La Obsesión De Ethan

Capítulo 5

"Nuestra propia persona trata de advertirnos cuando algo anda mal, ahora, te toca descubrir si lo que crees es cierto o solo una simple paranoia".

Capítulo 5:"Volvió".

Narrado por Lauren.

El sol matutino me hacia sentir tan relajada, las primeras horas del domingo fueron tan cómodas y más cuando todas mis tareas estaban concluidas desde el viernes en la madrugada.

Era mi estrategia, hacer todo antes del fin de semana y asi poder divertirme con mis amigos o tan solo pasar el día durmiendo.

Esta noche habrá una fiesta estudiantil en una de las casas de los chicos y no pensaba en ir.

— Hey pelinegra— La voz de Harmony me sobresaltó.

— ¿Como éstas, chica desaparecida?— La escucho reír a mis espaldas y acomodarse a mi lado en el cesped.

— Por ahi, divirtiendome un poco y esas cosas— Su cabello rizado era pelirrojo y alborotado.

— Eso suena genial pero, ¿Sola? ¿Algún chico que te haga perseguirlo?— La interrogo y su sonrisa de niñata la delata de inmediato.

— Si, me gusta desde hace meses y me parece encantador. Me hace ver la vida con otros colores y le gusto, yo le gusto Lau— Estaba tan emocionada y me alegraba saber que estaba tan feliz.

— Me encanta— Muevo su cabello como loca y lo dejo mas alborotado de lo que estaba.

— Me hace tan feliz— La veo suspirar y desearía encontrar a alguien que de solo verlo me haga suspirar así.

....

— Vamos chicas, tenemos que estar divinas para la fiesta— La voz chillona de Harmony mas el grito de emoción de Normany era otro día mas sorda.

No iría, bueno, ahora si. Las chicas me convencieron y ya habían comprado entre las dos un vestido para mi.

Astutas.

— Me siento una prostituta— Dije al salir y verlas silbar.

— Si, pero una con clase— Contesta la castaña haciendo un chasquido con sus manos.

— Esta demasiado corto— Me mire en el espejo y vi un hermoso pero algo atrevido vestido negro.

El de Harmony era un azul marino verdaderamente seductor.

y el de la castaña era color negro estilo princesa.

Prefería cambiar de vestido con el de ella, era mas decente para mi.

— Mejor cambiemos de vestido— Le sugerí con cara de perro.

— Es que tal vez no te quede, lo mande a ajustar y tienes mas pechos que yo— Asenti y decidí quedarme con este.

La fiesta empezaría en una media hora y el maquillaje todavía faltaba junto con los peinados.

Al final optamos por los que vimos en internet.

Llegamos más rápido de lo que pensé y le pagamos al taxista. Había un alboroto increíble, personas por todos lados del lugar y luces de neón llenando los alrededores.