
-así es.-
-así que usted es quién vivirá aquí con el joven Oshiba.-
-¿quién es usted?-pregunté queriendo terminar la conversación.
-mi nombres es Chizuku.-hablo con una sonrisa.-un placer conocerlo.-
-igualmente.-
-con su permiso.-se fue quién sabe a donde,¡milagro! Es la primera mujer que siento que no se atóntó cuando me vio.
-¡Hasekura!-escuche aquella voz que me encantaba.-luces bien.-hablo con una sonrisa.
-gracias.-
-vamos.-salimos de aquella lujosa casa y subimos a la camioneta color arena,la cual era conducida por un hombre que todo el camino se quedó callado,además no lo podía ver bien,pues había una cortina que separaba los asientos de enfrente con los de atrás.
-escucha Hasekura mi hermano puede ser difícil,así que no le tomes mucha importancia a lo que sea que diga.-
-de acuerdo.-hable mirando por la ventanilla.
La mano de Ken acarició mi mejillá,volteó suavemente mi rostro,me sonrió y se acerco para besarme,demonios,¿por que Ken tiene que ser mi droga? Seguí aquel dulce beso,en un rápido movimiento Kensuke subió a mi y se sentó en mi regázó rodeando mi cuello,yo en cambio puse mis manos sobre su pequeña cadera,podía escuchar a Ken soltar pequeños gémídós y su fracaso de jalar aire mientras nuestros labios se movían al compás y nuestras lenguas jugaban entre ellas. Ken puso sus manos en mis mejillas y suavemente comenzó a descender a mi cuello,su tacto me hacia herizár la piel,las cosas cambian cuando estas siendo tocado por la persona que amas,Kensuke se apartó un poco y susúrro sobre mis labios.-quiero ser tuyo Hasekura.-aquellas palabras me tomaron por sorpresa.
Ladié una sonrisa,abrazé a Ken pegandólo demasiado a mi cuerpo y hable.-provocamé y lo haré.-Ken sonrió y bajo de mi.
-continuaré en la casa,ya llegamos al restaurante.-la camioneta se estaciónó y ambos bajamos.
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-nii~chan está tardando.-hablo Ken mirando su reloj.-hay que entrar.-
